La marcha de Aristegui de W Radio abre una pol¨¦mica en M¨¦xico

La reorganizaci¨®n de la cadena W Radio, propiedad de Televisa y el Grupo PRISA (editor de EL PA?S), ha desatado una pol¨¦mica en M¨¦xico que pivota sobre la periodista Carmen Aristegui, ex conductora del informativo matinal Hoy por hoy. La popular presentadora ha abandonado la radio por sus discrepancias con las l¨ªneas maestras dise?adas por la empresa. Los propietarios de la cadena aspiran a transformar W Radio en un medio presidido por la "rentabilidad, la calidad y el equilibrio informativo", en el que los conductores de los programas sean "directores de orquesta y no solistas".

Aristegui (Ciudad de M¨¦xico, 1964) ha estado cinco a?os al frente del programa matinal, pero, seg¨²n la empresa, ha eludido ajustarse al nuevo modelo operativo. As¨ª por ejemplo, se ha negado a transmitir desde la Universidad Tecnol¨®gica de Guadalajara, a incluir los cortes patrocinados y a respetar los horarios de Hoy por hoy. Los directivos de la W Radio recuerdan que en ocasiones el programa ha tenido que comenzar con secciones grabadas ya que Aristegui arrancaba a las 6.30 (media hora despu¨¦s del inicio del programa) e incluso a las 7.00. La empresa comunic¨® a la locutora que el cumplimiento de los horarios era "indispensable", incluso para concluir a la hora establecida, extremo que no siempre se cumpl¨ªa. Tambi¨¦n exigi¨® que se respetasen los res¨²menes informativos de tres minutos a las horas en punto -elaborados por la redacci¨®n- y las desconexiones locales.

El equipo directivo de W Radio cuestion¨® tambi¨¦n las "disparidades salariales" entre el equipo de Aristegui y el resto de trabajadores de la cadena y plante¨® "una pol¨ªtica retributiva ¨²nica" basada en el tipo de trabajo desempe?ado. Plante¨®, asimismo, su derecho, de com¨²n acuerdo con la periodista, a designar a su suplente y a conocer con anticipaci¨®n sus d¨ªas de vacaciones.

PRISA asegura que la rescisi¨®n del contrato responde a la falta de acuerdo sobre el nuevo modelo organizativo y niega tajantemente cualquier acto de censura. "Te reiteramos que estamos convencidos de que la defensa de principios como la libertad de expresi¨®n e informaci¨®n, y de valores como la democracia no son s¨®lo responsabilidad de un conductor, sino un compromiso de toda nuestra radio", se?ala la carta que la empresa entreg¨® a la periodista el pasado 10 de diciembre.

"Como puedes dar fe", a?ade el documento, "en estos cinco a?os nunca hemos pedido, ni siquiera insinuado, que queramos eludir un tema, evitar una entrevista o simplemente censurar una informaci¨®n". El 4 de enero, la periodista habl¨® por ¨²ltima vez a trav¨¦s de los micr¨®fonos de W Radio.

Daniel Moreno, director de la cadena mexicana, reconoce que buena parte de la audiencia de la periodista percibe que la informaci¨®n ha perdido una voz que formaba parte del pluralismo radiof¨®nico. Aunque puntualiza: "En cinco a?os de la W nadie ha denunciado un acto de censura, ning¨²n conductor, ni Carmen Aristegui. Somos parte de un grupo al que no se le puede objetar en este sentido. Lo vamos a demostrar en el d¨ªa a d¨ªa".

Por su parte, la periodista sostiene que "en cinco a?os de relaci¨®n profesional con PRISA siempre mantuvimos una relaci¨®n de enorme respeto a la libertad de expresi¨®n, que se fue acreditando con nuestro trabajo al aire".

La direcci¨®n de la emisora insiste en que las discrepancias entre ambas partes no era de contenido editorial sino de organizaci¨®n interna. "En noviembre de 2006 le explicamos a Carmen que ten¨ªamos que cambiar el modelo organizativo de la radio porque no era eficaz", relata Moreno. "En junio de 2007 se hace una convenci¨®n en M¨¦xico, donde vienen los directivos de Uni¨®n Radio de Espa?a, Colombia, M¨¦xico, Argentina, Chile y Estados Unidos, donde se explica detalladamente a Carmen y a Carlos Loret de Mola [dej¨® W Radio en septiembre pasado] las bondades del modelo".

"En el terreno editorial", concluye la carta remitida por la empresa a Carmen Aristegui, "queremos reiterarte nuestra propuesta de cambiar la forma de operar, bajo el criterio de que apostamos por el trabajo en equipo". La empresa dejaba claro que su intenci¨®n no era "tutelar" el trabajo de la periodista.

Aristegui ve las cosas de distinta manera: "M¨¢s que una nueva intenci¨®n organizativa hab¨ªa un intento de tomar las decisiones editoriales. Se nos ped¨ªa a Carlos Loret y a m¨ª que dej¨¢ramos de tener nuestra responsabilidad editorial". Seg¨²n la lectura de la periodista, "todo lo que ha pasado tiene que ver con la tensi¨®n entre los dos socios de la cadena Radi¨®polis [propietaria de W Radio]. Ante las reiteradas peticiones de cortarme la cabeza que Televisa hizo a PRISA el consorcio espa?ol decidi¨® minar mis responsabilidades editoriales. Alguien pidi¨® mi cabeza y alguien termin¨® por darla".