Recuperaci¨®n a pan y cuchillo
Toni El¨ªas se restablece de su rotura de f¨¦mur en casa del mismo fisioterapeuta de Armstrong
En el n¨²mero 19 de la carretera que cruza Quart, un pueblecito de los alrededores de Girona, hay el centro de fisioterapia Rihuma. La entrada es modesta, la que puede tener cualquier casa de pueblo: una puerta met¨¢lica con un cartel discreto en el que consta lo que ocurre en el interior. Bueno, s¨®lo parte de lo que ocurre. Encima del centro, en el segundo piso, ha estado viviendo las tres ¨²ltimas semanas Toni El¨ªas. Durante este tiempo, el piloto espa?ol de MotoGP ha tratado de acelerar al m¨¢ximo su recuperaci¨®n. El catal¨¢n se fractur¨® el f¨¦mur el 28 de junio pasado, en el circuito de Assen, durante los primeros ensayos del Gran Premio de Holanda. Apenas dos meses despu¨¦s de la ca¨ªda, El¨ªas volver¨¢ a subirse a la moto el viernes que viene para alistarse en el Gran Premio de la Rep¨²blica Checa. El corredor manresano no tiene reparos en reconocer que ha atravesado una de las etapas m¨¢s dif¨ªciles de su carrera. Si su sonrisa permanente no se le ha borrado ha sido gracias a las caricias de Ricard Hu¨¦lamo, el fisioterapeuta que le ha acogido en su casa de Quart.
"Con Ricard hicimos un pacto", explica el piloto. "Marcamos una serie de etapas que deb¨ªamos ir cumpliendo siempre con el objetivo de volver a correr en Brno [el circuito de la Rep¨²blica Checa]". Cuando se le pide que matice qu¨¦ tipo de etapas ha ido superando, el fisioterapeuta infiere: "Eso queda entre nosotros, es una cuesti¨®n m¨¢s mental y de compromiso que f¨ªsica. A veces, los pacientes se levantan un poco bajos de moral y hay que animarlos de alguna forma".
Hu¨¦lamo habla con conocimiento de causa. En el recibidor del centro hay una pared abarrotada de fotograf¨ªas de deportistas que han pasado por sus manos en un momento dif¨ªcil de sus carreras y que le dan las gracias por haberles ayudado. Est¨¢n Carlos Sainz, Zinedine Zidane, Nani Roma, Isidre Esteve, y muchos otros. Pero falta uno. Lance Armstrong. Como ahora El¨ªas, Armstrong tambi¨¦n vivi¨® en casa de Hu¨¦lamo. Estuvo tres meses, y durante ese tiempo, ambos salieron a entrenar en bicicleta muchas veces.
"?Yo ataqu¨¦ a Armstrong!", sonr¨ªe el fisioterapeuta. "Fue un d¨ªa, en 2003, en el Coll de Santa-Pellaia. Rod¨¢bamos en grupo, me escap¨¦ y me dijo: 'vete, vete, que cuando te pille te pasar¨¦ por encima", recuerda Hu¨¦lamo, un apasionado del ciclismo. "Armstrong era muy especial. Cuando entrenaba, pr¨¢cticamente no pod¨ªas ni mirarle a la cara".
Mientras habla, el recuperador aplica sobre la pierna de El¨ªas la terapia Indiba, una m¨¢quina de regeneraci¨®n celular que acelera la recuperaci¨®n de los pacientes que la emplean. Valentino Rossi la utiliza desde que ten¨ªa 15 a?os para recuperarse de las ca¨ªdas y para eliminar la fatiga de sus articulaciones. "La lesi¨®n que se hizo Toni
[una fractura en el peron¨¦ de 16 cent¨ªmetros en ala de mariposa] supone normalmente entre tres y cuatro meses de recuperaci¨®n. Con el plan que hemos seguido vamos a conseguir que se suba a la moto en menos de dos", explica Hu¨¦lamo.
Mientras le pasa la m¨¢quina por la zona afectada, el fisio est¨¢ muy atento. "Si me encanto, lo achicharro". El¨ªas, lo corrobora. "Me ha pegado unas quemadas brutales. Mis bramidos se o¨ªan desde Manresa", r¨ªe el piloto que, tras la sesi¨®n de camilla, se desplaza a la piscina particular de un amigo de Quart. "Gracias a la degravitaci¨®n, conseguimos no perder mucha musculatura y, adem¨¢s, tambi¨¦n trabajamos con una m¨¢quina que desprende descargas el¨¦ctricas y hace trabajar los m¨²sculos de la pierna". Con todo ello, El¨ªas ha conseguido su objetivo, reaparecer en Brno. Y en el recibidor del centro de fisioterapia de Quart, hay una nueva fotograf¨ªa dedicada.
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