Autobuses en pie de guerra
Barcelona y Valencia tambi¨¦n sufren huelgas de transportes
Colas, esperas y enfados. Desde el pasado 22 de febrero, Madrid padece una huelga de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) por la negociaci¨®n del convenio colectivo. Lo mismo ocurre en las ciudades de Barcelona y Valencia. Con el agravante, en la primera, de que lleva desde noviembre sufriendo movilizaciones y, en la segunda, de que coincide con parones en el metro. Las tres ciudades est¨¢n pasando por una larga cuesta de enero en los transportes. Los principales afectados, los millones de usuarios que cada d¨ªa utilizan el autob¨²s o del suburbano para desplazarse.
UNA HUELGA TRANQUILA EN MADRID
Los viajeros esperando bajo las marquesinas es la imagen cl¨¢sica en hora punta los d¨ªas marcados en rojo en el calendario de los trabajadores de la EMT. Siete paros ha habido hasta ahora desde que se convoc¨® la huelga, el pasado 22 de febrero, tres de ellos de 24 horas. Tambi¨¦n siete han sido las reuniones entre sindicatos y la EMT, antes de llegar a esta situaci¨®n. No se ponen de acuerdo en la negociaci¨®n del convenio colectivo. A los madrile?os a¨²n les quedan dos jornadas m¨¢s de paros parciales, ma?ana y el mi¨¦rcoles.
Las demandas de los 7.700 trabajadores de la empresa municipal son b¨¢sicamente econ¨®micas. Piden un plus mensual de 180 euros, m¨¢s una paga extra de 500 euros en septiembre. El comit¨¦ de empresa exige tambi¨¦n un descanso de media hora entre jornadas, que ya tienen reconocido pero que no se aplica, denuncian. La EMT calcula que estas reivindicaciones implican incrementar hasta el 29% los salarios, un gasto que la empresa cifra en 80 millones de euros.
El conflicto para el ciudadano se traduce en esperas, en algunas ocasiones de m¨¢s de una hora. Para los cerca de 800.000 viajeros de la EMT, s¨®lo circulan el 60% de los autobuses en hora punta en las l¨ªneas que no tienen otro medio de transporte alternativo, y el 50% en las que s¨ª; en horas valle, es del 40% para todas las l¨ªneas.
La reducci¨®n de la flota ha sido notoria. De los 1.800 autobuses, han circulado 940: los viajeros han optado por otros medios de transporte. Los vagones del metro se han llenado en hora punta un 10% m¨¢s y los viajes en taxi han crecido el 25%, seg¨²n el sector. Aun as¨ª no puede decirse que la ciudad est¨¦ paralizada por la huelga. S¨®lo el lunes pasado se vivi¨® un amago de trifulca en una manifestaci¨®n de m¨¢s de 7.500 personas a favor de la huelga. Lo que empez¨® como una concentraci¨®n pac¨ªfica, casi acaba en bronca cuando los antidisturbios tuvieron que reducir a unos manifestantes que intentaron parar el tr¨¢fico. Pero en general las reivindicaciones se han hecho en calma. La EMT ha cifrado los da?os en apenas una decena de destrozos en coches.
Tras seis d¨ªas de huelga, el jueves se reuni¨® la mesa negociadora por primera vez desde que empezara las movilizaciones. Pero no hubo acuerdo. La EMT se comprometi¨® a ofrecer mejoras salariales seg¨²n la productividad y pidi¨® un menor absentismo laboral, que en 2007 cifr¨® del 10%. El martes est¨¢ prevista otra reuni¨®n que, seg¨²n los trabajadores, tienen visos de acabar tambi¨¦n en tablas. La huelga seguir¨¢ al menos dos d¨ªas m¨¢s. Despu¨¦s tras unas jornadas "de reflexi¨®n", decidir¨¢n si abandonan la huelga o plantean un nuevo calendario.
BARCELONA, PARADA DESDE NOVIEMBRE
Cinco meses de v¨ªa crucis. Con m¨¢s o menos intensidad pero el calvario de los usuarios de la red de autobuses de Barcelona arranc¨® el pasado noviembre. El 21 de noviembre, la convocatoria fue de cinco horas. En diciembre, cuatro d¨ªas seguidos a las puertas de la Navidad. En enero, tres m¨¢s. En febrero, seis horas, y, esta primera semana de marzo, cinco d¨ªas a los que seguir¨¢n todos los jueves del mes.
La empresa de transportes calcula que m¨¢s de 575.000 personas utilizan cada d¨ªa los autobuses y que en esta semana se habr¨¢n perdido 2,5 millones de viajes. Los afectados se cuentan por millares porque los servicios m¨ªnimos s¨®lo cubr¨ªan la franja punta de la ma?ana y la tarde y con la mitad de la flota. Los usuarios no esconden su enfado, sobre todo cuando viajan en los atestados vagones del metro. ?se ha sido el transporte que ha notado m¨¢s el trasvase.
La huelga de esta ¨²ltima semana ha tenido, adem¨¢s, el negativo efecto del incremento del tr¨¢fico rodado -en torno a un 3%- y un mont¨®n de problemas de circulaci¨®n en el centro, ya que, a diario, las asambleas de los trabajadores se celebraran en la calle y acababan en manifestaciones improvisadas con el consecuente caos de tr¨¢fico.
