"Lo m¨¢s divertido en India son los malentendidos al hablar"

El escritor Agust¨ªn P¨¢niker acaba de publicar Los sikhs (Kair¨®s), obra que profundiza en el universo de esta comunidad social y religiosa originaria del Punjab. Este experto, enamorado de Asia, nos habla de sus periplos por India.

Pregunta. All¨ª habr¨¢ vivido todo tipo de situaciones chocantes.

Respuesta. Muchas veces. Lo m¨¢s divertido son los continuos malentendidos a causa del idioma. En un hotel, por ejemplo, llam¨¦ por tel¨¦fono y dije "Por favor, quiero dos coca-colas, p¨ªdalas al restaurant", y al rato suena el tel¨¦fono y un tipo me dice "Ya puede usted llamar a Rajast¨¢n". Y as¨ª, todo el rato.

P. ?Fue extravagante su primer viaje al Punjab?

R. M¨¢s bien complicado. Fue a Amristar, la capital espiritual de los sikhs. Era 1988 y lo acababan de abrir a los extranjeros, ya que no hac¨ªa mucho de la intervenci¨®n del Ej¨¦rcito indio.

P. ?Visit¨® la ciudad sin problema?

R. S¨ª, y el recibimiento fue muy hospitalario. Lo malo es que unos d¨ªas despu¨¦s se volvi¨® a imponer el toque de queda.

P. Y se acab¨® el turismo.

R. En realidad, no, porque s¨®lo los extranjeros ten¨ªamos libertad de movimiento. Era extra?o pasear por las tardes; la ciudad estaba completamente desierta y al ¨²nico que me encontraba por la calle era a un noruego.

P. ?Qu¨¦ le recomienda al viajero en Amristar?

R. El templo dorado, sin duda. Hay que ir al amanecer, cuando transportan el libro sagrado al interior del templo con cientos de fieles arremolinados alrededor. Da igual que te interese o no la religiosidad o la cultura sikh; es algo que hay que ver.

P. ?Y en el resto de India?

R. Mi rinc¨®n predilecto es una regi¨®n poco conocida del sureste llamada Coorg. Es una zona monta?osa cerca del mar, en la provincia de Karnatake, donde dicen que todav¨ªa quedan tigres en libertad.