Un alto cargo de Aguirre anima a objetar una asignatura obligatoria

El director general de Centros Docentes del Gobierno regional, Javier Rest¨¢n, sostiene que la asignatura Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa podr¨ªa causar "da?os en la conciencia de los hijos", y anima por ello a los padres a adoptar la objeci¨®n de conciencia ante ella. Seg¨²n Rest¨¢n, el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero quiere "sustituir la responsabilidad de los padres en la educaci¨®n moral de los hijos".

En un art¨ªculo publicado en la revista Huellas, del movimiento cat¨®lico conservador Comuni¨®n y Liberaci¨®n, el alto cargo a?ade que los progenitores "pueden apelar al derecho de objeci¨®n de conciencia" frente a esa materia. Una portavoz de la revista asegur¨® ayer que Rest¨¢n fue invitado a elaborar un art¨ªculo sobre la asignatura. "No le dimos ning¨²n tipo de directriz", dijo. Desde la Consejer¨ªa de Educaci¨®n se?alaron ayer que Rest¨¢n hab¨ªa escrito el art¨ªculo "a t¨ªtulo personal".

La nueva materia -con contenidos referentes a la Constituci¨®n y a los Derechos Humanos- no gusta ni a la Conferencia Episcopal ni al PP, que se ha opuesto a que sea obligatoria. En Madrid empezar¨¢ a impartirse a partir del curso 2008-2009 para los alumnos de segundo de ESO. Sus detractores dicen que abre la puerta al "adoctrinamiento", por lo que promueven entre los padres la objeci¨®n de conciencia.

En la pasada campa?a electoral, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, anunci¨® que permitir¨ªa a los objetores sustituir la asignatura por actividades de voluntariado. El Ministerio de Educaci¨®n respondi¨® que eso ser¨ªa ilegal, y el l¨ªder del PP, Mariano Rajoy, se?al¨® al d¨ªa siguiente que "hay que cumplir la ley", si bien prometi¨® eliminarla si llega al poder.

La preocupaci¨®n que la asignatura suscita entre algunos padres se justifica, seg¨²n Javier Rest¨¢n, "pues ha sido introducida en el sistema educativo con la intenci¨®n de que se convierta en un ¨¢rea de formaci¨®n de la conciencia moral c¨ªvica". "No se trataba, en la mente de sus propulsores, de dar a conocer los fundamentos de nuestro sistema pol¨ªtico, sino de crear una moral ciudadana".

Para el director general de Centros Docentes, la esencia del problema es la pretensi¨®n del Estado "de convertirse en educador y moralizador". "Y para ello trata de usar un instrumento tan poderoso como la escuela obligatoria", critica. "La asignatura de educaci¨®n para la ciudadan¨ªa es la manifestaci¨®n del fracaso de la educaci¨®n como tal", prosigue.

El director general califica el contenido de la materia de "sistematizaci¨®n de lo pol¨ªticamente correcto". "Bien mirado, se trata de consejitos para portarse bien", a?ade. "Se censura el sentido religioso que constituye la din¨¢mica esencial del hombre y, por tanto, del ciudadano, y se parte de una concepci¨®n reductiva del hombre, donde se elimina su relaci¨®n personal y exclusiva con el Misterio. Desaparece la persona, llega el ciudadano. Adi¨®s a la religi¨®n, bienvenida la educaci¨®n para la ciudadan¨ªa".

El director de centros docentes apela a la objeci¨®n de conciencia con esta asignatura: "Una opci¨®n que, m¨¢s all¨¢ de las consecuencias acad¨¦micas o de otra ¨ªndole que pueda acarrear, debe tenerse seriamente en cuenta cuando no haya otros medios para evitar un da?o mayor a la conciencia de sus hijos", sostiene.

El movimiento Comuni¨®n y Liberaci¨®n tiene car¨¢cter conservador y sus responsables fueron recibidos recientemente por el papa Ratzinger. En Madrid gestionan el colegio concertado J. H. Nevmann, en San Blas, que empez¨® a funcionar en el curso 2005-2006 con pol¨¦mica porque ped¨ªa "donativos" a los padres que aspiraban a una plaza para sus hijos.