Las principales reivindicaciones de los conductores de autob¨²s -la plantilla es de cerca de 2.900- son tener dos d¨ªas de fiesta consecutivos y el derecho a descanso de media hora dentro de la jornada laboral. Se plantean tambi¨¦n incrementos salariales. La postura de la empresa ha permanecido inamovible: si hay huelga no se negocia.
Al otro lado del conflicto, la voz del presidente del comit¨¦ de empresa, Saturnino Mercader (CGT), se opone a la desconvocatoria de la huelga: "Si quieren negociar, se puede negociar". Esta huelga tiene la particularidad de que ha creado una importante tensi¨®n en el comit¨¦ de empresa, en el que son mayor¨ªa las centrales de UGT, CC OO y el Sindicato Independiente de Trabajadores (SIT). ?stos se han limitado a dar su apoyo t¨¢cito al paro convocado por las dos fuerzas sindicales m¨¢s radicales: CGT y Actub. Pero la huelga tiene sus costes, y tanto UGT como CC OO han decidido buscar alg¨²n acercamiento para que la empresa convoque al comit¨¦ y se abra la negociaci¨®n. Casi uno de cada cuatro trabajadores ha cogido la baja para evitar descuentos en la n¨®mina.
La salida del callej¨®n, tal vez, podr¨ªa producirse a partir de ma?ana si todos se avienen a sentarse. El conflicto, adem¨¢s, ha tenido otras consecuencias: 61 autobuses saboteados y casi 25 trabajadores con expediente disciplinario. Y un sinf¨ªn de enfrentamientos, en forma de amenazas y coacciones, entre compa?eros del volante.
FALLAS SIN AUTOB?S NI METRO EN VALENCIA
Entre dos fuegos y con la semana fallera a la vuelta de la esquina. Los usuarios del transporte p¨²blico en Valencia lidian desde finales de febrero con dos huelgas, la de los autobuses de la EMT y la de maquinistas del metro. Ya van cuatro jornadas con paros coincidentes en la hora punta de la ma?ana, con m¨¢s de 150.000 viajeros afectados que abarrotan andenes y convoyes en el suburbano o esperan resignados en las paradas de autob¨²s. La imagen se repite a ¨²ltima hora de la tarde.
Los conductores de la EMT no cumplen los servicios m¨ªnimos en hora punta matinal, fijados en el 66%. Los sindicatos, convocantes de la protesta por el bloqueo de la negociaci¨®n del convenio, los consideran abusivos. De los 270 veh¨ªculos que deb¨ªan circular, en los primeros paros s¨®lo salieron entre 60 y 80 -el viernes ya fueron 200-. Eso ha motivado a muchos usuarios a buscar alternativas al autob¨²s.
Los viajeros del metro soportan paros parciales desde finales de enero, tambi¨¦n con el 66% de servicios m¨ªnimos que hasta ahora se han respetado. La huelga la ha convocado en solitario el Sindicato Independiente Ferroviario (SIF), mayoritario entre los maquinistas.
Empresa y sindicato se han enredado a cuenta de un plus de productividad que la direcci¨®n de Metro no quiere negociar fuera del convenio, en plena revisi¨®n. El SIF, adem¨¢s, pide mejoras de seguridad y denuncia la fuerte presi¨®n sobre los maquinistas desde el accidente que cost¨® la vida a 43 personas en 2006 al descarrilar un convoy. Metro acusa al sindicato de utilizar la seguridad como escudo "para lograr mejoras salariales".
El arranque de los actos de Fallas, con el disparo de una masclet¨¤ en la plaza del Ayuntamiento todos los d¨ªas a las dos de la tarde, ha complicado la situaci¨®n por la gran afluencia de p¨²blico, que baja en avalancha a los andenes en pleno paro parcial de tres horas. Y cada d¨ªa ser¨¢ peor. Especialmente a partir del 15 de marzo, cuando los maquinistas del metro prev¨¦n paros de 24 horas en plenas Fallas.
En previsi¨®n del caos que se avecina, la Direcci¨®n General de Trabajo ha aumentado los servicios m¨ªnimos para esos d¨ªas y la masclet¨¤ a un 90%, una medida sin precedentes que anula la huelga. El mismo aumento pretende imponerlo en la EMT para dos paros de jornada completa en Fallas que coinciden con los del metro, pero la decisi¨®n se ha pospuesto. Comit¨¦ de empresa y direcci¨®n de la EMT prev¨¦n retomar la negociaci¨®n. Los trabajadores defienden que sus reivindicaciones no se apartan de otros convenios, pero el Ayuntamiento, del PP, ve desmesuradas sus pretensiones.
De momento, no ha habido incidentes con los piquetes, aunque fuera de las cocheras algunos autobuses han sufrido pinchazos y un veh¨ªculo acab¨® la ruta con una luna rota. La proximidad de las fiestas de las Fallas puede acelerar las negociaciones en ambos transportes. Mientras tanto, unos y otros lamentan el trastorno a miles de ciudadanos que siguen cercados por las dos huelgas.
Esta informaci¨®n ha sido elaborada por Rebeca Carranco, Blanca C¨ªa y Sara Velert.
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