Sin tracci¨®n, m¨¢s divertido
Esta semana han vuelto a rugir los motores de los f¨®rmula 1 para comenzar los entrenamientos invernales para 2008. Las escuder¨ªas han comenzado a probar los monoplazas con los cambios que imponen las normas t¨¦cnicas. Sin duda, lo m¨¢s importante es la desaparici¨®n del control de tracci¨®n, es decir, de cualquier sistema que impida que las ruedas tractoras derrapen o bien que avise al piloto del inicio de esta circunstancia.
Si tratamos de acelerar las ruedas por encima de un cierto valor, que depende de factores como las condiciones del asfalto, el tipo de neum¨¢ticos o la carga aerodin¨¢mica, se produce una p¨¦rdida de adherencia y las ruedas derrapan. Los neum¨¢ticos se ven sometidos a dos tipos de aceleraci¨®n. Una es la longitudinal, debida a aceleraciones y frenadas, y otra la lateral, que aparece cuando se circula por una curva. La combinaci¨®n de ambos tipos no puede superar un cierto l¨ªmite para evitar la p¨¦rdida de adherencia y el consiguiente deslizamiento de la rueda.
Cuando los neum¨¢ticos derrapan se produce un desgaste mayor y el tiempo por vuelta aumenta. Esto es lo que se pretende evitar con el control de tracci¨®n, cuyo objetivo es enviar a las ruedas la m¨¢xima potencia posible. Para detectar si las ruedas derrapan se emplean sensores que comparan la velocidad de ¨¦stas con la de movimiento del veh¨ªculo. Si la rueda gira m¨¢s r¨¢pido de lo que deber¨ªa en funci¨®n de la velocidad del monoplaza es que hay derrape y, entonces, se reduce la potencia del motor hasta que la rueda deje de deslizar. Sistemas similares al control de tracci¨®n tambi¨¦n se emplearon para que los coches tuvieran una mejor salida al comienzo de las carreras, aunque estos dispositivos est¨¢n prohibidos ahora. De hecho, incluso los coches de calle poseen control de tracci¨®n, si bien en este caso el fin es lograr la estabilidad y no la m¨¢xima potencia.
Sistemas m¨¢s o menos parecidos al actual control de tracci¨®n ya se utilizaron en la f¨®rmula 1 en los a?os 80. Veh¨ªculos como el Williams-Renault FW14-B de 1992 con el que Nigel Mansell se coron¨® campe¨®n llevaban m¨¢s electr¨®nica que los monoplazas actuales, pues, por ejemplo, contaban con suspensi¨®n activa controlada por ordenador.
El control de tracci¨®n ya ha sido prohibido en el pasado, pero la FIA lo reintrodujo en 2002 porque era muy complicado controlar que los equipos no estuvieran realizando las mismas funciones que el control de tracci¨®n a escondidas, por medio de las unidades de control electr¨®nico del motor. Sin embargo, para 2008, la obligaci¨®n de usar unidades electr¨®nicas est¨¢ndar hace m¨¢s f¨¢cil prohibir el control de tracci¨®n y vigilar que ninguna escuder¨ªa lo use de forma encubierta.
Despu¨¦s de probar los monoplazas sin control de tracci¨®n y otra serie de ayudas electr¨®nicas, algunos pilotos destacan que el coche es m¨¢s dif¨ªcil de conducir, pero tambi¨¦n m¨¢s divertido. Hasta ahora pod¨ªan pisar el acelerador a fondo a la salida de las curvas sin preocuparse porque las ruedas fueran a derrapar.
Por otro lado, otros sistemas permit¨ªan aprovechar al m¨¢ximo el denominado freno motor, efecto que permite que la inercia de rotaci¨®n del motor frene el veh¨ªculo al reducir marchas. Una sensaci¨®n similar a lo que se siente en un monoplaza cuando aprovechamos el freno motor la podemos experimentar si al circular en cuarta en lugar de pasar a quinta seleccionamos por error la tercera. Las revoluciones del motor se disparan y sentimos que la velocidad del coche se reduce sin pisar el freno.
Al reducir marchas en un f¨®rmula 1 s¨ª se empleaba hasta ahora claramente el efecto del freno motor, lo cual contribu¨ªa a una mayor estabilidad del monoplaza durante la frenada. A partir de 2008 el freno motor no se podr¨¢ aprovechar como hasta ahora y por tanto los coches ser¨¢n m¨¢s dif¨ªciles de conducir no s¨®lo a la salida de las curvas sino tambi¨¦n al frenar para entrar en la curva.
Con estos cambios, seg¨²n varios pilotos, se podr¨¢ distinguir a los que son realmente finos en el manejo del acelerador. Conducir un f¨®rmula 1 ser¨¢ m¨¢s complicado para los novatos. A pesar de todo, es muy probable que en la primera carrera de 2008 veamos tiempos como los de 2007, ya que las posibles p¨¦rdidas de tiempo se ir¨¢n reduciendo con los entrenamientos y con mejoras en otras ¨¢reas del monoplaza. Ser¨¢ habitual, sobre todo al principio, ver m¨¢s salidas de pista de lo habitual y alg¨²n que otro derrape. Hay que esperar hasta que comience la temporada para ver hasta d¨®nde mejora el espect¨¢culo de la f¨®rmula 1 cuando los pilotos sean capaces de dar rienda suelta a su pericia al volante
Isaac Prada y Nogueira es ingeniero de F-1.
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