"Una finalidad de la industria editorial es ayudar a encontrar el sentido de la vida"

El sector editorial es de los m¨¢s can¨ªbales de la realidad econ¨®mica espa?ola: para que una empresa pueda crecer otra debe irremediablemente disminuir. A lo largo de la ¨²ltima d¨¦cada, mientras que el n¨²mero de empleados ha aumentado el 43,5% (hasta llegar a los 15.667), la facturaci¨®n global -eliminando el efecto de la inflaci¨®n- ha ca¨ªdo el 1,5%, situ¨¢ndose en los 3.014 millones de euros, seg¨²n la Federaci¨®n de Gremios Editores de Espa?a.

Sin embargo, a?o tras a?o van apareciendo nuevas editoriales. Y es que no todo el mundo emprende un negocio para ganar dinero. Hay personas que buscan otro tipo de riquezas y tienen el valor y la determinaci¨®n de seguir el camino marcado por su pasi¨®n, impulsando proyectos empresariales honestos y coherentes, con un prop¨®sito humanista que los dignifique.

"Uno s¨®lo puede amar lo que conoce y comprende; la ignorancia es lo que genera el miedo, que es precisamente lo contrario del amor"

?ste es el caso del emprendedor Jordi Nadal (Llic¨¤ d'Amunt, 1962), que tras 30 a?os trabajando en importantes editoriales espa?olas ha fundado, junto con Cati Farr¨¢n, Plataforma Editorial, cuyo objetivo es "dar voz a obras que realmente valgan la pena". Autor de la novela Todo tan cerca (Poliedro) y del ensayo Meditando el management y la vida (Gesti¨®n 2000), Nadal imparte conferencias por todo el mundo, en las que reflexiona sobre el papel de la literatura en el liderazgo empresarial.

Pregunta. ?Qu¨¦ le ha llevado a convertirse en empresario en un mercado tan maduro y competitivo con el editorial?

Respuesta. La convicci¨®n de que la buena literatura tiene un poder transformador. La experiencia de leer puede cambiarnos por dentro, lo que repercute en nuestra interacci¨®n con lo que vivimos afuera. Y no s¨®lo eso: la lectura estimula a las personas a que piensen por s¨ª mismas... Los libros son medios, pero la perversi¨®n del mercado los quiere convertir en fines.

P. ?De qu¨¦ manera?

R. Aunque no se puede generalizar, lo que hoy impera es la creaci¨®n de productos comerciales, cuyo contenido deja en algunas ocasiones mucho que desear. M¨¢s all¨¢ de este oportunismo comercial, alineado con modas pasajeras, una finalidad de la industria editorial es ayudar a encontrar el sentido de la vida, a comprender qui¨¦nes somos y cu¨¢l es nuestra relaci¨®n con la existencia. No queremos publicar libros para perderse, sino para encontrarse.

P. Las editoriales deber¨ªan ser filtros cualitativos, ?no?

R. Exacto. Nuestra editorial quiere actuar a modo de radar o esponja de autores y mensajes que aporten dicha comprensi¨®n. Si algo hemos aprendido es que uno cosecha lo que siembra. Hoy en d¨ªa, como editorial s¨®lo puedes enga?ar a los lectores una vez. Hacer trampa no es rentable a medio plazo. Nosotros apostamos por la autenticidad desde el inicio.

P. ?Y los lectores?

R. El mundo es cada vez m¨¢s complejo y crece el n¨²mero de personas que busca respuestas para vivir en coherencia con su verdadera naturaleza. Estamos hablando de la conquista de la felicidad, el fin m¨¢s perseguido por la humanidad. Pero para ser felices es necesaria la comprensi¨®n. Uno s¨®lo puede amar lo que conoce; la ignorancia es lo que genera el miedo, que es precisamente lo contrario del amor.

P. ?Y qu¨¦ hay de los empresarios? ?Leen?

R. Precisamente, se trata de un nicho en expansi¨®n. La realidad social y econ¨®mica est¨¢ transform¨¢ndose a velocidad de v¨¦rtigo. Los profesionales est¨¢n m¨¢s cerca de la tecnolog¨ªa que de la naturaleza, lo que les obliga a saber gestionar el vac¨ªo existencial que esta situaci¨®n les genera. Adem¨¢s, sin la capacidad de comprender al otro no se puede ser l¨ªder.

P. ?Qu¨¦ le puede aportar la lectura a un ejecutivo?

R. Le puede cambiar la manera en la que observa la realidad. Leer equivale a aprender, un proceso que exige valent¨ªa, pues nos lleva a trascender el yo para alcanzar el nosotros. La literatura contribuye a formar l¨ªderes afectivos, mucho m¨¢s humildes y emp¨¢ticos, lo que incrementa su efectividad a la hora de gestionar a otras personas. Al fin y al cabo, los l¨ªderes son quienes est¨¢n construyendo hoy el mundo de ma?ana. En mi caso, tengo presente a mis hijos cada vez que tomo una decisi¨®n.