Miles de violaciones sin resolver buscar¨¢n respuesta en el ADN
Un registro ¨²nico permitir¨¢ cruzar todas las huellas gen¨¦ticas disponibles
La perspicacia de un agente logr¨® dar con el asesino de la joven Roc¨ªo Wanninkhof, hallada sin vida en noviembre de 1999 en Marbella (M¨¢laga). A ¨¦l se le ocurri¨® que podr¨ªan cruzarse los datos gen¨¦ticos del ingl¨¦s Tony King, acusado de la muerte de Sonia Carabantes, con el ADN extraido de una colilla de Royal Crown encontrada cerca de donde fue localizado el cad¨¢ver de Wanninkhof. Y el resultado no dej¨® lugar a dudas: el que hab¨ªa fumado aquel cigarrillo hab¨ªa sido el ingl¨¦s.
El caso, envuelto en una fuerte pol¨¦mica, reabri¨® el debate sobre la necesidad de regular las bases de datos de ADN, as¨ª como la obtenci¨®n de muestras biol¨®gicas de presuntos delincuentes. Si la polic¨ªa y la Guardia Civil hubieran cruzado sus datos con perfiles gen¨¦ticos quiz¨¢ podr¨ªa haberse aclarado el asunto mucho antes y de forma m¨¢s clara.
A partir de la semana que viene -el pr¨®ximo 9 de noviembre-, ya no har¨¢ falta que polic¨ªas diligentes tengan buenas ideas para que se descubra a los culpables de homicidios y violaciones. O se pruebe la inocencia de algunas personas. Un nuevo banco de ADN almacenar¨¢ toda la informaci¨®n gen¨¦tica disponible en el ¨¢mbito de las investigaciones criminales y permitir¨¢ buscar a los autores de miles de cr¨ªmenes sin resolver, incluidas miles de violaciones.
El sistema permitir¨¢ el contraste autom¨¢tico de los datos, como ocurre ahora con las huellas dactilares, que facilitan una identificaci¨®n inmediata. ?Qu¨¦ entrar¨¢ en esa base de datos? Los 45.000 perfiles gen¨¦ticos que ahora est¨¢n repartidos entre los archivos del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa y la Guardia Civil. De ellos, s¨®lo 6.000 son "indubitados", es decir, se sabe con plena seguridad a qu¨¦ personas corresponden. Los otros 39.000 son "an¨®nimos" porque su propietario no ha sido hallado. Son muestras biol¨®gicas encontradas en las escenas del delito: colillas, pelos, saliva, semen...
"Cualquier delincuente sabe que tiene que ponerse guantes para no dejar huellas dactilares, o que tiene que borrarlas. Por eso, cada vez es m¨¢s dif¨ªcil hallarlas salvo en delitos no planificados. Pero es muy dif¨ªcil hacer algo y no dejar un rastro gen¨¦tico. Por eso, esta nueva base de datos de ADN, que permitir¨¢ cruzar toda la informaci¨®n disponible hasta el momento, es muy importante. Calculamos que podr¨ªamos aclarar al menos 5.000 asuntos en el primer a?o de funcionamiento", vaticina un mando de la Comisar¨ªa General de Polic¨ªa Cient¨ªfica. "En lo que llevamos de 2007, y sin que est¨¦ funcionando el registro ¨²nico, ya hemos resuelto 700 casos gracias a los an¨¢lisis de ADN", a?ade. A lo largo de este a?o se tomar¨¢n unas 30.000 nuevas muestras.
Muestras desde 1991
A los perfiles gen¨¦ticos que ya tienen el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa y la Guardia Civil se unir¨¢n tambi¨¦n los del Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa, que almacena muestras biol¨®gicas desde 1991, incluyendo las relativas a miles de violaciones sin resolver. Los Mossos d'Esquadra est¨¢n incorporando sus datos, y en un mes lo har¨¢ la Ertzaintza.
Seg¨²n fuentes policiales, estos datos gen¨¦ticos podr¨¢n empezar a cruzarse, a partir del pr¨®ximo enero, con los registrados en los 27 pa¨ªses de la UE, gracias al Convenio de Pr¨¹m (Alemania) firmado el 27 de mayo de 2005. Ese mismo mes comenzar¨¢ el intercambio de archivos con Alemania y Austria, y paulatinamente se har¨¢ con el resto de los Estados. La ley incorpora notables novedades. Se podr¨¢n guardar, sin su consentimiento, los perfiles gen¨¦ticos de sospechosos, detenidos o imputados "por delitos graves" -habr¨¢ que ver c¨®mo se interpreta esta gravedad-. Pero no podr¨¢n almacenarse para siempre. Si se trata de un condenado podr¨¢n guardarse sus datos hasta que haya pasado el tiempo que la ley prev¨¦ para cancelar los antecedentes penales. En el caso de sospechosos, se tendr¨¢ que eliminar su perfil una vez que haya prescrito el delito.
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