"Hoy s¨®lo sirve el dinero"
Tras dos a?os de sanci¨®n por dopaje, Giovanella vuelve con el Coruxo, de Tercera
Everton Giovanella salt¨® el s¨¢bado al peque?o estadio de O Couto (Ourense) con el brazalete de capit¨¢n de un equipo de Tercera Divisi¨®n. Dos a?os despu¨¦s de su inhabilitaci¨®n tras dar positivo por nandrolona, el ex centrocampista del Celta, de 37 a?os, se enfund¨® la camiseta del Coruxo para batirse con los chavales del filial del Ourense (0-3). Sus compa?eros se encomendaron a ¨¦l como a una divinidad rediviva y los directivos, que sue?an con el ascenso a Segunda B y han descartado ya la opci¨®n de contar con Karpin -"est¨¢ muy ocupado con sus empresas; quiso ser imagen del Coruxo, pero ni siquiera encontr¨® tiempo, nada que ver con Giovanella"- contuvieron a duras penas la emoci¨®n. "Lo esperamos todo de Everton. Es un gran futbolista y mejor persona", afirm¨® el directivo Carlos Goberna con los ojos empa?ados.
Giovanella, ex jugador del Salamanca y del Celta, se aferr¨® a su nuevo equipo, el Coruxo, para mostrarse al mundo. Sobre todo, al suyo pr¨®ximo -su esposa y sus dos hijos lo observaban desde la grada-. "Siempre he dicho que iba a salir del f¨²tbol jugando y he cumplido. Se lo promet¨ª a mi familia, han pasado dos a?os y aqu¨ª estoy", sentenci¨® apenas abandon¨® el campo, cinco minutos antes del final. Inmediatamente, la autocr¨ªtica. "Desde luego, falta ritmo, falta noci¨®n del espacio... El bal¨®n se me escapa, a¨²n se me va. Me siento un poco lento, aunque esto es anecd¨®tico porque quer¨ªa volver a jugar y he podido hacerlo".
Eso asegura que quer¨ªa hacer: jugar, no redimir su imagen: "Yo no tengo nada que demostrar a nadie sencillamente porque no hice nada. Mi conciencia siempre estuvo muy tranquila. ?Redimirme? No; yo s¨®lo quiero jugar porque soy un futbolista".
El hispano-brasile?o dio positivo en diciembre de 2004 tras un encuentro entre el Celta y el Pontevedra. Su muestra de orina registr¨® unos niveles de testosterona de 3,7 nanogramos por mililitro, 1,7 por encima del l¨ªmite permitido. En septiembre de 2005 fue sancionado por el Comit¨¦ de Competici¨®n, sentencia ratificada en noviembre y todav¨ªa pendiente en la justicia ordinaria. "Despu¨¦s de que tiraran la orina y el proceso sigui¨® adelante, pod¨ªa pasar cualquier cosa", se defiende Giovanella, poco esperanzado sobre el caso; "no creo que vaya a suceder ya nada, pero mi conciencia est¨¢ tranquila".
El jugador repudia el sistema por el que fue condenado por dopaje. "Lamentablemente, hoy s¨®lo sirve ganar. S¨®lo sirve el dinero, lo material. La esencia del f¨²tbol como espect¨¢culo est¨¢ en un segundo plano porque se ha metido gente que no tiene nada que ver con el f¨²tbol, que no sabe lo que es un bal¨®n y que est¨¢ ah¨ª haciendo s¨®lo dinero, molestando; gente que viene s¨®lo para hacer da?o", afirma. Y echa el freno cuando se le sugiere que el espect¨¢culo puede exigir m¨¢s de lo que el cuerpo puede dar. "Yo nunca me he sentido presionado porque siempre he disfrutado", protesta; "siempre he dado todo lo que ten¨ªa: ilusi¨®n, ganas, el f¨²tbol que s¨¦ hacer, y nunca me han hablado de que ten¨ªa que dar m¨¢s".
El s¨¢bado, en su regreso al f¨²tbol desde lo m¨¢s bajo, el ex c¨¦ltico se mordi¨® el orgullo y asumi¨® el papel del veterano repartiendo juego, despejando con la cabeza y, sobre todo, templando ¨¢nimos, palmeando cari?osamente al oponente cada vez que recib¨ªa una tarjeta tras otra, mostrando el perfil solidario que tanto le alabaron sus seguidores.
Mientras intenta adaptarse y aplicar la resistencia del deportista a su vida personal, Giovanella no oculta su ambici¨®n. Se reconoce en buena forma y quiere darse partidos para medirse. "Ahora es el Coruxo. Mi aspiraci¨®n es, de momento, mejorar aqu¨ª y ayudar al equipo. Despu¨¦s, vamos a ver c¨®mo me pongo y si surge algo mejor".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.