La vivienda pone cimientos a la crisis

Los carteles de "se vende" pueblan los edificios de la geograf¨ªa espa?ola. Pisos nuevos y de segunda mano, de todos los tama?os y precios. Y las ofertas para conseguir enganchar a un comprador tambi¨¦n se han convertido en una constante. Los particulares que venden su casa saben que la ¨²nica opci¨®n, si tienen prisa, es rebajar el precio que piden por ella o, sino, esperar tiempos mejores. Para las promotoras inmobiliarias, la situaci¨®n es m¨¢s complicada ante su imposibilidad de detener la m¨¢quina. Han comprado el suelo a elevados precios y son muy reacias a recortar sus m¨¢rgenes, aunque ya no les queda m¨¢s remedio. No en vano, el presidente de Realia Business, Ignacio Bay¨®n, reconoce que han bajado un par de puntos en el ¨²ltimo a?o. Lo mismo que el director Corporativo de Renta Corporaci¨®n, Enric Venancio.

Aunque no lo reconozcan, las promotoras tendr¨¢n que rebajar las viviendas, como hacen ya con sus m¨¢rgenes

Las esperanzas se han puesto en el segundo semestre de 2008: se espera la vuelva del comprador y que se retome la actividad

El encarecimiento de las casas y la subida de los tipos de inter¨¦s han puesto al comprador contra las cuerdas. Su decisi¨®n es esperar

Aunque parece que no es suficiente, a tenor de las variopintas y generalizadas promociones que est¨¢n lanzando para lograr deshacerse de los pisos que ya han construido y acumulado en su cartera. Cubren un a?o o dos de hipoteca, regalan la plaza de garaje, amueblan el piso, se encargan de comprarle la casa que deja para adquirir la nueva... y, tambi¨¦n, hay casos en los que llegan a rebajar los precios, entre el 5% y el 10%, seg¨²n el director general de Inmobiliaria Espacio, Jos¨¦ Antonio Fern¨¢ndez Gallar; pero estos son todav¨ªa contados.

Para algunos expertos, las viviendas tienen que abaratarse con el fin de que el negocio vuelva a la normalidad y el comprador se decida a adquirirlas. De momento, hasta septiembre de este a?o la subida est¨¢ muy lejos de la del mismo periodo de 2006, en el 5,3%, frente al 9,1% anterior. Y el propio director de Vivienda y Urbanismo del ministerio del ramo, Rafael Pacheco, vaticinaba recientemente que a finales de 2007 el encarecimiento podr¨ªa situarse en torno al 4%. Ya est¨¢ muy cerca de la inflaci¨®n, con lo que no ser¨ªa descartable, seg¨²n un estudio de la Universidad de Alcal¨¢ de Henares, que el pr¨®ximo ejercicio los precios nominales de los pisos cayesen.

Las compa?¨ªas inmobiliarias lo saben aunque no lo reconozcan, pues entre sus frases preferidas est¨¢ aquella de que la vivienda nunca baja de precio. Sin embargo, como no quieren recortar sus beneficios m¨¢s de lo estrictamente necesario, han decidido relajar su actividad. Y c¨®mo. En concreto, los proyectos que han presentado para construir viviendas han descendido un 22,4% entre enero y septiembre, lo que quiere decir que se van a empezar a edificar, de momento, casi 160.000 pisos menos que en 2006. Y en 2008 se prev¨¦ que se construyan menos a¨²n.

Y es que las ventas de casas seguir¨¢n bajando, y con toda probabilidad a un ritmo superior del que reflejan las estad¨ªsticas. Entre otras cosas porque cuando se refieren a viviendas de nueva construcci¨®n, el decalaje temporal se aproxima a dos a?os, pues los contratos de compraventa que se est¨¢n sellando hoy en d¨ªa corresponden a las casas que fueron apalabradas hace dos a?os, cuando todav¨ªa no estaban construidas y se vend¨ªan sobre plano.

Las estad¨ªsticas del primer semestre de este ejercicio que elabora el Colegio de Registradores de Espa?a hablan de una ca¨ªda interanual de las compraventas de pisos nuevos y usados del 5,4% en Espa?a, que se elevaba al 11,3% si se comparan los tres primeros meses de 2007 con los tres segundos.

No es para menos, porque el adquirente ha visto muy mermada su capacidad de compra entre el encarecimiento de los precios de las casas y de las hipotecas. Entre 2006 y 2007, los tipos de inter¨¦s han pasado del 3,95% al 4,85%, y las cuotas medias de los pr¨¦stamos, de rebasar los 800 euros mensuales a los 900.

Tras esta evoluci¨®n y los anuncios de los gobiernos Central y regionales de que van a ayudar a los ciudadanos a acceder a una vivienda, el comprador lo tiene claro, prefiere esperar a tiempos mejores, a ver si por el camino, adem¨¢s, descienden los tipos de inter¨¦s, como algunos expertos prev¨¦n para 2008. Las inmobiliarias opinan que estos anuncios son electoralistas. Por eso tienen puestos los ojos en las elecciones generales del pr¨®ximo mes de marzo; "puede que a partir de entonces, el demandante de vivienda vuelva a comprar al darse cuenta de que no le van a regalar una casa", coinciden en se?alar algunas de ellas.

Esperanza

?se es uno de los hitos en los que est¨¢ puesta la esperanza de la recuperaci¨®n, pero no el ¨²nico. Se necesita conocer los balances de las entidades financieras y de las inmobiliarias para evaluar as¨ª el calado de la crisis y estimar qu¨¦ se puede esperar de 2008. Tambi¨¦n es preciso que los bancos y cajas de ahorros pongan sus cartas sobre la mesa respecto a la estrategia que van a seguir en lo que a la concesi¨®n de financiaci¨®n se refiere, tanto a empresas como a particulares. Se prev¨¦ un endurecimiento fuerte, pero no un freno en la concesi¨®n de hipotecas como el actual.

Una vez despejadas todas estas inc¨®gnitas, puede que en el segundo semestre del a?o pr¨®ximo las aguas vuelvan a su cauce, el comprador retome su papel y las inmobiliarias vendan menos pisos que antes, pero vendan.