Inocentadas y torpezas pol¨ªticas
El PP ha designado oficialmente a Javier Arenas como candidato a presidir la Junta de Andaluc¨ªa. Es la tercera vez que Javier Arenas va a concurrir a las elecciones auton¨®micas andaluzas. Las derrotas que sufri¨® en los a?os 1994 y 1996 no le impiden repetir. Tampoco el hecho de no haber practicado oposici¨®n al gobierno desde el Parlamento como, normalmente, se hace en democracia. Ni el hecho de haber sido derrotado en dos ocasiones, ni su ausencia del Parlamento andaluz han sido valoradas, ni por el nominado ni por la direcci¨®n del PP, como circunstancias relevantes que pudieran impedir su presentaci¨®n. Es m¨¢s, Mariano Rajoy, en la clausura de la convenci¨®n que cerr¨® el domingo en Granada, ha pedido una oportunidad para su pupilo. Mucha confianza debe tener Mariano en Arenas, aunque, en esto de pedir una oportunidad, se ha pasado un poco. M¨¢s en tierras taurinas; ya se sabe que, en esto de los toros, la oportunidad se les daba los maletillas cuando quer¨ªan empezar a torear y no a toreros consumados como es Arenas hasta el punto de que cuando se present¨® por primera vez era conocido como "el ni?o Arenas" y, ahora, como el mismo dice, se presenta con m¨¢s experiencia y con canas. Pero, en fin, dejemos al margen las razones de su grupo para volver a darle una oportunidad, ya que ser¨¢n las urnas las que digan el cartel que quieren en Andaluc¨ªa.
Eso s¨ª, mientras llega ese d¨ªa, no estar¨ªa nada mal que pol¨ªticos, gobernantes y no tanto, no enturbiaran nuestras cabezas y se pararan un poco en sus manifestaciones para no irse por el terreno de la incoherencia; tampoco que aprovecharan las tragedias para prometer y prometo en sus discursos su soluci¨®n. Los pol¨ªticos, todos pero m¨¢s a¨²n aquellos que llevan ya mucho corrido, deber¨ªan darse cuenta de lo que hacen y de lo que dicen. Una oposici¨®n seria no consiste en anunciar que los problemas se resuelven por el solo hecho de salir elegido, como ha hecho Javier Arenas, para los casos de violencia de g¨¦nero y siniestralidad laboral. Bien, en uno de ellos, anunciando un plan de protecci¨®n personalizado y contrataci¨®n de seguridad privada porque polic¨ªa y jueces en general deben ser un desastre o, bien, un gran pacto de agentes econ¨®micos y sociales con lo p¨²blico, como si al d¨ªa de hoy no existiera ninguno y no cont¨¢ramos con un cuerpo normativo preciso en esta materia. No obstante, como ya presentar¨¢ sus ideas, aguardaremos a sus magn¨ªficas soluciones. Sin embargo, en lo que no cabe esperar, pues ya las ha adelantado, es en conocer su opini¨®n sobre las nuevas medidas sobre acceso a la vivienda y polic¨ªa auton¨®mica. En cuanto a la vivienda, afirma que el acceso prometido es inviable. Sobre la segunda, dice que no quiere polic¨ªa auton¨®mica. Son cuestiones, aqu¨¦lla, que afectan a una mayor¨ªa de ciudadanos andaluces y es necesario explicar las causas de inviabilidad. Tambi¨¦n, si resultan inviables, sus alternativas. El ejercicio de un derecho constitucional, que afecta de manera fundamental a los andaluces que m¨¢s dificultades tienen para acceder a una vivienda digna, al regularse por Ley se est¨¢ garantizando por la propia Comunidad su acceso, y no puede despacharse por quien aspira a gobernar con un "yo no me lo creo". Y en cuanto a su no a la polic¨ªa auton¨®mica, es otra torpeza m¨¢s. Y es as¨ª porque no hace ni dos d¨ªas que esta aprobando el Estatuto de Autonom¨ªa para Andaluc¨ªa con el voto del PP, y el candidato ya est¨¢ en contra del Estatuto. Su no, y el de su grupo, chocan con el art¨ªculo 65 del Estatuto -que han votado- y en el que se declara que corresponde a la Comunidad Aut¨®noma la creaci¨®n, organizaci¨®n y mando de un Cuerpo de Polic¨ªa Andaluza dependiendo directamente de la Junta de Andaluc¨ªa.
Es lo que ya dec¨ªa en este enturbiar de algunos pol¨ªticos que hacen -han votado s¨ª al Estatuto- y se deshacen -no a lo que han dicho s¨ª- dos d¨ªas mas tarde. Claro que, tal vez, sea solo una broma; despu¨¦s de todo, como este candidato naci¨® un veintiocho de diciembre, festividad de los Santos Inocentes, a lo mejor ha sido una inocentada. A lo peor no, y la inocentada fue cuando dijo s¨ª al Estatuto.
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