Responsabilidad art¨ªstica

En Holanda, en medio de una ilimitada confusi¨®n del mundo" se hicieron terrible realidad para Max Beckmann las "visiones de vate apocal¨ªptico" de las que habla en su diario. Hasta finales de enero se las podr¨¢ contemplar en la Neue Pinakothek de M¨²nich, en una de las m¨¢s impresionantes exposiciones de la obra de madurez de Max Beckmann. Est¨¢ dedicada a su exilio en ?msterdam (1937 y 1947), que fueron productivos, pese a los apuros econ¨®micos, la amenaza de ser llamado a filas en Alemania y un aislamiento humano inusual para un hombre que sol¨ªa frecuentar los caf¨¦s literarios de Berl¨ªn, Francfort y Par¨ªs.

Beckmann, a quien la Rep¨²blica de Weimar en 1931 dedic¨® una sala en la galer¨ªa nacional de Berl¨ªn, fue apartado de la vida p¨²blica en 1933. El 19 de julio de 1937, cuando escuch¨® en la radio el discurso inaugural de Hitler de la exposici¨®n Arte degenerado en M¨²nich, donde colgaban varios cuadros suyos, supo que peligraba su vida. Tom¨® un tren a ?msterdam, donde pensaban hacer escala en su camino a Par¨ªs, antes del traslado a Estados Unidos. Pero tuvo que permanecer en su exilio holand¨¦s hasta 1947. Considerado "ciudadano enemigo", no se le conced¨ªa el visado para ir de profesor invitado a la universidad de St. Louis.

En ?msterdam, trabajaba impulsado por la voluntad de contrarrestar la barbarie nazi con su pintura.Una tercera parte de su pintura se origin¨® all¨ª. Carla Schulz-Hoffmann ha reunido en la Neue Pinakothek, por primera vez, gran parte de esta extraordinaria producci¨®n: entre el medio centenar de lienzos, cinco de los grandes tr¨ªpticos; tambi¨¦n acuarelas, bocetos a l¨¢piz, litograf¨ªas, dibujos a pluma y una selecci¨®n de hojas con deslumbrantes ilustraciones del Apocalipsis. Tanto estas magn¨ªficas litograf¨ªas coloreadas con acuarelas del Evangelio de San Juan, como los m¨¢s modestos bocetos para un ciclo sobre la segunda parte del Fausto de Goethe, y, por supuesto, los m¨²ltiples cuadros con libros, lectores o citas literarias, revelan una afinidad con la literatura fuera de lo com¨²n. Beckmann fue un lector de amplios intereses, especialmente de mitolog¨ªa, filosof¨ªa oriental y gnosis, cuyo mundo simb¨®lico le fascinaba. Pero tambi¨¦n fue un escritor notable; una faceta redescubierta en los ochenta, cuando se publican en Alemania sus poemas y se representan sus piezas teatrales.

La profunda correlaci¨®n entre arte y literatura (e historia contempor¨¢nea) en su pintura se evidencia ya en el tr¨ªptico Tentaci¨®n. La pieza fundamental de la muestra de arte moderno alem¨¢n -organizada en Londres de 1938 en protesta por la campa?a de difamaci¨®n del "arte degenerado"-, surgi¨® de la lectura de La tentaci¨®n de San Antonio de Flaubert, cuyo tema -las alucinaciones del hombre solo ante un mundo que se desmorona- representa su propia soledad. Beckmann anticipa en los paneles laterales la guerra y plasma su deseo de escapar por mar. En el lienzo central, sin embargo, representa a un joven sentado, atado de pies y manos, ante un cuadro, que contempla una modelo semidesnuda de cuerpo sensual. La privaci¨®n de la libertad se expresa tambi¨¦n con angustiante intensidad en En el carromato de los artistas de circo, de 1940. La estrechez del espacio, la oscuridad que apresa las figuras reflejan el aprisionamiento que vivi¨® el pintor en Holanda. Incluso el sobrio autorretrato de 1944 transmite la tr¨¢gica convulsi¨®n de la ¨¦poca. Un Beckmann soberano y petrificado nos observa con ojos fr¨ªos y penetrantes. Trasluce tambi¨¦n la palpitante contemporaneidad de Beckmann, su inquebrantable sentido de la responsabilidad art¨ªstica, como en el resto de los trabajos del exilio holand¨¦s.

Entre los grandes pintores del siglo XX, Max Beckmann tal vez s¨®lo se pueda comparar con Picasso, tanto por su inmensa fuerza creativa y su inconfundible estilo figurativo como por su grandeza visionaria. Esta grandeza, sin embargo, ha tardado en ser reconocida por el gran p¨²blico. Al contrario de Picasso o Klee, la trayectoria art¨ªstica de Beckmann fue truncada por el fascismo alem¨¢n. Si hoy se conoce relativamente poco su extens¨ªsima obra, especialmente los cuadros creados despu¨¦s de la toma de poder de los nacionalsocialistas, se debe a la anulaci¨®n de la que fue v¨ªctima por los secuaces de Hitler. -