Galdos asume que la debilidad del tripartito obliga al nacionalismo a contar con el PSE

El presidente de EA de Guip¨²zcoa, I?aki Galdos, cuyos siete junteros se han convertido en una fuerza decisiva para gobernar ese territorio, reconoci¨® ayer que la realidad de los resultados electorales del domingo es "tozuda" -"es la que es", destac¨®- y tiene que hacer reflexionar al nacionalismo hist¨®rico sobre la debilidad del tripartito como "eje central" de la pol¨ªtica. "Es insuficiente para avanzar en un proceso de normalizaci¨®n y de gobernabilidad en la Euskal Herria actual", asumi¨®. Galdos, quien ya ha mantenido un contacto informal con el socialista Miguel Buen, ganador de los comicios en Guip¨²zcoa, a?adi¨® que EB-Aralar ya se ha "autoexcluido" del futuro Gobierno foral con la defensa de su programa.

Galdos, quien ha obtenido los mejores resultados de EA en las pasadas elecciones y ha convertido a su partido en la llave de la gobernabilidad en Guip¨²zcoa, compareci¨® ayer p¨²blicamente para reflexionar sobre el nuevo panorama pol¨ªtico. Avanz¨®, a grandes rasgos, pero de forma clara y en l¨ªnea con su planteamiento pragm¨¢tico, su posici¨®n a la hora de decidir cu¨¢l ser¨¢ la opci¨®n de EA para definir el signo del futuro Ejecutivo foral.

Galdos resulta decisivo para hacer posible un gobierno presidido por un socialista por vez primera en la Diputaci¨®n de Guip¨²zcoa, en manos del nacionalismo democr¨¢tico los ¨²ltimos 25 a?os, en ocasiones, eso s¨ª, con el apoyo del PSE. Esa f¨®rmula, cuya posibilidad dej¨® entrever el dirigente de EA -incluso como un bipartito de ambas formaciones- supondr¨ªa un verdadero vuelco en el panorama guipuzcoano, donde el PSE se ha ido consolidando a nivel municipal, pero su fuerza no se hab¨ªa reflejado en el mapa foral hasta ahora.

El dirigente de EA tambi¨¦n puede optar por un tripartito junto con el PNV y la coalici¨®n de izquierdas EB-Aralar, aunque destac¨® que ¨¦sta se ha "autoexcluido" con su programa. Tampoco descarta, aunque le parece improbable, un pacto entre el PNV y el PSE, las dos fuerzas mayoritarias, empatadas a 16 junteros cada una, aunque los socialistas lograron unos 5.000 votos m¨¢s.

"Tozuda" realidad

Buen ya adelant¨® ayer que su partido aspira a gobernar Guip¨²zcoa "desde la moderaci¨®n, con un proyecto s¨®lido, progresista e integrador". Su iniciativa hasta ahora no ha pasado de un contacto "informal" con el l¨ªder de EA.

Las reflexiones de Galdos sobre el papel del nacionalismo y la gobernabilidad de Guip¨²zcoa muestran que sus preferencias se orientan claramente a incorporar al PSE e involucrarle en Euskadi y Navarra, al tratarse de un partido clave a la hora de "gestionar la pluralidad" que han reflejado las urnas. "El eje central [el tripartito m¨¢s Aralar] es insuficiente y, si tenemos en cuenta la correlaci¨®n de fuerzas entre el Pa¨ªs Vasco y Navarra, dif¨ªcilmente podremos avanzar en un proceso de normalizaci¨®n y gobernabilidad si no es con el PSE", dijo.

La "tozuda" realidad a la que aludi¨® Galdos a la hora de describir la debilidad "matem¨¢tica" del tripartito para abordar un proceso de normalizaci¨®n y la gobernabilidad del pa¨ªs explica su claro desmarque de esa f¨®rmula, la oficialmente preferente para el PNV, en especial para sus dirigentes guipuzcoanos. El l¨ªder peneuvista en esta provincia, Joseba Egibar, ya se ha mostrado partidario de ponerlo en marcha con la incorporaci¨®n de EB-Aralar.

Este ¨²ltimo va a tener una aliada en la presidenta de EA, Bego?a Errazti, quien ayer se pronunci¨® abiertamente en contra de cualquier coalici¨®n de gobierno con los socialistas, quienes han lanzado una oferta a EA tanto en Guip¨²zcoa como en Alava. "Me pregunto para qu¨¦ servir¨ªa un gobierno entre estas dos formaciones", declar¨® ayer Errazti a la emisora Herri Irratia. La presidenta de EA defendi¨® acuerdos "entre abertzales" y se mostr¨® partidaria del tripartito, "una de las opciones muy reales". Errazti y Galdos encabezan los dos sectores enfrentados en la direcci¨®n de EA.

No deja de ser parad¨®jico el choque de posiciones que se da en el seno de EA, enfrentada a sus propias contradicciones. Tras un dur¨ªsimo debate interno en el que gan¨® finalmente la l¨ªnea oficial partidaria de presentarse en solitario, defendida por Errazti y la mayor¨ªa de su direci¨®n, esta f¨®rmula ha resultado una clave de su ¨¦xito en Guip¨²zcoa, donde la direcci¨®n provincial, encabezada por Galdos, prefer¨ªa reeditar la coalici¨®n con el PNV. Acudir a las urnas en solitario le ha permitido librarse del castigo que han sufrido los peneuvistas.

Aquel choque interno en EA va a repetirse al decidir el signo de sus pactos. Los mensajes lanzados por el sector oficial de Errazti desde la misma noche electoral resultan sistem¨¢ticamente favorables a una alianza nacionalista cimentada sobre el "derecho a decidir". Esta postura es frontalmente opuesta a la que apunta Galdos cuando se muestra partidario de "avanzar con el PSE" y reclama una diversidad de formulas de gobierno como respuesta m¨¢s realista para gestionar la realidad plural de Euskadi.