Vicente, contra el m¨¦dico de Soler

La desconfianza de los jugadores y del t¨¦cnico del Valencia, Quique Flores, respecto al m¨¦dico del club, Antonio Giner, era un secreto a voces en el vestuario. Sobre todo desde que, en el curso pasado, se sucediera las lesiones y se alargaran los plazos de recuperaci¨®n. Las quejas se extendieron e incluso llegaron a los corrillos de la selecci¨®n, donde son mayor¨ªa los valencianistas. As¨ª ha sido hasta que el extremo izquierdo internacional Vicente, de 26 a?os, explotara el lunes en unas declaraciones al diario As: "Llevo dos a?os defendi¨¦ndolos [a los m¨¦dicos], pero no veo ninguna mejor¨ªa. No salgo de una lesi¨®n y recaigo o me meto en otra. Me pinchan y estoy una semana sin poder moverme del dolor. Y, encima, tengo que escuchar por ah¨ª que mi lesi¨®n no existe, que es psicol¨®gica. Es muy duro, no puedo m¨¢s. He perdido la confianza en el m¨¦dico. S¨®lo pido jugar 20 partidos seguidos". Desde que se lesion¨® por primera vez en el tobillo izquierdo, el 29 de septiembre de 2004, Vicente se ha perdido 70 partidos de su equipo, y s¨®lo ha disputado 49. Sus ¨²ltimas molestias son en los m¨²sculos isquiotibiales. Como respuesta a estas declaraciones, el Valencia expedient¨® ayer al jugador porque "vulnera las normas establecidas en el reglamento de r¨¦gimen interno de jugadores y t¨¦cnicos, pudiendo constituir dicha conducta una falta grave o muy grave".

Antonio Giner, especialista en medicina deportiva, s¨ª es de la absoluta confianza del presidente, Juan Soler, con quien mantiene una estrecha relaci¨®n. De hecho, los jugadores sospechan que detr¨¢s de la destituci¨®n del preparador de porteros a finales de la pasada Liga, Emilio ?lvarez, est¨¢n las duras cr¨ªticas de ¨¦ste a la labor de Giner. El vestuario entiende que Soler, a cambio de confirmar a Quique en su puesto, le exigi¨® que se desprendiera de su ayudante.

El calvario de Vicente entra en su cuarta temporada. Reci¨¦n elegido por los entrenadores como mejor futbolista espa?ol de la Liga 2005-06, Vicente se aprestaba, a los 24 a?os, a convertirse en el extremo izquierdo de referencia en Europa. As¨ª lleg¨® al campo del Werder Bremen, en la Champions de la siguiente campa?a, el fat¨ªdico 29 de septiembre. Vicente empez¨® arrasando, con un gol al poco de empezar. Todo brillaba a su alrededor hasta que, poco despu¨¦s, recibi¨® una patada de Borowski en el tobillo izquierdo. El extremo sigui¨® jugando con la articulaci¨®n maltrecha y recibi¨® el tiro de gracia: un balonazo con el pie en alto mientras formaba en la barrera de su equipo ante una falta en contra.

Desde entonces, Vicente ha ido encadenando una lesi¨®n tras otra cada vez que se atrev¨ªa a reaparecer. Primero un tobillo, despu¨¦s el otro y, entre medias, un sinf¨ªn de molestias musculares. El 3 de enero de 2005 fue operado por el m¨¦dico belga Marc Martens, que le retir¨® una parte del hueso astr¨¢lago para averiguar si era ¨¦sa la causa de las dolencias. ?stas, sin embargo, no han cesado. Y el jugador, desesperado, pidi¨® la ayuda de un psic¨®logo, aunque sea eso precisamente lo que le ha soliviantado contra los m¨¦dicos: que ¨¦stos filtraran que la lesi¨®n era m¨¢s mental que f¨ªsica.