Lo que 'votaron' en 2000 y 2004

Los obispos quieren intervenir en cada proceso electoral. Lo hicieron con estr¨¦pito en 2000, en v¨ªsperas de las elecciones que el 12 de marzo de ese a?o dieron la mayor¨ªa absoluta a Aznar. ?ste llevaba cuatro a?os en el poder en minor¨ªa, y no derog¨® las leyes execradas por los prelados, de forma que la nota episcopal reflej¨® aquel enojo. Consecuencia: los obispos dijeron que ning¨²n partido merec¨ªa el voto cat¨®lico porque ning¨²n programa "se adecua plenamente con el evangelio" por no incluir la supresi¨®n del derecho al aborto.

Pese a todo, el portavoz de la Conferencia Episcopal, entonces el obispo auxiliar de Toledo Jos¨¦ Asenjo (hoy prelado de C¨®rdoba), declar¨® que votar era un deber y que, por tanto, hab¨ªa que optar por el "mal menor". El PP hab¨ªa mantenido la ley que despenaliza el aborto, pero el PSOE propon¨ªa su ampliaci¨®n.

Al referirse a la opci¨®n del "mal menor" pudo interpretarse que Asenjo alud¨ªa al PP, aunque en el mismo acto los obispos tambi¨¦n dirigieron una severa cr¨ªtica a Aznar por haber autorizado la regularizaci¨®n comercial de la p¨ªldora abortiva.

El tono episcopal cambi¨® cuatro a?os m¨¢s tarde, en febrero de 2004, con Aznar en retirada y la guerra de Irak como tel¨®n de fondo. Entonces, el episcopado subray¨® que votar "es un derecho que ejercer y un deber que cumplir de modo responsable".

Para que no hubiera duda, enumeraban las ofertas a las que el votante deb¨ªa estar atento, todas contrarias al PSOE: la producci¨®n de embriones humanos; el aborto procurado, y la eutanasia. A?ad¨ªan: "Declarar que tales acciones ampl¨ªan supuestos derechos civiles significa llamar bueno a lo que es malo". Tambi¨¦n ped¨ªan votar a quienes dieran "apoyo claro a la familia, fundada en la uni¨®n de una mujer y un var¨®n, es decir, en el verdadero matrimonio".