?Felicidades Perico!
El Museo Textil y de la Indumentaria de Barcelona recibe 341 piezas de Pedro Rodr¨ªguez, pionero de la alta costura
Maria Brillas Oliver¨®, se?ora de Ensesa (Barcelona, 1905-1992), mantuvo una curiosa relaci¨®n de afecto con el c¨¦lebre dise?ador de moda catal¨¢n de origen valenciano Pedro Rodr¨ªguez (Valencia, 1895-Barcelona, 1990). Le conoci¨® poco despu¨¦s de casada, a los 27 a?os, y le fue fiel hasta la muerte. Brillas se cas¨® con el empresario gerundense Josep Ensesa, uno de los propietarios y promotores de la urbanizaci¨®n de S'Agar¨®, proyectada por el arquitecto noucentista Rafael Mas¨®. Anfitriona ideal de fiestas y eventos de la mejor sociedad, Maria Brillas luci¨® siempre vestidos de Rodr¨ªguez, de la ma?ana a la noche. Su nutrido armario se iniciaba en 1932 y terminar¨ªa en la vejez con la muerte de su adorado estilista, acaecida en 1990, dos a?os antes que la suya.
Igual que la mayor¨ªa de buenas clientas, la se?ora Brillas apreciaba much¨ªsimo a Pedro Rodr¨ªguez -Perico para sus m¨¢s allegados-, seguramente m¨¢s que su marido, que era quien deb¨ªa pagar las cuantiosas facturas de sus vestidos. La sociedad machista -la de a?os atr¨¢s- tambi¨¦n ten¨ªa sus peque?os inconvenientes. Viendo las fotos que se han conservado, se puede observar como el modisto tambi¨¦n ten¨ªa una gran complicidad con ella, al margen del erotismo pues, quiz¨¢, las preferencias del couturier iban, como tantos, por otro camino.
Maria Brillas se encarg¨® de celebrar en su casa de S'Agar¨® el 80? aniversario de Rodr¨ªguez, y 10 a?os m¨¢s tarde, junto con Magda Soler, Rosa Maria Mart¨ªn -ex directora del Museo Textil y de la Indumentaria (MTIB)-, Segismundo de Anta y la modelo Francina D¨ªaz, form¨® parte de la comisi¨®n que organiz¨® la fiesta de su 90 cumplea?os en el Ritz con un pase de modelos hist¨®ricos que configurar¨ªan la reci¨¦n desaparecida Sala Rodr¨ªguez del museo barcelon¨¦s. Un espacio permanente, en teor¨ªa, que inauguraba el creador y maestro en 1989.
La nieta de Brillas, Hilda Bencomo, conserv¨® como un preciado tesoro el fabuloso guardarropa de su estilizada abuela y lo ofreci¨® ¨ªntegramente al MTIB, que ya formaba parte del Museo de las Artes Decorativas. Se aduj¨®, entonces, falta de espacio para asumir la totalidad pese al gran inter¨¦s de Rosa Maria Mart¨ªn, pieza clave en la donaci¨®n y conocedora excepcional de la obra de Rodr¨ªguez, en palabras de la propia Bencomo. Poco despu¨¦s, museos y entidades extranjeras se interesaban por ese estupendo conjunto, pero su propietaria persisti¨® hasta conseguir que se aceptara en el lugar que su abuela hubiera considerado el m¨¢s oportuno. Finalmente, el martes pasado se firmaba el acuerdo de donaci¨®n entre Bencomo y el Ayuntamiento de Barcelona. El impresionante material ha sido declarado patrimonio cultural tanto por parte de la Generalitat como del Estado espa?ol. Como paradoja, el acto se realizaba en el reci¨¦n desmantelado MTIB, con sus salas completamente vac¨ªas pues tal como se anuncia en la fachada "ha cambiado de piel" para ser absorbido definitivamente por el Museo de las Artes Decorativas en el Palau de Pedralbes.
De aqu¨ª a unos meses, los vestidos, bolsos y sombreros de Maria Brillas podr¨¢n ser consultados por los especialistas y, m¨¢s adelante, ser¨¢n objeto de una retrospectiva y una publicaci¨®n monogr¨¢fica. Esta generosa donaci¨®n, que obviamente cuenta con algunos beneficios fiscales, corrobora la solidez de un fondo espl¨¦ndido que de por s¨ª dar¨ªa para situar al MTIB como uno de los grandes museos de la moda junto a los de Par¨ªs, Kioto y Dallas. Tambi¨¦n podr¨ªa provocar un alud de regalos de las hijas y nietas de otras clientas de Rodr¨ªguez y de las de Asunci¨®n Bastida, Balenciaga, Rosser, Carmen Mir, Pertegaz o Pedro Rovira. Quiz¨¢ para el futuro Centre del Disseny de Barcelona, cuya primera piedra est¨¢ previsto que se ponga el pr¨®ximo septiembre en la plaza de Les Gl¨°ries, este opulento y fabuloso regalo represente un engorro. ?Habr¨¢ cabida para tanto y tan bueno, junto a lo que ya se tiene de esta materia y adem¨¢s compartiendo cartel con todo lo extra textil, arquitectura incluida? Pero para su subsidiario MTIB es, sin lugar a dudas, una noticia maravillosa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.