El PSdeG descarta rotar con el Bloque la presidencia de la Fegamp sin el PP
Los nacionalistas quieren repartirse el mandato de acuerdo con los socialistas
La batalla pol¨ªtica vuelve al escenario del municipalismo gallego. La negativa del Partido Popular a aceptar la oferta del Partido dos Socialistas de Galicia y del Bloque Nacionalista Galego a turnarse en la presidencia de la Federaci¨®n Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) reparti¨¦ndose el mandato en funci¨®n de la representaci¨®n de cada fuerza pol¨ªtica obliga a los socios de la Xunta a decidir el modelo con el que van a gobernar el municipalismo durante los pr¨®ximos cuatro a?os. La asamblea que debe tomar la decisi¨®n se celebrar¨¢ el pr¨®ximo jueves en Santiago y, hoy por hoy, no parece que los partidos hayan alcanzado un acuerdo.
Este mismo fin de semana el BNG, a trav¨¦s de dos miembros de su ejecutiva, insist¨ªa en el deseo de los nacionalistas de repartirse el mandato con el PSdeG si el PP mantiene su rechazo a la oferta de rotar entre los tres partidos. Sin embargo, el secretario de Organizaci¨®n de los socialistas gallegos, Ricardo Varela, no est¨¢ de acuerdo.
Varela defiende las virtudes de la rotaci¨®n si participan los tres partidos, pero no la considera viable sin la participaci¨®n de los populares. "Lo que se pretende con esa propuesta, que tiene que nacer del consenso", declar¨® a EL PA?S el n¨²mero dos de los socialistas gallegos, "es poner en marcha el organismo con un funcionamiento m¨¢s colegiado", con la participaci¨®n de las tres fuerzas mayoritarias.
Aunque despu¨¦s de las elecciones municipales el PSdeG es el partido que tiene mayor n¨²mero de votos dentro de la Fegamp, Varela afirma ser consciente de "que el PP gobierna m¨¢s ayuntamientos y tiene un peso muy importante". "Por eso nos parec¨ªa bueno incorporarlo con intensidad al funcionamiento de la Fegamp; que el PP no se sintiera ajeno a la instituci¨®n, que no se sintiera oposici¨®n de la instituci¨®n, sino parte de ella". Ese criterio, asegura, la voluntad de construir "una instituci¨®n m¨¢s cohesionada", es el que motiv¨® la propuesta de "un sistema colegiado como el que tiene la Comisi¨®n Europea, donde se rotan las presidencias".
No obstante, precisa Varela, el PSdeG sostiene que "si eso no es posible con el consenso pleno de las tres fuerzas pol¨ªticas, lo l¨®gico es que se mantenga el sistema tal y como est¨¢ recogido en los estatutos", que determina una votaci¨®n mayoritaria para la elecci¨®n del presidente de la federaci¨®n. "Si no hay un acuerdo pleno", afirma categ¨®ricamente el secretario de organizaci¨®n del PSdeG, "no tiene sentido dejar al PP fuera y en contra de un modelo nuevo" que precisa de la reforma de los estatutos.
El propio presidente de la Xunta, Emilio P¨¦rez Touri?o, defendi¨® en octubre las virtudes de un modelo rotatorio entre los tres partidos, tal y como hab¨ªa sido propuesto por el Bloque y lo calific¨® de "f¨®rmula de alto inter¨¦s". De salir adelante, argument¨® entonces Touri?o, evitar¨ªa que el municipalismo gallego dependiera "de la mayor¨ªa pol¨ªtica de cada momento" y la Fegamp ver¨ªa "reforzadas sus caracter¨ªsticas institucionales".
El l¨ªder del PP, sin embargo, es contrario a la idea. Alberto N¨²?ez Feij¨®o sostiene que "las instituciones las tienen que gobernar quienes ganan" y que no entiende un gobierno de la Fegamp por turnos como no entender¨ªa "una presidencia rotatoria de la Xunta de Galicia". El presidente del PP gallego advirti¨® al BNG que cuando firmaron los pactos con el PSdeG decidieron la presidencia de la Fegamp. "El BNG tendr¨¢ que pensar por qu¨¦ le va a entregar al PSOE una federaci¨®n que no gan¨® en las urnas", argument¨®. "Yo agradezco much¨ªsimo la propuesta" al BNG, ironiz¨® Feij¨®o recientemente, pero "si tiene que gobernar el PSOE, que gobierne".
El fin de una ¨¦poca
Hace 11 a?os que los partidos enterraron el hacha de guerra y fusionaron en una sola las tres organizaciones que agrupaban a los ayuntamientos en funci¨®n de su color pol¨ªtico o su tama?o. La Federaci¨®n de Concellos Galegos (formada principalmente por socialistas y nacionalistas) y la Federaci¨®n de Concellos Rurais se integraron en la mayoritaria Fegamp, dominada por el PP, y pusieron fin a a?os de disidencia. El cambio en la relaci¨®n de fuerzas tras las ¨²ltimas municipales amenaza ahora con poner fin a una d¨¦cada de consenso en el municipalismo gallego. El PP sigue teniendo m¨¢s alcaldes que PSdeG y BNG, pero los municipios de socialistas y nacionalistas representan a m¨¢s ciudadanos y eso, en aplicaci¨®n de los estatutos de la Fegamp, les da el control de la organizaci¨®n.
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