?Menos ruido en Barajas?

Medio mill¨®n de madrile?os sufren, en mayor o menor medida, los despegues y aterrizajes del aeropuerto de Madrid-Barajas, seg¨²n los c¨¢lculos de nueve asociaciones que luchan contra el ruido. El ¨²ltimo recuento de Aeropuertos Espa?oles y Navegaci¨®n A¨¦rea (Aena) reduce el n¨²mero de afectados a unos 40.000. Son los que viven dentro de la llamada huella ac¨²stica, un mapa que delimita las zonas m¨¢s castigadas por el zumbido -en ocasiones bramido- que provocan los aviones al pasar sobre los edificios.

Aena present¨® ayer a los ayuntamientos afectados por esa contaminaci¨®n ac¨²stica una nueva huella sonora. Esta vez, elaborada con datos reales. La anterior, aprobada en enero de 2004, se realiz¨® a partir de hip¨®tesis, con datos anteriores a la ampliaci¨®n de Madrid-Barajas y que, por tanto, no inclu¨ªa la actividad de la T-4. La nueva huella registra todas las operaciones que hubo entre septiembre de 2006 y octubre de 2007. El resultado, seg¨²n fuentes de Aena, es muy similar a la anterior, aunque no pudieron precisar el n¨²mero de hect¨¢reas o habitantes que han quedado incluidos o excluidos. En algunas zonas, aseguran, el mapa se ampl¨ªa, y en otras, se reduce.

La mayor¨ªa de los 34 municipios de la zona descalifica el sistema de medici¨®n

Varios de los alcaldes que asistieron ayer a la reuni¨®n de la Comisi¨®n de Seguimiento de Ampliaci¨®n del Aeropuerto de Madrid (CSAM) salieron descontentos: aseguran que la huella se ha reducido. Es el caso, por ejemplo, de Colmenar Viejo (40.800 habitantes), que ha perdido unas 300 hect¨¢reas, seg¨²n un c¨¢lculo del propio Ayuntamiento. En San Fernando de Henares (40.000 habitantes), el mapa deja fuera una parte de su territorio, pero no afecta a la zona urbana. En Paracuellos (8.000 vecinos) tambi¨¦n tienen menos metros afectados que en la huella de 2004. Estar o no en el mapa no es balad¨ª. El propietario de una vivienda situada dentro tiene derecho a financiaci¨®n para aislarla ac¨²sticamente.

Fuentes de Aena aseguran que las viviendas que aparec¨ªan en la de 2004 y que ahora se salen del mapa no perder¨¢n su derecho. Aena insiste adem¨¢s en que la huella de ayer no es definitiva. Los ayuntamientos tienen que estudiar los datos y presentar sus quejas.

Para la mayor¨ªa de las 34 localidades afectadas por el ruido, el sistema de medici¨®n empleado no es el correcto. "La huella dif¨ªcilmente refleja la realidad", se lamenta Jes¨²s Serrada, concejal de Medio Ambiente de Tres Cantos. "Los datos son medias. Nuestro problema es que pasan 300 aviones con puntas de ruido que superan los 70 decibelios [equivalente al sonido que genera el tr¨¢fico de una autopista]". La huella ac¨²stica s¨®lo incluye las zonas donde se superan, de media, los 65 decibelios (el l¨ªmite m¨¢ximo recomendado por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud como soportable) de d¨ªa y los 55 de noche.

"Nuestra primera valoraci¨®n es positiva, porque parece un estudio riguroso y real. Permitir¨¢ garantizar los derechos de los vecinos al aislamiento ac¨²stico", asegura Joaqu¨ªn Mart¨ªnez, concejal de Pol¨ªtica Territorial de San Fernando.

Para Miguel ?ngel Santamar¨ªa, edil de Colmenar Viejo, lo m¨¢s positivo es que se crear¨¢ un grupo de trabajo junto con San Sebasti¨¢n de los Reyes y Tres Cantos para estudiar los problemas de la ruta 322, que afecta a los tres municipios.