Derrotismo triunfal
Nada m¨¢s lejos que convertir el debate entre Zapatero y Rajoy en un programa obligatorio. Un debate no es por definici¨®n un programa de prime time, sobre todo cuando se estructura como un espacio de propaganda electoral a dos voces y se puede decidir por el color de la corbata o el bot¨®n de la camisa. Pero las decisiones de las televisiones que no lo ofrecieron tampoco suenan a inocentes. Antena 3 y Tele 5 lo quer¨ªan retransmitir en su formato particular y no les interes¨® cuando el formato fue neutro. Estaban en su derecho, aunque sea discutible el debate sobre si fue antes el formato o el debate. Ya saben lo de la parte contratante de la segunda parte, etc¨¦tera, etc¨¦tera.
ETB, ejerciendo su libertad, tampoco ofreci¨® el cara a cara entre los dos aspirantes a la presidencia del Gobierno espa?ol. En cambio, mantuvo su parrilla habitual y ofreci¨® su reality, El conquistador del fin del mundo, una especia de Supervivientes local que tambi¨¦n tiene algo de debate. Aqu¨ª, en vez de uno contra uno (Zapatero contra Rajoy), es un dos contra dos: los capitanes Juanito Oyarzabal y Marta L¨®pez, frente a Virginia Berasategi y Johnny Cuyami. Un monta?ero y una miss Euskadi (am¨¦n de presentadora) frente a una triatleta y un ex futbolista de la Real.
ETB estaba en su derecho y lo ejerci¨®. Pero su decisi¨®n tiene algo que ver con el ambiente general de la campa?a en Euskadi. Unos no quieren movilizar y otros no saben. Al PNV no se le aprecia entusiasmo en la campa?a. Es l¨®gico. El mejor resultado posible para sus expectativas a corto y medio plazo es un empate t¨¦cnico entre el PSOE y el PP. Eso le hace irresistible en las condiciones de gobernabilidad, y el empate t¨¦cnico no se consigue con una movilizaci¨®n masiva. El PNV cuenta con un cierto desplome de ERC que reduzca los pactos de gobierno o los modifique. Al PNV no le van a faltar muchos de sus votos y tampoco rascar¨¢ ninguno de la abstencionista y autodenominada izquierda abertzale, aunque interiorice un segundo debate interno, m¨¢s privado, sobre los resultados por territorios. Que inventen ellos, viene a decir, mientras tanto.
Y ellos son el PSE y el PP, poco dados a la innovaci¨®n y muy proclives al continuismo electoral, subsumidos en el debate Zapatero-Rajoy en espera de batallas m¨¢s cercanas. Y eso que Euskadi es una de las comunidades decisivas en el resultado global de las elecciones. No lo parece. La sensaci¨®n general es que pasar¨¢ lo que suele pasar y que s¨®lo la abstenci¨®n beneficiar¨¢ o castigar¨¢ a unos u otros. Hay un cierto derrotismo triunfal. Cada uno cuenta con lo que tiene y se siente a gusto con sus posesiones. No hay afanes invasores ni idea que anotar en el bloc de las originalidades. Descuenten el mitin de Rajoy y el de Zapatero -donde dir¨¢n lo que ustedes ya saben que van a decir-, por la impronta del liderazgo, y el resto habr¨¢ sido un suspiro. Pero en pol¨ªtica casi nada es inocente. Mejor dicho, nada.
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