Argentina se queda sin carburante
Una galopante crisis energ¨¦tica de la que oficialmente no se habla pone en riesgo el fuerte crecimiento del pa¨ªs andino
"La Argentina est¨¢ creciendo, bienvenido este tipo de problemas", ha dicho el presidente N¨¦stor Kirchner en una de las tantas ocasiones en que se ha referido al desabastecimiento energ¨¦tico que padece desde hace meses la tercera econom¨ªa de Am¨¦rica Latina. Claro que ni el presidente ni sus funcionarios pronuncian la palabra "crisis", quiz¨¢s para que no se la compare con la de 1989, que estall¨® en plena crisis econ¨®mica e hiperinflaci¨®n.
Entre los 4.000 grandes usuarios con consumo el¨¦ctrico restringido est¨¢n BBVA, Santander, Telef¨®nica, Mapfre y Aerol¨ªneas Argentinas
Argentina, que en lo que va de a?o ha crecido un 8,1%, sufre cortes en el suministro de gas, electricidad y gas¨®leo. El objetivo del Gobierno es que no falte el gas y la electricidad en los hogares en pleno invierno austral y a tres meses de las elecciones presidenciales.
En mayo, en pleno oto?o austral, comenz¨® el fr¨ªo y la demanda de gas y electricidad para la calefacci¨®n se dispar¨® y el Gobierno decret¨® las primeras interrupciones del suministro de gas a la industria y a las gasolineras que venden gas natural comprimido a 1,4 millones de coches. Tambi¨¦n recort¨® la provisi¨®n de electricidad a los grandes usuarios. Adem¨¢s, escaseaba el gas¨®leo justo cuando los agricultores deb¨ªan levantar una cosecha r¨¦cord de soja, la principal exportaci¨®n del pa¨ªs. Pero en junio y julio, con la llegada del invierno, las temperaturas bajaron incluso por debajo de lo normal (nev¨® en Buenos Aires por primera vez en 89 a?os). La falta de energ¨ªa se agrav¨® y la crisis que se ven¨ªa anunciando desde 2004 empez¨® a materializarse.
Unas 4.000 grandes usuarios de electricidad deben ahorrar desde junio la mitad de su consumo entre las 16 y las 24 horas de cada d¨ªa. En la lista de afectados figuran oficinas de los bancos BBVA y Santander, de Telef¨®nica, de Mapfre y de Aerol¨ªneas Argentinas (grupo Marsans). En las empresas deben apagar luces y ordenadores y usar menos los ascensores.
La mayor¨ªa de los perjudicados son f¨¢bricas: algunas comenzaron a trabajar de noche, otras invirtieron en generadores a gas¨®leo o fueloil (combustibles m¨¢s caros que la electricidad o el gas) y en algunos casos se resignaron a reducir producci¨®n y empleo. Pero entre los que ahorraron tambi¨¦n aparecen algunos templos, casinos, hip¨®dromos, complejos de cines, teatros, urbanizaciones, clubes como Boca Juniors o River Plate, parques de atracciones, supermercados, aeropuertos y hoteles de lujo.
Tarifas congeladas
Los cortes son m¨¢s frecuentes en los barrios de chabolas, donde las conexiones son precarias. Edesur, distribuidora de Endesa en Buenos Aires, dice que los inconvenientes son "puntuales" y los atribuye a la mayor demanda de los peque?os usuarios, que creci¨® en junio el 17%. Las tarifas de los hogares y del peque?o consumidor est¨¢n congeladas desde 2002, aunque la inflaci¨®n acumulada desde entonces asciende al 98%. En gas, el consumo dom¨¦stico tambi¨¦n sube y las tarifas siguen igual.
Por si fueran poco los problemas, tambi¨¦n escasea el agua en algunas presas de la Patagonia y del l¨ªmite con Uruguay. Y el 45% de la electricidad es de generaci¨®n hidr¨¢ulica. Argentina, antes este panorama, se ha visto obligada a incrementar sus importaciones el¨¦ctricas desde Brasil y Paraguay.
La falta de gas tambi¨¦n complica a las generadoras t¨¦rmicas, responsables del 50% de la producci¨®n el¨¦ctrica de Argentina. Estas centrales terminan usando gas¨®leo y fueloil, lo que reduce en un 20% su capacidad de generaci¨®n.
Hasta el domingo pasado 900 industrias estaban sin gas. Algunas han invertido en plantas de gas propano o en generadores para sustituirlo. Otras dejaron de producir, como el fabricante de fertilizantes Profertil, propiedad de Repsol y la canadiense Agrium.
