Luz al final del 't¨²nel' energ¨¦tico con Argelia

"Se ve luz al final del t¨²nel". Bernardino Le¨®n, el n¨²mero dos de la diplomacia espa?ola, prev¨¦ que los m¨²ltiples contenciosos econ¨®micos con Argelia se van a ir resolviendo. Junto con el titular de Industria, Joan Clos, particip¨® en las ¨²ltimas conversaciones con el ministro argelino de Energ¨ªa, Chakib Khelil. ?ste hizo hace una semana, a su regreso de una visita rel¨¢mpago a Madrid, su primera declaraci¨®n esperanzada: "Hay novedades, el asunto est¨¢ en buen camino". "Soy optimista".

Las tensiones con el pa¨ªs magreb¨ª, que surgieron tras la llegada del PSOE al poder, empiezan a apaciguarse

La empresa argelina ceder¨¢ a la catalana un 10% del capital del gasoducto Medgaz, como le pidi¨® el ministro Clos

Sonatrach y Gas Natural se disponen a pactar un aumento del precio del gas que elevar¨¢ un 3% la factura

La luz que se vislumbra tendr¨¢ un coste. La factura del gas aumentar¨¢ entre un 2,5% y un 3%, seg¨²n fuentes del sector. Sonatrach, el mastodonte argelino de los hidrocarburos, subir¨¢ entre un 10% y un 12% el precio -hoy inferior al de otros contratos internacionales- del gas que suministra a Gas Natural a trav¨¦s del gasoducto Duran Farrell, el que atraviesa el norte de Marruecos. El alza repercutir¨¢, a su vez, en el consumidor. Dentro de esa negociaci¨®n, que contin¨²a abierta, Khelil accedi¨® a que Sonatrach ceda el 10% del Medgaz a Gas Natural como parte importante del proceso. La empresa espa?ola asegura que no ha sido oficialmente invitada a participar en Medgaz y que, si en alg¨²n momento se plantea, lo estudiar¨¢.

El t¨²nel que evoca ahora Le¨®n empez¨® a erigirse con la llegada de los socialistas espa?oles al Gobierno en 2004. El entonces ministro de Industria, Jos¨¦ Montilla, tard¨® m¨¢s de un a?o, hasta junio de 2005, en declarar prioritario el proyecto de gasoducto Medgaz que para Argelia reviste car¨¢cter estrat¨¦gico. A esa disputa se a?ad¨ªan las desavenencias pol¨ªticas sobre el S¨¢hara Occidental.

Optimismo oficial

Joan Clos sosten¨ªa en el Senado, en junio, que no ten¨ªa constancia de que hubiera "ning¨²n problema" con relaci¨®n a Medgaz. Diez d¨ªas antes, Khelil hab¨ªa advertido de que Argelia pod¨ªa licuar su gas y exportarlo a otros mercados en vez de transportarlo hacia Espa?a a trav¨¦s de ese gasoducto. Medgaz, que se empezar¨¢ a construir a fin de a?o, ser¨¢ el segundo gasoducto que una Argelia con Espa?a. El primero, Duran Farrell, entr¨® en funcionamiento en 1995.

El nuevo gasoducto partir¨¢ de Beni Saf y, tras recorrer 200 kil¨®metros sumergido en el Mediterr¨¢neo, desembocar¨¢ en Almer¨ªa. Cuando empiece a funcionar, en 2009, transportar¨¢ 8.000 millones de metros c¨²bicos de gas al a?o.

Argelia es ya hoy d¨ªa el primer proveedor energ¨¦tico de Espa?a, no tanto a causa del petr¨®leo que le suministra, sino del gas. Le proporciona un tercio de su consumo. ?sta es, adem¨¢s, la energ¨ªa cuyo uso m¨¢s crece en la Pen¨ªnsula.

Medgaz es el primero de los tres conflictos energ¨¦ticos que tiene visos de resolverse. Estall¨® con fuerza el a?o pasado cuando la francesa Total y la brit¨¢nica British Petroleum vendieron sus acciones en el gasoducto. Sonatrach se qued¨® con la mayor parte, alcanzando una participaci¨®n del 36%.

Ese alto porcentaje le daba, en teor¨ªa, derecho a vender directamente en Espa?a 3.000 millones de metros c¨²bicos de gas, pero Industria s¨®lo le autoriz¨® a comercializar un tercio de esa cantidad. Paralelamente, la Comisi¨®n Nacional de la Energ¨ªa (CNE), el regulador energ¨¦tico, puso ocho condiciones dr¨¢sticas al incremento de la participaci¨®n de Sonatrach en Medgaz. Khelil puso el grito en el cielo y present¨® recursos.

Cuando Khelil visit¨® Madrid, el pasado 19 de julio, pact¨® con Clos que Sonatrach coloque directamente 2.000 millones -un 6% del consumo total espa?ol-, pero respetando los precios vigentes. A cambio, el Consejo de Ministros elimin¨® el grueso de las exigencias impuestas por la CNE a Argelia.

Operaci¨®n bajo cuerda

Bajo cuerda, Khelil accedi¨® adem¨¢s a que Sonatrach ceda un 10% de Medgaz a Gas Natural, pese a que esta empresa rehus¨® en su d¨ªa entrar en el capital del gasoducto; trat¨® incluso de boicotearlo. La decisi¨®n final depender¨¢ de la negociaci¨®n entre las dos empresas, aunque fuentes de la Administraci¨®n espa?ola consideran probable que se logre esa participaci¨®n.

"Hice dos viajes a Espa?a para convencer a sus directivos de que se sumasen al proyecto, pero fracas¨¦", recordaba en primavera el ministro argelino a EL PA?S despu¨¦s de que Clos le pidiera que la firma catalana participase en Medgaz.

Para que Sonatrach transfiera parte de sus acciones a Gas Natural es necesario, primero, que ambas pacten el aumento del precio del gas que la primera vende a la segunda. Sonatrach, que ha dado los primeros pasos para recurrir a un arbitraje internacional, exige un 20% de aumento, pero se conformar¨ªa con, aproximadamente, la mitad, un porcentaje aceptable para la parte espa?ola.

El tercer frente abierto es el del yacimiento de Gassi Touil, el mayor proyecto encargado en Argelia a un consorcio extranjero. Repsol y Gas Natural lograron, en 2004, adjudicarse la exploraci¨®n, producci¨®n, licuaci¨®n y comercializaci¨®n de cuatro millones de toneladas al a?o de gas, pero los costes de ingenier¨ªa se han disparado hasta el punto de hacer dudar de su rentabilidad. Las empresas espa?olas quieren renegociar las condiciones y, si no lo consiguen, se retirar¨¢n.

Bernardino Le¨®n, el alto cargo de la diplomacia espa?ola en el que los argelinos tienen plena confianza, insist¨ªa el viernes en que se va allanando el camino para que Espa?a "establezca con Argelia una relaci¨®n estrat¨¦gica". "Ser¨¢ tan estrat¨¦gica que al final les acabaremos tambi¨¦n comprando electricidad producida por las centrales nucleares que Francia les vender¨¢", coment¨® un diplom¨¢tico espa?ol despu¨¦s de escucharle.

El presidente franc¨¦s, Nicolas Sarkozy, visit¨® el 10 de julio Argel, donde pidi¨® garant¨ªas en el suministro de hidrocarburos a Francia -la ex metr¨®poli colonial es s¨®lo su cuarto cliente energ¨¦tico despu¨¦s de Espa?a- y ofreci¨® proporcionarle, a cambio, la "energ¨ªa del futuro", es decir, la nuclear.