Modorra en el Camp Nou

Al Barcelona le alcanz¨® con un triste gol en un partido inanimado para sumar una victoria que se daba por descontada, sin menospreciar al Racing, que se bate con entusiasmo y grandeza por el campeonato, por m¨¢s que ayer se mostrara muy apagado, poco combativo. El encuentro fue tan poca cosa que la reaparici¨®n de Messi provoc¨® mayor alborozo que el tanto de Henry despu¨¦s de una pifia de los centrales c¨¢ntabros. El gol tuvo a fin de cuentas un efecto sedante sobre la contienda. A los azulgrana les vali¨® porque han convertido cada choque en un ejercicio de supervivencia defensiva y los verdiblancos se dieron por satisfechos porque la derrota para nada empa?¨® su buen cartel.

Al partido le cost¨® arrancar, y no por lo tard¨ªa de la hora de su disputa, sino por el disgusto que provoc¨® en el Camp Nou la victoria del Madrid en el Calder¨®n y porque tanto el Bar?a como el Racing juegan la Liga condicionados por los cuartos de final de la Copa. Ausentes Eto'o y Ronaldinho, Rijkaard reserv¨® a Messi, M¨¢rquez, Xavi y Abidal y plant¨® un equipo muy liviano y juvenil, con Iniesta como medio centro y Henry de referente ofensivo, mientras Marcelino rotaba a zagueros y centrocampistas para descanso a capataces como Pinillos, Garay y Colsa. A nadie le extra?¨® a la hora de las cuentas que los cambios desequilibraran m¨¢s al plantel c¨¢ntabro que al azulgrana.

La hinchada azulgrana celebr¨® m¨¢s la reaparici¨®n de Messi que el tanto del triunfo

Un error individual conden¨® a un equipo c¨¢ntabro que no concedi¨® ocasiones

Aunque siempre fue un equipo reconocible por su sentido colectivo del juego, su organizaci¨®n y capacidad para asociarse, al Racing le perdi¨® un error individual, el que cometi¨® C¨¦sar Navas a la salida de un c¨®rner botado por Deco a la media hora de partido. El central le dio con la u?a y acompa?¨® el centro del portugu¨¦s hasta la cabeza de Henry. El gol rompi¨® el mon¨®logo de Giovani. El mexicano se la jug¨® en cada acci¨®n, sin reparar en las condiciones defensivas, y sal¨ªa m¨¢s veces perdedor que ganador, de manera que la hinchada murmuraba sin reparar en la dificultad o facilidad de cada mano a mano que planteaba el atrevido extremo barcelonista.

El cabezazo de Henry le quit¨® dramatismo al encuentro. El f¨²tbol, en cambio, fue siempre insustancial y redundante, alejado de las exigencias del p¨²blico, necesitado de goles, de moral, de picos de juego. La porter¨ªa le quedaba demasiado lejos al Barcelona. Los delanteros extra?aron muy a menudo a Iniesta, excesivamente retrasado, tan l¨²cido en la salida del bal¨®n desde el campo azulgrana como desaprovechado en el balc¨®n del ¨¢rea. No combinaba ni mezclaba bien el Bar?a y al Racing le costaba alcanzar el ¨¢rea de Vald¨¦s.

El sistema defensivo c¨¢ntabro est¨¢ muy bien trabajado y su ocupaci¨®n del campo es muy racional. No cede con facilidad y para ganarse ocasiones hay que enfrentarle con intensidad, ritmo y cambios de orientaci¨®n. Al Barcelona le faltaban ayer delanteros como Eto'o para da?ar al Racing. El azulgrana fue a menudo un equipo monotem¨¢tico, poco agresivo y falto de ambici¨®n.

Tanto tonte¨® el Bar?a que el Racing se vino arriba durante un rato y fue a por el partido mientras resonaban en la cancha los gritos a favor de Messi, que calentaba en la cancha, divertido con la escena, impaciente por reaparecer ante la tralla que se avecina con los partidos en Vila-real y San Mam¨¦s. La rueda de cambios se desencaden¨® de forma imparable despu¨¦s que Vald¨¦s sacara con el brazo un remate espectacular de ?scar Serrano.

Apareci¨® M¨¢rquez, m¨¢s que nada para vertebrar al equipo, y despu¨¦s Messi por un Giovani definitivamente superado, confundido a la hora de elegir si acompa?ar la jugada o rematar, excesivamente ego¨ªsta. Giovani nunca conducir¨¢ la pelota como Messi. El argentino, sin embargo, est¨¢ a¨²n falto de forma, necesitado de referencias, poco enchufado. Pese a que forz¨® un par de faltas, Messi tampoco consigui¨® cerrar el encuentro, as¨ª que el ¨¢rea azulgrana no qued¨® a salvo de alg¨²n que otro sobresalto, bien resuelto por Vald¨¦s.

El Bar?a se defendi¨® tan bien como el Racing y el encuentro acab¨® tal y como comenz¨®, sin mayor novedad que el gol de Henry despu¨¦s de un c¨®rner mal defendido por Navas. Nadie mereci¨® m¨¢s en una jornada desmoralizadora en el Camp Nou por la victoria del Madrid.