Una telenovela demasiado humana

La sofisticada campa?a de prensa y mercadotecnia organizada por la familia McCann dio a conocer el caso al mundo. La vacilante investigaci¨®n policial, cegada por el poder, las c¨¢maras y los focos, lo alarg¨® en el espacio y el tiempo. La historia de Madeleine naci¨® como el alivio para el calvario de dos padres, ha dado una vuelta completa y hoy es una tortura de otro signo para los McCann, antes v¨ªctimas oficiales y hoy sospechosos, si no de la desaparici¨®n de su hija, al menos de haber construido la coartada del siglo. Iron¨ªa cruel, su esperanza ahora es el abogado de Pinochet.

La madre de Maddie ser¨¢ interrogada por la polic¨ªa brit¨¢nica esta semana

La ni?a es tan famosa como Harry Potter, y su madre, Kate, compite con Lady Di

Enganchado a esta telenovela demasiado humana que parece escrita por un guionista borracho, el p¨²blico alucina, analiza, critica, hace preguntas: es el primer suceso interactivo, las p¨¢ginas webs multiplican la sensaci¨®n de prisa, la irrealidad se impone. El ruido casi no deja o¨ªr, la potent¨ªsima luz de los focos apenas aclara nada. Hay cientos de periodistas rastreando la noticia, lejos y cerca, y ah¨ª surgen las especulaciones, hip¨®tesis, verdades y mentiras, filtraciones, y el p¨²blico quiere m¨¢s, y el ruido no solo no se apaga sino que va creciendo, y el monstruo aliment¨¢ndose con pelos y se?ales, detalles zafios, sangre. ?Hablamos -escribimos- sobre personas reales o sobre personajes de ficci¨®n? Da lo mismo, ?m¨¢s madera! En Francia un peri¨®dico dice que el an¨¢lisis ha confirmado una sobredosis, en Portugal un diario filtra la tesis de la bofetada, en Inglaterra otro aventura que la polic¨ªa ha utilizado pruebas falsas, en Espa?a este diario cuenta c¨®mo la polic¨ªa portuguesa maneja como posible m¨®vil de la desaparici¨®n del cuerpo los contactos y la ambici¨®n de Gerry McCann... Uno de sus hermanos, John McCann, aclar¨® ayer en una entrevista con Expresso que fue el propio primer ministro Gordon Brown quien se interes¨® por el caso, y matiz¨® que s¨®lo ¨¦l y su hermana Philomena se dedican a la pol¨ªtica, cosa que jam¨¢s Gerry pens¨® hacer. El caso Madeleine se ventila en la plaza p¨²blica con la velocidad irresponsable y moderna de la tertulia en directo. Los vaivenes de la fama, la construcci¨®n de una marca global solo en cuatro meses (FindMadeleine), la obsesi¨®n de Occidente por la seguridad, la ¨¦tica m¨¦dica, la presencia de celebridades, la conexi¨®n cat¨®lica, el factor econ¨®mico, las implicaciones Norte-Sur (?Sostiene Pereira!)... El caso est¨¢ lleno de aspectos fascinantes y de recovecos... ?Y la justicia, esa cosa tan antigua, lenta y met¨®dica, tarda tanto en pronunciarse! ?No podr¨ªa el guionista correr m¨¢s? A estas alturas mucha gente ve con espanto (y con raz¨®n) c¨®mo el mismo monstruo medi¨¢tico que tanto cuid¨® a la familia apabulla ahora, con la misma l¨®gica voraz, la condici¨®n de inocentes legales que deber¨ªa amparar a los McCann. Quiz¨¢ los padres de Madeleine no pensaron, ha escrito el analista Vasco Pulido Valente, que ¨¦se ser¨ªa el precio a pagar por depositar el caso en manos de la prensa al avisar a la cadena Sky News antes que a la polic¨ªa. Seg¨²n afirmaba ayer John McCann, fue otra hermana suya, Patricia, la autora de la llamada, y la hizo para pedir ayuda porque solo hab¨ªan llegado dos agentes al Ocean Club. Para Valente, esa decisi¨®n, inimaginable hace solo 20 a?os, ense?a a lo que ha llegado "la abyecta cultura democr¨¢tica de Occidente" construida en torno al poder ilimitado de los medios anglosajones. Solo existe lo que sale en los medios. El serial antiguo, dice Vicente Verd¨², reconvertido en el ¨¦xtasis de la incertidumbre. ?Pero acaso alguien sabe a estas alturas si este caso es un gran bulo.com, un Show de Truman a escala planetaria, una cortina de humo auspiciada por los centros de poder para desviar la atenci¨®n (?qu¨¦ har¨ªan cuatro equipos de la CNN el otro d¨ªa en Portim?o?), una haza?a policial o un linchamiento de inocentes? La locura en curso hace que la opci¨®n m¨¢s disparatada, o todas a la vez, suene plausible. Lo ¨²nico malo del caso es que no es una ficci¨®n. Esa ni?a de tres a?os que deb¨ªa cumplir cuatro el 12 