Una historia de ¨¦pica abstracta
El pintor Jos¨¦ Manuel Ciria presenta en Vigo 'La Epopeya de Gilgamesh'
Lienzos de gran tama?o, explosiones de color y geometr¨ªas imposibles para una historia ¨¦pica. La Epopeya de Gilgamesh, uno de los textos literarios m¨¢s antiguos de la humanidad, fascin¨® al pintor espa?ol Jos¨¦ Manuel Ciria (Manchester, 1960) hasta el punto de convertirla en objeto de una serie pl¨¢stica compuesta por treinta y tres piezas. Una selecci¨®n de 13 ¨®leos sobre soportes diversos se puede visitar ya en el Centro Cultural Caixanova de Vigo hasta el pr¨®ximo 7 de octubre.
Es la cuarta vez que se muestra al p¨²blico este trabajo, realizado para el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires entre los a?os 2004 y 2005, antes de la marcha de Ciria a Nueva York, ciudad en la que reside en la actualidad. En la capital argentina se volvi¨® a exponer antes de la llegada de la muestra a Galicia, donde ya se exhibi¨® en Pontevedra tambi¨¦n de la mano de Caixanova.
La idea surgi¨® a trav¨¦s de una larga conversaci¨®n con el comisario de arte Marcos Ricardo Barnat¨¢n y enseguida el artista record¨® las lecciones recibidas sobre la epopeya en sus tiempos de estudiante. La charla discurri¨® por otras referencias literarias m¨¢s cercanas, como el escritor Jorge Luis Borges, a quien tambi¨¦n sedujo la b¨²squeda de la inmortalidad que recrea el pasaje legendario. La recreaci¨®n pict¨®rica del relato hallado en unas tabillas de barro en las ruinas de la antigua ciudad asiria de N¨ªnive plante¨® un reto sin precedentes para Ciria, puesto que, como artista abstracto, siempre hab¨ªa escapado de moldes narrativos que pudiesen condicionar su expresividad. Para mostrar su interpretaci¨®n de Gilgamesh deb¨ªa hacer justo lo contrario: convertir en abstracci¨®n una historia.
Como explica el pintor, "en los bocetos arrastraba m¨²ltiples componentes figurativos que a la hora de resolver se fueron cayendo hasta quedarse en un juego de b¨²squeda de elementos modulares". El resultado es una obra visceral, plagada de gestos y de formas presidida por el color rojo, seg¨²n Ciria, "el rey en el imperio de los colores". El gran formato de los cuadros, de m¨¢s de 2 metros de ancho por 2 metros de largo, potencia el car¨¢cter m¨ªtico del relato. Y en ellos, su creador investiga los l¨ªmites que se difuminan entre la figuraci¨®n y la abstracci¨®n. La narraci¨®n est¨¢ conseguida de manera que el espectador que conozca la epopeya pueda seguir el hilo de los acontecimientos a trav¨¦s de los cuadros. "De todos modos", a?ade el pintor, "siguiendo el orden expositivo es posible comprender el proyecto en su totalidad".
El tiempo lo dir¨¢, pero con esta serie el artista ha querido cerrar una etapa para marcar distancia con respecto a la que se abre para ¨¦l en su taller del Village neoyorquino. All¨ª encuentra los est¨ªmulos para superar "cierto agotamiento de estar en Espa?a" y la concentraci¨®n necesaria para cumplir con su f¨¦rrea disciplina de trabajo. Dice conservar las mismas texturas y su impronta, pero asegura que los proyectos que ahora est¨¢ desarrollando tienen poco que ver con lo realizado hasta 2005. "Vuelvo a la estructura y al lapicero, voy m¨¢s pautado y he reducido la paleta de color al negro, el blanco y algunas gamas de grises". A finales de a?o, Ciria regresar¨¢ a Espa?a para exponer en Gij¨®n. Ya para 2008, aguardan por sus nuevas producciones en Oporto, Par¨ªs y en la Fundaci¨®n Carlos de Amberes de Madrid.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.