Iban Mayo ensombrece de nuevo el ciclismo
El Saunier Duval suspende al corredor vizca¨ªno tras informar la UCI de su positivo por EPO durante la carrera francesa
Dando la raz¨®n, un argumento m¨¢s, a todos aqu¨¦llos, cada vez m¨¢s, que piensan que el ciclismo es un deporte podrido, sin esperanza; un deporte de mentirosos y tramposos, m¨¢s un circo o un reality show que una lucha justa, el Saunier Duval anunci¨® ayer que Iban Mayo dio positivo por EPO en un control antidopaje efectuado el pasado d¨ªa 24, jornada de descanso del Tour en Pau. El equipo dirigido por Josean Fern¨¢ndez Matxin apart¨® de forma provisional al ciclista espa?ol y prometi¨® que lo despedir¨¢ si el contraan¨¢lisis confirma finalmente el positivo.
El de Mayo, que el 17 de agost¨® cumplir¨¢ 30 a?os y que acab¨® el 16?, es el tercer positivo anal¨ªtico de la ¨²ltima grande boucle, una edici¨®n marcada por los esc¨¢ndalos de dopaje y la retirada de algunos equipos, de algunas televisiones y de algunos medios de comunicaci¨®n que declararon al Tour muerto y reclamaron su suspensi¨®n. Durante la carrera se conocieron el del kazajo Alexander Vinok¨²rov por transfusi¨®n de sangre -el Astana anunci¨® ayer su despido- y el del italiano Cristian Moreni por testosterona. Tambi¨¦n se anunci¨® la testosterona del alem¨¢n Patrick Sinkewitz por un control de un mes antes. El Tour lo gan¨® Alberto Contador despu¨¦s de que la direcci¨®n de la carrera forzara al Rabobank a retirar al l¨ªder, el dan¨¦s Michael Rasmussen, por no indicar debidamente su paradero a los inspectores antidopaje.
Si alguien aceptara apuestas de que el de Mayo es el ¨²ltimo anuncio se le podr¨ªa tildar de loco o inconsciente. El hecho de que se esperara a que terminase el Tour para hacerlo p¨²blico, sin enturbiar el fin de semana de Par¨ªs, es tambi¨¦n un s¨ªntoma de que la carrera est¨¢ manejando los tiempos para su beneficio, como ya lo hizo el a?o pasado con el anuncio del positivo del estadounidense Floyd Landis.
"Es imposible, es imposible", le dijo Mayo a Matxin en cuanto ¨¦ste le comunic¨® la noticia. Como el 99% de los deportistas, el ciclista vizca¨ªno de Igorre se refugi¨® en la negaci¨®n de los hechos; de un positivo que, adem¨¢s de poner en peligro la continuidad del patrocinio por parte de la filial espa?ola de la firma francesa de calderas y aire acondicionado, seg¨²n confirm¨® Matxin, ampl¨ªa la sombra, el valor de la sospecha, sobre la victoria de Contador, cuya credibilidad han puesto en duda numerosos medios por su paso por el Liberty, equipo protagonista en la Operaci¨®n Puerto. "Si se confirmase lo de Mayo, ser¨ªa una pena que hubiera otro esc¨¢ndalo", dijo Contador en su fiesta de Pinto.
La EPO de Mayo pone de manifiesto adem¨¢s la falta de compromiso de muchos corredores con la renovaci¨®n de costumbres que les exige la sociedad y los poderes econ¨®micos que los sustentan, organizadores y patrocinadores. Y con los compa?eros que s¨ª que han comprendido la necesidad del esfuerzo y se sienten enga?ados. "Nadie debe poner la mano en el fuego por nadie, por nadie", confiaba ayer un ciclista profesional muy desilusionado por el positivo de alguien que durante muchos a?os simboliz¨® el ciclismo de toda una tierra, el Pa¨ªs Vasco, donde se convirti¨® en un ¨ªdolo de multitudes: "Hemos llegado a un estado en el que cada uno va por su cuenta, tiene sus h¨¢bitos y no conf¨ªa en nadie. La lucha contra el dopaje, cada vez m¨¢s severa, ha conseguido que se instale en el pelot¨®n la filosof¨ªa de arriesga al m¨¢ximo para pillar lo que puedas, que esto se va a acabar pronto".
Antes de comenzar el Tour, Mayo protagoniz¨® otro caso cuando se conoci¨® que hab¨ªa resultado no negativo por testosterona durante el Giro de Italia, en el que gan¨® una etapa. An¨¢lisis posteriores descartaron que la testosterona detectada fuera artificial y el corredor sali¨® indemne, ya que posee un certificado que justifica que su cuerpo produce m¨¢s de la habitual.
Su director, Matxin, joven pero con h¨¢bitos de vieja escuela, de los que les gusta saber todo lo que se cuece en el equipo, se mostr¨® anoche abatido e impotente. "Voy a tener que acabar registrando todos los d¨ªas a los corredores", dijo; "a desnudarlos". Sin embargo, esta primavera, su equipo, que domin¨® varias carreras de forma espectacular, como la Vuelta al Pa¨ªs Vasco, estuvo ya en el punto de mira de la Uni¨®n Ciclista Internacional (UCI) despu¨¦s de que la federaci¨®n recibiera una carta de un corredor del equipo denunciando las pr¨¢cticas de algunos compa?eros.
"Es imposible, es imposible", declar¨® tambi¨¦n Roberto Heras cuando se anunci¨® que hab¨ªa resultado positivo por EPO en un control durante la Vuelta a Espa?a de 2005, que gan¨®.
La doble coincidencia indica dos cosas: la creencia del ciclista en la impunidad absoluta de sus hechos -la creencia en que las microdosis de EPO o las transfusiones con sangre extra¨ªda despu¨¦s de un tratamiento con EPO son indetectables- y la cada vez mayor eficacia de los controles antidopaje.
Los especialistas de la UCI cada vez afinan m¨¢s, cada vez distinguen con m¨¢s precisi¨®n a los deportistas m¨¢s sospechosos. Los d¨ªas clave en la estrategia son los d¨ªas de descanso, en los que los corredores reciben en el hotel la visita de familiares y amigos que muchas veces les transportan los productos que ser¨ªa peligroso llevar en la maleta todo el Tour.
El mi¨¦rcoles, el d¨ªa siguiente del control, fue la etapa reina del Tour, la del Aubisque, en los Pirineos. Mayo, que se hab¨ªa destacado en los Alpes quedando segundo en Tignes tras Rasmussen, se escap¨® en Larrau, dur¨ªsimo, con Sastre y Soler y s¨®lo fue capturado iniciada la ¨²ltima ascensi¨®n, el Aubisque, despu¨¦s de haber pasado Larrau, Belagua y Marie-Blanque.
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