Los nuevos estadistas redefinen las alianzas en Europa

Angela Merkel, Nicolas Sarkozy, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y Tony Blair -con Gordon Brown al otro lado del hilo telef¨®nico- entraron y salieron la noche del viernes del despacho de la delegaci¨®n francesa en el Consejo Europeo de Bruselas. En sus manos qued¨® la negociaci¨®n con los polacos, el principal obst¨¢culo para que el texto sobre la reforma del Tratado de la Uni¨®n llegara a buen puerto, despu¨¦s de que los brit¨¢nicos vieran satisfechas todas sus exigencias. Esta nueva generaci¨®n de pol¨ªticos cocin¨® los t¨¦rminos del acuerdo, y de alguna manera anunci¨® una reactivaci¨®n de las tradicionales alianzas entre las grandes capitales europeas.

Son j¨®venes y pragm¨¢ticos y han dejado atr¨¢s a las grandes figuras de la pol¨ªtica europea como Fran?ois Mitterrand o Helmut Kohl, con sus monumentales proyectos y deseos de integraci¨®n en la Uni¨®n. El pragmatismo ha quedado reflejado como nunca en esta cumbre, en la que se ha enterrado definitivamente la gran enso?aci¨®n de dotar a Europa de una Constituci¨®n. A cambio se han sentado las bases para el llamado Tratado de Reforma, que agilizar¨¢ el proceso de toma de decisiones en una Europa a Veintisiete. No habr¨¢ bandera, ni himno, ni un ¨²nico texto legal que derogue a los dem¨¢s y que simbolice la unidad de Europa, pero se contar¨¢ con las reglas que, seg¨²n los nuevos l¨ªderes, les permitir¨¢n lidiar con un panorama internacional dominado por el trepidante crecimiento de las econom¨ªas emergentes.

La relaci¨®n de Zapatero y Sarkozy ha sido un flechazo, a juzgar por sus declaraciones

Haber logrado un acuerdo en Bruselas sobre la reforma de las instituciones europeas permite aparcar por un tiempo las diferencias sobre el futuro de Europa y las peleas entre federalistas y soberanistas. El nuevo l¨ªder del laborismo y pr¨®ximo primer ministro brit¨¢nico, Brown, el presidente franc¨¦s, Sarkozy, y la canciller alemana, Merkel, tres j¨®venes liberales y atlantistas, tienen ahora v¨ªa libre para estrechar sus relaciones, tal vez en detrimento de los peque?os y medianos pa¨ªses de la UE. Aunque advert¨ªa hace unos d¨ªas Kurt Lauk, europarlamentario conservador alem¨¢n y presidente del consejo econ¨®mico que asesora al Gobierno de Berl¨ªn: "Los ejes no pueden funcionar como el motor que eran en el pasado. Ahora, en la Europa a Veintisiete, hay que funcionar con los dem¨¢s. Con Espa?a, con Polonia".

La qu¨ªmica en el eje Par¨ªs-Berl¨ªn funcion¨® a la perfecci¨®n en Bruselas. Los esfuerzos de Sarkozy por sacar adelante el mandato que dar¨¢ origen al nuevo Tratado de Reforma de la Uni¨®n Europea muestran no s¨®lo su deseo de colocar a Francia y a ¨¦l mismo en el centro de Europa, sino tambi¨¦n de impulsar el languidecido eje franco-alem¨¢n. Sarkozy ha trabajado codo con codo con la canciller alemana. No s¨®lo durante la cumbre, en la que se convirti¨® en un mediador imprescindible. En las ¨²ltimas semanas, el presidente franc¨¦s recorri¨® las capitales europeas en busca de apoyo a la propuesta alemana de Tratado de Reforma de la Uni¨®n.

Blair, que a pocos d¨ªas del inicio de la cumbre amenaz¨® con reventarla si no se descafeinaban las funciones del nuevo ministro de Exteriores, se incorpor¨® despu¨¦s a las negociaciones in extremis con los polacos. Quiso salir por la puerta grande en su ¨²ltima cumbre europea. Falta por ver si su sucesor, Gordon Brown, temido en Bruselas por su escaso euroentusiasmo, conecta con las capitales del Viejo Continente casi tan bien como con el aliado estadounidense. Las elecciones en Reino Unido en 2009 y sobre todo, un posible refer¨¦ndum sobre el Tratado europeo complicar¨ªan las relaciones de Londres con el resto de socios europeos. "La sensibilidad de los brit¨¢nicos respecto a Europa es muy grande y Brown no va a sacrificar su Gobierno para arreglar los problemas de Europa", piensa Denis MacShane, ex secretario de Estado para Europa de Blair.

La tradicional alianza hispano-francesa tambi¨¦n sali¨® ganando de la cumbre. Lo de Zapatero y Sarkozy ha sido un flechazo, a juzgar por las declaraciones del uno y del otro. Mientras el presidente franc¨¦s agradeci¨® en su ¨²ltima conferencia de prensa hasta tres veces al espa?ol su colaboraci¨®n durante la reuni¨®n, "a pesar de que su pa¨ªs aprob¨® por abrumadora mayor¨ªa el refer¨¦ndum de la Constituci¨®n", Zapatero explic¨® que su relaci¨®n con Sarkozy es cada d¨ªa "m¨¢s intensa y m¨¢s agradable".

La alianza hispano-francesa no es nueva. En tiempos de Jacques Chirac, el presidente franc¨¦s corrigi¨® el tiro del ex presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, quien mostr¨® una mayor sinton¨ªa con el mundo anglosaj¨®n. Adem¨¢s, el ¨²ltimo encuentro entre Par¨ªs y Madrid, y el deseo de Sarkozy de potenciar la uni¨®n euromediterr¨¢nea y trabajar codo con codo con Espa?a en el campo de la inmigraci¨®n auguran unos tiempos de una estrech¨ªsima colaboraci¨®n.