Depravaci¨®n de miedo en Gran V¨ªa

As¨ª no hay quien vea una pel¨ªcula tranquilo. Ni falta que hace porque se trata de vivirla. Unas 1.400 personas disparaban anoche con pistolas de agua, mientras se proteg¨ªan con un peri¨®dico en el patio de butacas del cine Capitol, de la Gran V¨ªa. En la pantalla, Brad y Janet (rebautizados a voces por el p¨²blico como gilipollas y puta) se pierden con el coche en una noche de lluvia.

Es el comienzo de The rocky horror picture show, la pel¨ªcula de culto dirigida en 1975 por Jim Charman, basada en la obra de teatro estrenada en 1973. En su estreno no tuvo todo el ¨¦xito comercial que se esperaba. Pero a finales de los setenta las salas de cine se llenaban de las sesiones de madrugada. All¨ª empez¨® todo. Pero la de anoche fue una proyecci¨®n especial e interactiva para celebrar Halloween. El plan era que el p¨²blico volviese a ver la pel¨ªcula, participando y actuando desde sus butacas. El filme, que ha adquirido dimensiones de culto al estilo de La guerra de las galaxias, lleva a?os proyect¨¢ndose junto a un espect¨¢culo interactivo, que une cine, p¨²blico y actores que salen de la pantalla.

Unas 1.400 personas dispararon pistolas de agua en el patio de butacas

"Aqu¨ª hay mucho friki", dec¨ªa una chica que compraba palomitas, mientras delante de sus ojos entraban a la sala tenistas de los setenta travestidos, enfermeras psic¨®ticas, vampiresas llenas de sangre y novias decadentes. Todos disfrazados con peluca. "No somos frikis", dec¨ªa ?lvaro Rodr¨ªguez, de 28 a?os, sentado en primera fila, con gafas de sol y la cara pintada. "La palabra friki se ha puesto muy de moda. La utilizan para cualquiera, y nosotros no somos cualquiera. Simplemente somos raros y horroritas". ?ste es el nombre que los fans de la pel¨ªcula se han puesto a s¨ª mismos.

Algunos la han visto m¨¢s de 20 veces y conocen sus di¨¢logos. Los llamados v¨ªrgenes, los novatos que ve¨ªan la pel¨ªcula por primera vez, sufrieron anoche una divertida humillaci¨®n. Ellos, lejos de avergonzarse, asumieron su condici¨®n golpe¨¢ndose entre risas el pecho. Juntos horroritas y v¨ªrgenes corearon, con ayuda de las azafatas, el gran juramento: "Prometo fidelidad a los labios de Rocky", gritaron. "Dejad que salga toda vuestra depravaci¨®n. No os cort¨¦is. Queremos que os volv¨¢is locos y ver¨¦is vuestras pesadillas er¨®ticas", anunci¨® la presentadora antes de empezar la pel¨ªcula. En sus butacas cada espectador ten¨ªa una bolsa para todo lo necesario (pistolas de agua, globos, serpentinas, guantes, linternas y una baraja de cartas). "Es una pel¨ªcula especial. Tiene mucha coherencia y es muy divertida. Hay rock, hay ciencia ficci¨®n, hay teatro", dec¨ªa el inform¨¢tico Fernando Ram¨ªrez, de 30 a?os, sujet¨¢ndose una calva de broma. Hubo m¨¢s: lanzamiento de arroz en el momento de la boda, canciones coreadas a gritos e histeria general cuando el protagonista de la pel¨ªcula, el travestido Frank'n Furner hizo su aparici¨®n dentro y fuera de la pantalla con medias de rejilla. Los gritos de "gilipollas y puta", cada vez que Brad y Janet (una jovenc¨ªsima Susan Sarandon) no cesaron en toda la pel¨ªcula.

El espect¨¢culo especial de anoche se podr¨¢ ver tambi¨¦n todos los viernes a las diez, en un escenario m¨¢s peque?o. Ser¨¢ en la sala Yas'ta de Madrid (Valverde, 10), de la mano del grupo de teatro Drama Kuin. Quiz¨¢ all¨ª no haya una pantalla gigante, pero resulta igual de divertido.

Tras las dos horas de pel¨ªcula, no era dif¨ªcil adivinar en la Gran V¨ªa qui¨¦n hab¨ªa estado all¨ª. Los labios pintados, el confeti y los granos de arroz incrustados entre el cabello lo delataban. "Por supuesto que volveremos a verla otra vez", dec¨ªa un espectador con una amplia sonrisa, vestido con un picard¨ªas rojo. "Es la mejor pel¨ªcula del mundo, y nosotros el mejor p¨²blico".