La memoria de Ponteareas est¨¢ en las iglesias
Un equipo de arque¨®logos busca en dos atrios a 13 republicanos fusilados
Los llevaban a O Pinal do Foxo, a los pies del monte del Condado, donde lo sinuoso del camino (la antigua carretera de Madrid) imped¨ªa miradas indiscretas sobre qui¨¦n apretaba el gatillo. Sin embargo, este "lugar de memoria" (as¨ª denominan los expertos a aquellos rincones que esconden una historia) estaba lo suficientemente cerca para que el retumbar de los disparos llegase con toda claridad a los habitantes de aquella Ponteareas de 1936, que bautizaron el lugar con otro nombre: A Volta dos Escapados.
Ma?ana, un equipo de arque¨®logos abrir¨¢ dos fosas en los atrios de las iglesias de Areas y Xinzo, donde se encuentran sepultados 13 republicanos, cinco de Porri?o y el resto de Vigo, Bueu y Cangas. Ser¨¢ la primera vez que se realice una actuaci¨®n as¨ª en terrenos de la Iglesia que, en la persona del p¨¢rroco Manuel Carballo, ha facilitado que se lleven a cabo los trabajos. "Cuando las cosas se hacen con naturalidad", dice "no hay ning¨²n problema".
Ese lugar de la memoria fue escenario de numerosas batidas de falangistas y paramilitares, sabedores de que muchos perseguidos se refugiaban en esos montes del sur de Pontevedra. En alguna de sus cuevas llegaron a convivir m¨¢s de 50 hombres. Su compleja morfolog¨ªa hizo que tras los sucesos de Lavadores los huidos se adentrasen en este pinar.
A unos metros de donde los escapados se escond¨ªan, los falangistas mataban a sus v¨ªctimas -hay diecis¨¦is ejecuciones documentadas aqu¨ª aunque se presume un n¨²mero superior- que, al amanecer, eran encontrados sin vida por los campesinos. Los cuerpos se cargaban en carros y se acercaban a las iglesias. Antes de ser enterrados junto a la fachada posterior de los templos, pasaban por la denominada casa de las autopsias, donde se abr¨ªa un sumario.
El investigador ?ngel Rodr¨ªguez Gallardo, de la Asociaci¨®n para la Recuperaci¨®n de la Memoria Hist¨®rica, afirma que "el Juzgado de Instrucci¨®n de Ponteareas respondi¨® que tales sumarios no existen porque hace muchos a?os hubo un incendio y se perdi¨® el archivo del partido judicial".
Entre esos expedientes est¨¢ el 25/37, del que forma parte ?ngel Rodal Blanco, natural de Cangas. Su hermana Dolores, con 84 a?os, es una de las impulsoras de la exhumaci¨®n de ma?ana. Ella recuerda cuando lleg¨® a Vigo, donde le ten¨ªan preso, y le dijeron que se lo hab¨ªan llevado a la carretera de Madrid. Los vecinos le relataron que esa noche hab¨ªa habido disparos. Despu¨¦s, pudo identificar el cuerpo de su hermano que no tuvo la fortuna de su madre, a la que se llevaron para fusilarla, sin ¨¦xito, cuando ella ten¨ªa 15 a?os. Una historia familiar que quedar¨¢ recogida en un documental titulado Lola, realizado por Antonio Caeiro.
Setenta a?os despu¨¦s de aquellos episodios las heridas contin¨²an abiertas. Marcial Garc¨ªa, de 81 a?os y vecino de Ponteareas, recuerda casi como si fuera ayer el momento en que se llevaron a su padre preso a la isla de San Sim¨®n o cuando aquella Nochebuena, con el progenitor encarcelado, unos falangistas entraron en su casa y "echaron en el comedero de los cerdos" los jurelos que hab¨ªa preparado su madre para ¨¦l y sus hermanos. "Dec¨ªan que los hijos de los rojos no ten¨ªan por qu¨¦ cenar". La mirada recia de Marcial ratifica sus palabras: "Perdonar s¨ª, olvidar nunca".
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