Los republicanos exigen al gobernador de Nueva York que dimita
La fiscal¨ªa implica al dem¨®crata Spitzer en un caso de prostituci¨®n
La cabeza de Eliot Spitzer est¨¢ en la bandeja. La presi¨®n para que el gobernador dem¨®crata del Estado de Nueva York dimita no para de crecer tras verse implicado en una red de prostituci¨®n en la que aparece como cliente, y que est¨¢ cuestionando su ¨¦tica en su etapa como fiscal. Su renuncia se daba ayer por hecha, aunque se especulaba con que Spitzer quiere asegurarse de que no se presentar¨¢n cargos contra ¨¦l. La oposici¨®n republicana amenaza con censurarle y exige su dimisi¨®n.
Cuando ayer se preguntaba a los neoyorquinos sobre lo que pensaban al o¨ªr el nombre de Spitzer, la reacci¨®n m¨¢s com¨²n era la de verg¨¹enza e indignaci¨®n. Recordaban que el gobernador construy¨® su brillante carrera persiguiendo desde la rectitud a los grandes banqueros que abusaban de los inversores, lo que le llev¨® a ser conocido como el sheriff de Wall Street.
Ahora, su brillante carrera est¨¢ al borde del colapso. Spitzer es identificado como el "cliente 9" del Emperors Club VIP, en el marco de una investigaci¨®n contra una red criminal dedicada a la prostituci¨®n y al blanqueo de dinero. Los documentos que maneja la fiscal¨ªa, en base a las revelaciones de un infiltrado y de pinchazos telef¨®nicos, aportan detalles sobre el precio pactado, la forma de pago, el lugar de la cita y los arreglos para el transporte.
Eliot Spitzer se registr¨® supuestamente la noche del 13 de febrero en un hotel en Washington con el nombre de un amigo, el inversor George Fox, y utiliz¨® la direcci¨®n de su residencia en Manhattan. El encuentro se produjo a las 21.30, hora local. Pasada la medianoche, la prostituta comunic¨® a sus jefes que hab¨ªa concluido la cita y que ten¨ªa el abono de 4.300 d¨®lares [2.800 euros].
Se especula con que no era la primera vez que Spitzer contactaba a esta red, porque ya dispon¨ªa de cr¨¦dito en el club. Hasta el momento no se han presentado cargos contra ¨¦l. Y aunque en estos casos no es habitual que se emprendan acciones legales contra los clientes de la red, podr¨ªa ser procesado por el hecho de que la prostituta se desplaz¨® a Washington para prestar el servicio.
El esc¨¢ndalo podr¨ªa suponer el fin de la carrera pol¨ªtica del gobernador, del que se dec¨ªa que podr¨ªa aspirar a la Casa Blanca. Y de presentar finalmente su dimisi¨®n, su puesto ser¨ªa ocupado por David Paterson, que se convertir¨ªa en el primer afroamericano en gobernar Nueva York. Spitzer es, adem¨¢s, uno de los superdelegados que apoyan a Hillary Clinton en la re?ida batalla que libra frente a Barack Obama para hacerse con la candidatura dem¨®crata a las presidenciales.
Los medios est¨¢n tirando de los archivos y revelando documentaci¨®n muy jugosa, como una entrevista que concedi¨® hace dos a?os a la cadena de televisi¨®n ABC, en la que Spitzer se aventuraba a dar consejos para que a uno no le pillen violando la ley: "Nunca hables cuando puedas asentir, nunca asientas cuando puedas gui?ar y nunca escribas un mensaje electr¨®nico, porque es la muerte. Est¨¢s dando al fiscal las pruebas que necesita".
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