007 y Baudelaire

La cuarta jornada de Cibeles con las propuestas para el pr¨®ximo verano se abri¨® con negro (Spastor) y as¨ª sigui¨® Andr¨¦s Sard¨¢, que ha dado un giro a su estilismo hacia algo m¨¢s agresivo donde no faltan las alusiones a la dominaci¨®n y sus ceremonias. Sac¨® incluso el catal¨¢n un atemorizador gorro de verdugo y el maquillaje ten¨ªa ingredientes expresionistas, que se supone pasado por el filtro estil¨ªstico de Alberto Mutra, con un resultado de coherencia y plasticidad solvente. La motivaci¨®n estaba en la est¨¦tica de James Bond, agente 007 en sus a?os de esplendor, los setenta, con referencias a Ursula Andrews. Apareci¨® el neopreno y la licra listada con l¨²rex como antesala de la serie final de color en morado cuaresmal, amarillo cadmio y un verde casi petr¨®leo. Las prendas eran m¨ªnimas y poco adornadas, confiadas a la naturaleza del tejido.

Tras la explosi¨®n de sensualidad y el gusto barroco de Hannibal Laguna lleg¨® Locking Shocking con una colecci¨®n mixta cuando menos desconcertante. Los hombres aparec¨ªan marcialmente con aire retromilitar y la inspiraci¨®n se mostraba exc¨¦ntrica, con base en el orientalismo (capuchas y pantalones bereberes) y la solidaridad norteafricana, hasta llegar a la chilaba y el caft¨¢n. Todas las salidas fueron dobles, y de ah¨ª el t¨ªtulo de Mirror. Boleros, levitas, minivestidos drapeados, superposiciones con algo de intencionada arbitrariedad, fueron algunos de los elementos en juego donde abund¨® el blanco y la gama clara adem¨¢s de un estampado furioso en verde y naranja que quiz¨¢s contribuy¨® lo suyo al desconcierto.

Antonio Alvarado, discreto y lineal, hizo tambi¨¦n un desfile mixto inspirado en el malditismo. En cada silla esperaba un poema de Charles Baudelaire, pero la colecci¨®n era m¨¢s que inocente y estuvo muy bien presentada. Estilismo, decoraci¨®n y peluquer¨ªa muy esmerados, de lo mejor de Cibeles. Y su mejor prenda, un pichi con camisa en vichy. Ese mismo tejido apareci¨® plastificado en otras soluciones camiseras y en vol¨²menes con mucho aire. Tambi¨¦n hubo un calzoncillo boxer de raso con echarpe a juego, extra?a combinaci¨®n de prendas, que se supone son para lucir en la intimidad.

Sita Murt cerr¨® el d¨ªa con un desfile colorista, vivaz y de efecto en las texturas de punto, en lo que sigue siendo una experta solvente.

Tambi¨¦n hay que tener en cuenta las iniciativas fuera del ¨¢mbito de la pasarela oficial, pero que coinciden con el calendario. El mi¨¦rcoles por la noche present¨® sus propuestas Ion Fiz en la Real F¨¢brica de Tapices para hombre y mujer de manera soberbia y ma?ana lo har¨¢ Rocabert en el Ateneo de Madrid. Son dos nombres importantes de la pen¨²ltima generaci¨®n de creadores de moda, y ambos tambi¨¦n tienen una relaci¨®n no fructificada con Cibeles.

Por otro lado, a la puerta de la carpa, cuatro manifestantes vestidos ¨²nicamente con pantal¨®n corto, y en patines, escribieron unas pancartas exigiendo la vuelta de la pasarela al recinto feria de Ifema, defendiendo que el parque del retiro es un espacio p¨²blico.Antonio Alvarado, discreto y lineal, hizo un desfile mixto inspirado en el malditismo