Putin rechaza la expansi¨®n militar de Estados Unidos

El presidente de Rusia, Vlad¨ªmir Putin, anunci¨® ayer que su pa¨ªs ha decidido declarar una moratoria al cumplimiento del Tratado sobre Armas Convencionales en Europa (CFE, en sus siglas en ingl¨¦s), uno de los grandes s¨ªmbolos del final de la guerra fr¨ªa, por considerar que la OTAN trata de lograr "ventaja unilateral" militar en el continente. En el discurso anual sobre el estado de la naci¨®n, Putin denunci¨® a fuerzas extranjeras, sin concretar cu¨¢les, que, a su juicio, emplean una ret¨®rica democr¨¢tica para financiar con crecientes recursos una "injerencia directa" en Rusia con el fin de expoliarla y desestabilizarla. El l¨ªder pidi¨® al Parlamento que acelere las enmiendas legislativas para endurecer los castigos contra el extremismo.

El dirigente confirm¨® que dejar¨¢ el poder al concluir su mandato en 2008. "El pr¨®ximo discurso sobre el estado de la naci¨®n ser¨¢ pronunciado por un nuevo presidente", dijo. Pero advirti¨®: "Es demasiado pronto para hacer mi testamento pol¨ªtico".

La moratoria al CFE se prolongar¨¢ "hasta que todos los pa¨ªses de la OTAN sin excepciones ratifiquen este acuerdo y comiencen a cumplirlo estrictamente, como Rusia lo hace hoy, de forma unilateral", afirm¨® Putin, quien propuso debatir el problema en el Consejo Rusia-OTAN y "si no hay progreso en las conversaciones, examinar las posibilidades de cancelar nuestras obligaciones en el CFE".

La estrategia rusa tiene pues dos fases, y aunque no queda claro cu¨¢nto durar¨¢ la primera, una fuente del Kremlin dijo a la agencia Itar-Tass que Mosc¨² se daba un plazo de un a?o para decidir sobre si abandonar o no el CFE.

Putin prosigui¨® ayer sus razonamientos del pasado febrero en M¨²nich, donde advirti¨® sobre las modificaciones en la arquitectura de seguridad en Europa. El tratado se firm¨® en 1990 y, tras la disoluci¨®n del Pacto de Varsovia, se adapt¨® a las nuevas realidades en 1999. El documento final de aquella cumbre entrar¨¢ en vigor cuando lo ratifiquen todos sus participantes, cosa que s¨®lo han hecho Rusia, Bielorrusia, Ucrania y Kazajist¨¢n.

Condiciones de la OTAN

Para no ratificar el tratado, los Estados de la OTAN alegan que el Kremlin no cumple dos compromisos adquiridos en Estambul: retirar los contingentes militares que mantiene en Georgia y en la regi¨®n secesionista del Transdni¨¦ster (Moldavia). El argumento, no obstante, resulta d¨¦bil ahora que las tropas rusas abandonan Georgia con m¨¢s rapidez de lo previsto y en el Trasdni¨¦ster quedan s¨®lo 1.500 hombres con armas ligeras que cumplen tareas de pacificaci¨®n y custodian dep¨®sitos de municiones de la ¨¦poca sovi¨¦tica.

Putin reiter¨® ayer que el CFE no est¨¢ "jur¨ªdicamente vinculado" a los acuerdos de Estambul, lo que da a Rusia "fundamento pleno" para afirmar: "Nuestros socios se comportan como m¨ªnimo de forma incorrecta, tratando de conseguir una superioridad unilateral".

El presidente calific¨® de "excusa inventada" las razones occidentales para no ratificar y acus¨® a la OTAN de incrementar el sistema de bases militares junto a las fronteras rusas. Afirm¨® que los nuevos miembros de la Alianza, como Eslovaquia y los Estados del B¨¢ltico, que no se unieron al CFE, crean un "peligro real con sorpresas imprevisibles" para Rusia.

En M¨²nich, Putin ya habl¨® del "estado de crisis" del CFE y mencion¨® a Bulgaria y Ruman¨ªa, que han negociado acuerdos para instalar bases militares norteamericanas en su territorio. En aquellos dos pa¨ªses ex miembros del Pacto de Varsovia "aparecen bases de 5.000 hombres cada una y nosotros, cumpliendo estrictamente el acuerdo CFE no reaccionamos a estas acciones", se?al¨® entonces.

Los planes de EE UU para instalar un sistema de defensa antimisiles en Europa "exigen", en opini¨®n de Putin, un debate en la Organizaci¨®n para la Seguridad y la Cooperaci¨®n en Europa (OSCE), ya que no son problema exclusivo de las relaciones ruso-norteamericanas, sino que afectan a los intereses de todos los pa¨ªses europeos, miembros o no de la Alianza.

"Ya es hora de llenar las actividades de la OSCE de contenido real, de hacer que la organizaci¨®n aborde los problemas que de verdad preocupan a los pueblos de Europa y no busque s¨®lo las pulgas en el espacio post-sovi¨¦tico", dijo. Est¨¢ por ver c¨®mo responder¨¢ la presidencia espa?ola de la OSCE al envite.

Medios diplom¨¢ticos occidentales mostraban ayer comprensi¨®n por los argumentos rusos y opinaban que la instalaci¨®n de infraestructura militar en Bulgaria y Ruman¨ªa contradice el esp¨ªritu del acuerdo Rusia-OTAN de 1997 y supone el retorno de postulados de la Guerra Fr¨ªa. El Kremlin no cree en los argumentos de Washington, seg¨²n los cuales el despliegue b¨¦lico, tanto convencional como estrat¨¦gico, producto de la nueva doctrina militar estadounidense, no va dirigido contra Rusia. La desconfianza se impone en las relaciones este-oeste. "Europa es la mesa de ping pong entre Rusia y EE UU", afirmaba una fuente diplom¨¢tica occidental, pero no como un terreno de juego neutral, sino como un espacio dividido en dos bandos, que difieren en la percepci¨®n de la amenaza, aunque ambos sean miembros de las mismas instituciones.

Ayer, Putin no consider¨® siquiera las cr¨ªticas occidentales a la democracia en Rusia, sino que las desafi¨®, mostrando su satisfacci¨®n por el desarrollo de las leales instituciones del sistema, como el parlamentarismo, las ONG y los medios de comunicaci¨®n, sin olvidar mencionar que hay 25 millones de usuarios de Internet en el pa¨ªs.

En Mosc¨², una concentraci¨®n en solidaridad con los manifestantes golpeados el 14 y el 15 de abril reuni¨® ayer a unas 250 personas (los organizadores hab¨ªan pedido permiso para 2.000 y las autoridades hab¨ªan autorizado 500), informa Rodrigo Fern¨¢ndez. La polic¨ªa no intervino en el mitin, entre cuyos oradores estuvo el ex jefe de Gobierno Mija¨ªl Kasi¨¢nov, uno de los l¨ªderes de la oposici¨®n radical.