de mayo es (o fue) real. El dolor de su familia (pasara lo que pasara) tambi¨¦n. En esta pel¨ªcula solo hay una certeza. La buena es Maddie y todos los dem¨¢s son (somos) sospechosos. Llegados a este punto, el follet¨ªn es imparable. Maddie es tan famosa como Harry Potter, y su madre, Kate, compite de igual a igual en afecto, odios y portadas con Lady Di. Aunque el motivo de su fama no sea un truco f¨¢cil, sino esa angustiosa forma de esfumarse de repente y no aparecer, mucha gente piensa que en la tozuda ausencia de Madeleine hay algo m¨¢gico, muy dif¨ªcil de explicar. No solo se esfum¨® sin dejar huellas (peor a¨²n, la polic¨ªa solo consigui¨® encontrar sus huellas 90 d¨ªas despu¨¦s de que se esfumara, el 8 de agosto), sino que su desaparici¨®n coincidi¨® con actos y decisiones poco claros. Pero, si analiz¨¢ramos cualquier nimio suceso cotidiano con un telescopio, ?no pasar¨ªa lo mismo? Por ejemplo: seg¨²n public¨® la prensa brit¨¢nica unos d¨ªas despu¨¦s de la desaparici¨®n, los propios McCann contaron inocentemente que aquella tarde los padres "jugaron un rato con los ni?os antes de darles el t¨¦ y meterlos en la cama". La polic¨ªa ha dejado filtrar su extra?eza. ?C¨®mo unos ni?os toman una bebida excitante antes de irse a la cama a una hora en la que todav¨ªa era de d¨ªa? Conclusi¨®n: teor¨ªa de los sedantes. ?Floja? Un momento. El abuelo de Maddie cont¨® hace d¨ªas a un tabloide que los padres de Maddie sol¨ªan usar Calpol, un inofensivo jarabe antit¨¦rmico, para ayudarles a dormir. Antes de eso, Sandra Felgueiras, que cubre el caso para la televisi¨®n RTP, pregunt¨® a los McCann si daban Calpol a los ni?os. Gerry hizo una mueca, baj¨® la mirada, luego lo neg¨®. Otro ejemplo. El 10 de agosto, cuando la polic¨ªa portuguesa acababa de decir por primera vez en p¨²blico que consideraba "muy probable" que Madeleine muriera la noche del 3 de mayo en su apartamento, sus padres lanzaron al mundo un v¨ªdeo de Laura Bush, esposa del presidente estadounidense, como parte de la campa?a abierta el 29 de mayo y llamada Don't you forget about me (No te olvides de m¨ª). "A trav¨¦s de este nuevo canal YouTube, el Centro Internacional para los Ni?os Desaparecidos y Explotados ofrece esperanza a padres que a¨²n est¨¢n buscando. Por favor, miren estos v¨ªdeos y estudien los rostros de estos ni?os desaparecidos", dice la primera dama. ?Alguien comprende que nadie parara ese lanzamiento si la investigaci¨®n policial hab¨ªa girado ya hacia la muerte de la ni?a? La batalla de la informaci¨®n-desinformaci¨®n hab¨ªa empezado el 4 de mayo. Exasperados con el hermetismo policial, los medios ingleses pidieron desde el primer d¨ªa briefings informativos, lograron que se nombrara un portavoz oficial para el caso (Olegario de Sousa, que ayer fue por cierto, dispensado del cargo), presionaron, sugirieron l¨ªneas de investigaci¨®n. El 6 de mayo, De Sousa dijo que la polic¨ªa no pod¨ªa decir si la ni?a estaba viva o muerta. Se habl¨® de pederastas, de tr¨¢fico de ¨®rganos, de rescates, todas las modalidades del rapto fueron puestas sobre la mesa. Maddie fue buscada en 15 kil¨®metros a la redonda. No apareci¨®. Los d¨ªas que no hab¨ªa novedades, algunos usaban la fantas¨ªa. El 12 de mayo, el corresponsal de sucesos de Sky News, entr¨® en directo y dijo: "Me dicen que un pueblo o aldea ha sido rodeado por la polic¨ªa en Sevilla, al sur de Espa?a. No es un viaje demasiado largo a trav¨¦s de la frontera". No era verdad, pero la audiencia no lo supo hasta el d¨ªa despu¨¦s. Lamentablemente para la familia de Madeleine, lo ¨²nico cierto es que la polic¨ªa ha descartado la tesis del rapto. Kate ser¨¢ interrogada de nuevo esta semana. El juez del caso ha autorizado el interrogatorio, que ser¨¢ realizado esta vez por la polic¨ªa brit¨¢nica y en el Reino Unido. El cuestionario est¨¢ basado en 40 puntos que los investigadores consideran esenciales, seg¨²n public¨® ayer Diario de Noticias. La burbuja de irrealidad ha explotado. Los McCann est¨¢n sufriendo y lo que queda puede ser muy largo. John McCann dijo ayer que "Gerry y Kate est¨¢n arrasados por lo que est¨¢n leyendo estos d¨ªas". Hicieran lo que hicieran, ?merece alguien tanto castigo? El monstruo no contesta, las rotativas est¨¢n rodando...