Las malas relaciones de Ch¨¢vez con la Iglesia

Las relaciones de Hugo Ch¨¢vez con la Iglesia cat¨®lica han sido tortuosas, malas, porque una de las caracter¨ªsticas del r¨¦gimen de Hugo Ch¨¢vez, seg¨²n monse?or Baltasar Porras, es la aceleraci¨®n de la confrontaci¨®n. "El conflicto hay que crearlo, provocarlo, azuzarlo permanentemente", se?ala en Memorias de un obispo: los primeros meses de 2002.

"De esta manera, la gente no tiene tiempo de pensar, sino s¨®lo de reaccionar emocionalmente ante cada nuevo escenario. As¨ª pues, la brecha sigue y se favorece la polarizaci¨®n". La animosidad de Ch¨¢vez hacia el ex presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) no sorprende porque Porras no se muerde la lengua: "La actitud de confrontaci¨®n y descalificaci¨®n por parte del Gobierno no se limit¨® a la Iglesia. Todos los sectores que expresaron alguna opini¨®n divergente fueron tildados de opositores".

"Es importante hacer notar esto", a?ade el obispo venezolano, "porque se amolda al esquema autoritario, particularmente de tipo marxista". Porras, en su inventario de cr¨ªticas al Gobierno, se?al¨® en el a?o 2002 que en lugar de disminuir la pobreza de la mayor¨ªa en Venezuela aument¨® la corrupci¨®n de quienes ten¨ªan acceso al dinero f¨¢cil, y la moral del inter¨¦s se puso por encima del bien com¨²n.

El prelado niega que la Iglesia cat¨®lica conspirase contra el Gobierno, tal como acusaron portavoces del oficialismo: "Nunca fuimos invitados, ni lo hubi¨¦ramos aceptado, a estar presentes en reuniones de ¨ªndole o finalidad conspirativa". El recuento de la crisis de abril del a?o 2002, agrega, es un cap¨ªtulo de sus memorias. "Tengo la costumbre de tomar nota de todos aquellos acontecimientos en los que toca participar". Los ocurridos entonces fueron hist¨®ricos y todav¨ªa no cicatrizan.