Mill¨¢s conquista el Planeta con una evocaci¨®n de su ni?ez y adolescencia

En un af¨¢n de seguir elevando el list¨®n literario del galard¨®n iniciado ya en la edici¨®n del a?o pasado con ?lvaro Pombo, el Planeta distingui¨® ayer la potencia fabuladora del escritor y periodista Juan Jos¨¦ Mill¨¢s, que con una novela de corte autobiogr¨¢fico consigui¨® los 601.000 euros del premio mejor dotado de las letras espa?olas. Mill¨¢s present¨® la obra El mundo bajo el t¨ªtulo de A ciegas y el pseud¨®nimo de Tiresias, el vidente ciego de Tebas m¨¢s famoso de la literatura cl¨¢sica.

El autor gana los 601.000 euros del premio con 'El mundo', una novela autobiogr¨¢fica

En un af¨¢n de seguir elevando el list¨®n literario del galard¨®n iniciado ya en la edici¨®n del a?o pasado con ?lvaro Pombo, el Planeta distingui¨® ayer la potencia fabuladora del escritor y periodista Juan Jos¨¦ Mill¨¢s, que con una novela de corte autobiogr¨¢fico consigui¨® los 601.000 euros del premio mejor dotado de las letras espa?olas. Mill¨¢s present¨® la obra El mundo bajo el t¨ªtulo de A ciegas y el pseud¨®nimo de Tiresias, el vidente ciego de Tebas m¨¢s famoso de la literatura cl¨¢sica. Ayer tuvo explicaciones para ambos aspectos. "Ser vidente y ciego son las condiciones del escritor, que para ver tiene que escribir a ciegas", coment¨® en relaci¨®n al seud¨®nimo escogido. Sobre el t¨ªtulo asegur¨®: "No pod¨ªa llamarse de otro modo porque refleja el proyecto de un adolescente de escapar de esta calle, pero se la encuentra por todas partes porque el mundo era esa calle".

En un Palacio de Congresos de Catalu?a, en Barcelona, que congreg¨® a un millar de selectos comensales del sector editorial, el escritor valenciano admiti¨® que algunos aspectos de su biograf¨ªa tej¨ªan el hilo narrativo de la novela, en la que se presenta la ni?ez y adolescencia del protagonista, que de joven deja su mundo cargado de referencias para trasladarse con su familia a Madrid. Es algo que vivi¨® el propio escritor, el cuarto de nueve hermanos, y que contaba apenas seis a?os, seg¨²n record¨® ayer, cuando sus padres dejaron la Valencia natal para trasladarse a la capital. "Si se navega en la vida de los escritores, siempre hay algo que se rompi¨®", coment¨®. "Escribimos para rehacer lo que se rompi¨®. Tengo claro qu¨¦ pas¨® antes y despu¨¦s de los seis a?os. En esa infancia, no fui feliz".

La adolescencia, el asalto del recuerdo y el paso del tiempo se dibujan como un tema recurrente en Mill¨¢s, como ratifica el ¨²ltimo articuento -as¨ª ha bautizado su particular mezcolanza entre periodismo y literatura- que tiene colgado en su p¨¢gina oficial en Internet, titulado Biograf¨ªa. En esta obra, que el escritor reconoci¨® que ten¨ªa escrita desde hacia a?os aunque por pudor no la public¨®, juega con las palabras que le transportan a todos los objetos que han pasado a lo largo de su vida. Ese recuerdo no deja de ser una variante del tema de la identidad y del doble que ha marcado buena parte de su trayectoria literaria, que arranc¨® en 1972 cuando abandon¨® sus estudios de Filosof¨ªa y Letras y decidi¨® presentar la historia Cerbero son las sombras al premio S¨¦samo de novela corta, que gan¨® en 1974 y que le permiti¨® ver publicado su primer libro en 1975.

Vendr¨ªan despu¨¦s una serie de novelas m¨¢s formales -Visi¨®n del ahogado (1977), El jard¨ªn vac¨ªo (1981)-, que cosecharon a la par ventas modestas y cr¨ªticas elogiosas, pero que no daban pistas del que acabar¨ªa siendo uno de los grandes nombres de la narrativa espa?ola de los 80.

La primera prueba del nacimiento de un escritor diferente, del Mill¨¢s en estado puro, ser¨ªa Letra muerta (1984), donde empezar¨ªa sus particulares inspecciones a la conciencia de los personajes, a entrometerse literariamente en los recovecos piscol¨®gicos con un estilo de una falsa transparencia.

El formalismo qued¨® definitivamente dinamitado con El desorden de tu nombre (1988), donde Mill¨¢s encontr¨® su distancia y un formato al que despu¨¦s recurrir¨ªa otras veces: una novela como contenedor o semilla de sus cuentos. Hab¨ªa ganado gran capacidad de atracci¨®n de los lectores como demostr¨® s¨®lo dos a?os despu¨¦s cuando en 1990 obten¨ªa el premio Nadal con La soledad era esto. La eclosi¨®n de su figura le llevar¨ªa a realizar las primeras colaboraciones estables en prensa, en este mismo diario, y que le permitir¨ªan con el paso del tiempo abandonar su trabajo en la compa?¨ªa a¨¦rea Iberia. La recopilaci¨®n de sus art¨ªculos en Algo que te concierne (1995) marcar¨ªa el despegue de una actividad que ha acentuado su juego favorito: el de borrar las fronteras entre realidad y ficci¨®n y el de ofrecer siempre la otra mirada, en algunos casos cercana a la irrealidad.

El orden alfab¨¦tico (1998), No mires debajo de la cama (1999) y Dos mujeres en Praga (2002, premio Primavera de novela), completan la biblioteca b¨¢sica de un autor que con el Planeta ha conseguido el tercer gran premio literario de su carrera, otorgado en su 56 edici¨®n por un jurado integrado por Alberto Blecua, Alfredo Bryce Echenique, Pere Gimferrer, Carmen Posadas, Rosa Reg¨¤s, Carlos Pujols y Soledad Pu¨¦rtolas, quien indic¨® que la novela de Mill¨¢s, "est¨¢ escrita con elegancia, iron¨ªa y tiene un final glorioso".

Mill¨¢s se impuso ante 468 obras m¨¢s, la mayor¨ªa procedente de Espa?a (211), pero tambi¨¦n de Estados Unidos (12) y hasta de Australia (1), y que ten¨ªan en la novela hist¨®rica el g¨¦nero predominante.