Incidentes en Barcelona por el desalojo de cuatro familias

Fin de la resistencia. Las cuatro familias que se negaban a abandonar sus Casas Baratas del barrio barcelon¨¦s del Bon Pastor fueron desalojadas ayer por la fuerza por agentes antidisturbios de la Guardia Urbana. Poco despu¨¦s de que se presentara la polic¨ªa, una cincuentena de j¨®venes pertenecientes a colectivos antisistema y un grupo de vecinos que apoyaban la protesta de las cuatro familias acudieron a la zona e insultaron a los agentes. La polic¨ªa respondi¨® con una carga en la que resultaron contusionados varios manifestantes y un c¨¢mara de televisi¨®n.

"El desalojo ha venido precedido de la correspondiente orden judicial. Ahora bien. Hemos abierto expediente informativo para determinar si ha habido mala praxis durante la carga", dijo la concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Assumpta Escarp. "Es el procedimiento habitual en casos excepcionales como ¨¦ste", aclar¨® la edil.

Estas cuatro viviendas est¨¢n incluidas en un plan urban¨ªstico que afecta a cerca de 700 casas unifamiliares construidas en los a?os veinte, y que se hab¨ªan deteriorado con el tiempo. El Consistorio barcelon¨¦s prev¨¦ su derribo gradual y el realojo de los propietarios en pisos de protecci¨®n oficial en el mismo barrio. Las familias desalojadas eran las ¨²nicas de las 130 personas afectadas por la primera fase del plan que se negaban a dejar sus inmuebles. Ped¨ªan una indemnizaci¨®n superior a la que les ofrec¨ªa el ayuntamiento.

A pesar de ser una minor¨ªa, durante los ¨²ltimos meses estas familias han recibido el apoyo de centenares de vecinos del barrio no afectados por el plan, al tiempo que se han granjeado las simpat¨ªas de colectivos antisistema de toda Barcelona, que consideran el proyecto una operaci¨®n de especulaci¨®n urban¨ªstica. En el otro lado de la balanza se sit¨²an los vecinos impacientes por cambiar sus viejas casas por pisos protegidos amplios y luminosos.

El clima de convivencia en el barrio se hab¨ªa envenenado, pero nadie quer¨ªa que el problema acabara de una manera tan abrupta. "Todo esto se hab¨ªa alargado demasiado, pero no quer¨ªamos llegar a este extremo", afirm¨® Paquita Delgado, presidenta de la Asociaci¨®n de Vecinos del Bon Pastor. "Ha sido un desalojo ilegal y brutal", indic¨® Luis Nuevo, presidente de otra asociaci¨®n vecinal contraria al plan del municipio.

Las cuatro familias han sido trasladadas moment¨¢neamente a un hotel. "Quiero agradecer a los j¨®venes que nos han apoyado lo que han hecho por nosotros", dijo Ram¨®n, uno de los desalojados, con l¨¢grimas en los ojos. Mientras, los operarios cargaban sus muebles en un cami¨®n de mudanzas.