Los cortes de gas a la industria derivaron en una intervenci¨®n del Gobierno en la distribuidora de Buenos Aires, Metrogas, controlada por la brit¨¢nica BG y participada por Repsol. El 5 de este mes, las gas¨ªferas y la Secretar¨ªa de Energ¨ªa hab¨ªan decidido reanudar las interrupciones por las bajas temperaturas, pero al d¨ªa siguiente el pol¨¦mico secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, intervino Metrogas por unas horas para desplazar a su director general por presunta "impericia".
La prensa argentina dice que Endesa, una de las mayores generadoras de Argentina y due?a de Edesur, tambi¨¦n corre el riesgo de intervenci¨®n, pero por ahora sigue operando con normalidad.
Una ola de fr¨ªo polar llev¨® a suspender entre el 11 y el 14 de julio el suministro de gas a los coches. Los taxis y los transportistas pudieron comprar gasolina a mitad de precio, al mismo que el del gas, pero en cuant¨ªa racionada.
En los ¨²ltimos d¨ªas, sin embargo, coches y f¨¢bricas han vuelto a tener gas. En las distribuidoras lo atribuyen a las mayores temperaturas. El Gobierno lo adjudica al inicio de un nuevo plan llamado "Energ¨ªa Total", por el que el Estado subvencionar¨¢ a las petroleras para que importen gas¨®leo y fueloil y que se lo vendan a industrias y centrales t¨¦rmicas a bajo precio. De esta manera, f¨¢bricas y generadoras consumir¨¢n menos gas. Repsol YPF fue la primera en sellar un acuerdo de provisi¨®n y lo hizo con una central de Endesa.
El gas boliviano
La falta de gas se mitiga en parte con importaciones de Bolivia y con recortes a las ventas de gas argentino a Chile, que carece de este combustible y hoy apenas puede abastecer a los hogares.
La falta de gas¨®leo tambi¨¦n origin¨® disputas entre el Gobierno y las petroleras. Repsol y sus competidoras subieron en junio los precios de la gasolina y el gas¨®leo, congelados desde 2003, pero el Ejecutivo las presion¨® para que dieran marcha atr¨¢s a la medida. Despu¨¦s, la petrolera espa?ola anunci¨® que suspend¨ªa la compra de combustibles con tarjetas de d¨¦bito y cr¨¦dito, pero el Gobierno otra vez le pidi¨® que no lo hiciera. Las compa?¨ªas pretend¨ªan desalentar el consumo del escaso gas¨®leo y de la gasolina, que en Argentina sobra, pero es m¨¢s rentable exportarla, seg¨²n un representante de las gasolineras, Ra¨²l Castellano. Al menos Repsol no sufri¨®, como la brasile?a Petrobras y la angloholandesa Shell, sanciones por desabastecimiento del mercado.
Causas de una debacle anunciada
La oferta de energ¨ªa no alcanza para cubrir la demanda, pero la discusi¨®n entre el Gobierno, las empresas y los analistas radica en si la responsabilidad corre por cuenta de las pol¨ªticas de privatizaci¨®n y liberalizaci¨®n de la d¨¦cada pasada, la crisis de 1998-2002 o la mayor intervenci¨®n estatal -con precios congelados e impuestos a la exportaci¨®n- que impuso el actual presidente desde 2003.
La producci¨®n de petr¨®leo cae desde 1998, cuando se inici¨® la crisis y el precio internacional del barril era bajo, no como hoy. Las reservas de 'oro negro' cayeron desde 2000 a 2006, cuando empezaron a recuperarse.
Desde hace a?os, las refiner¨ªas no dan abasto para abastecer de gas¨®leo a los agricultores y peri¨®dicamente hay que importarlo a precio internacional. Los automovilistas pagan en Argentina por el litro de gas¨®leo 35 c¨¦ntimos de euro (en Espa?a 97).
La producci¨®n de gas est¨¢ estancada y las reservas caen des de 2000. Kirchner y su par boliviano, Evo Morales, abrir¨¢n en agosto una subasta para construir un gasoducto desde Bolivia a la provincia de Buenos Aires, que se terminar¨¢ en 2009.
La generaci¨®n el¨¦ctrica se incrementa a?o tras a?o, pero la ¨²ltima central se termin¨® de construir en 2000. El Gobierno est¨¢ levantando dos nuevas generadoras que empezar¨¢n a operar en 2008. Endesa gestionar¨¢ una de ellas. El Estado adem¨¢s prev¨¦ acabar en 2010 con la construcci¨®n de una nuclear y la ampliaci¨®n de la capacidad de generaci¨®n de una hidroel¨¦ctrica.
En el Instituto Argentino de Energ¨ªa General Mosconi consideran que las pol¨ªticas implementadas por Kirchner sirvieron para "administrar la crisis en lo inmediato, pero no han resuelto los problemas de fondo".
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