"No quiero suicidarme en Pek¨ªn"
Durante un acto en Madrid, se le dice a Haile Gebrselassie que la capital espa?ola sufre tanto de contaminaci¨®n atmosf¨¦rica que hay d¨ªas en los que las autoridades recomiendan no hacer ejercicio f¨ªsico por las calles. Entonces, el atleta et¨ªope se levanta, se asoma a una terraza que da al Retiro y a la Puerta de Alcal¨¢ y, aunque el fondo gris¨¢ceo y borroso hacia el sur hace sospechar de peligrosas part¨ªculas en suspensi¨®n, se vuelve y exclama: "?Pero c¨®mo vais a comparar esto con Pek¨ªn?"
Ganar el oro ol¨ªmpico en el marat¨®n ser¨ªa para Gebrselassie (Etiop¨ªa, 1973) la culminaci¨®n de una carrera atl¨¦tica imponente: cuatro veces campe¨®n del mundo y dos veces ol¨ªmpico, siempre en la distancia de 10.000 metros; 25 r¨¦cords mundiales en su haber, entre ellos el actual del marat¨®n (42,195 kil¨®metros en 2h 4m 26s). Sin embargo, asustado por la contaminaci¨®n, el calor y la humedad que se prev¨¦n en la capital china en agosto, Gebrselassie anunci¨® la semana pasada su renuncia a correr el marat¨®n de los pr¨®ximos Juegos Ol¨ªmpicos de Pek¨ªn. "Tendr¨¦ que esperar a los de Londres 2012", dijo el atleta de quien tan s¨®lo la sonrisa es m¨¢s grande que el palmar¨¦s. "Tendr¨¦ 39 a?os. Todav¨ªa ser¨¦ joven".
"Mi federaci¨®n dice que no soy yo qui¨¦n para decidir, pero ?van a morir ellos por m¨ª?"
"Con el oro ol¨ªmpico ser¨ªa muy rico al d¨ªa siguiente. El asunto es la salud, no el dinero"
"Pronto veremos c¨®mo muchos otros atletas dan el paso de renunciar al marat¨®n"
"Ser¨¢ imposible por la combinaci¨®n de la poluci¨®n, el calor y la humedad"
Pregunta. Fue anunciar usted su renuncia y, como si hubiera sido el pistoletazo de salida de una carrera, comenzar en todo el mundo la pol¨¦mica sobre las condiciones de Pek¨ªn. ?Era consciente de la repercusi¨®n que iba a tener su decisi¨®n?
Respuesta. Pero ha sido una decisi¨®n puramente personal. Es una decisi¨®n que he tomado por m¨ª mismo, por mi salud. No quiero poner en peligro mi futuro. No quiero suicidarme en Pek¨ªn haciendo algo equivocado. He hecho lo mejor por mi salud. Pero quiero volver a ser campe¨®n ol¨ªmpico y competir en Pek¨ªn. Por eso me busqu¨¦ una salida, que ser¨¢ correr de nuevo los 10.000 metros, como lo hice en Atlanta, Sidney y Atenas. El marat¨®n, en esas condiciones, es imposible.
P. Usted es un s¨ªmbolo, uno de los grandes campeones de la historia. ?Cree que otros le imitar¨¢n?
R. Muchos, muchos. S¨¦ que muchos atletas est¨¢n empezando a dudar. No s¨¦ si Paul Tergat [el keniano que ha sido su gran rival toda su vida] competir¨¢ porque a¨²n no ha logrado clasificarse, pero pronto se va a ver c¨®mo otros atletas dan el paso de renunciar. He estado en Pek¨ªn y no lo han puesto f¨¢cil. El marat¨®n ser¨¢ imposible por la combinaci¨®n de la poluci¨®n, el calor y la humedad. Eso equivale a un suicidio. Es imposible.
P. Y, encima, es usted asm¨¢tico, ?no?
R. S¨ª, soy asm¨¢tico. No puedo correr all¨ª as¨ª.
P. Pero la federaci¨®n de Etiop¨ªa dice que no acepta su decisi¨®n, que no le permitir¨¢ correr los 10.000 metros...
R. Vaya, van y dicen que yo no soy qui¨¦n para tomar una decisi¨®n que afecta a mi salud... Pero ellos no ser¨¢n quienes mueran por m¨ª. No quiero morir.
P. ?Ha hablado con Bekele, Sihine y los dem¨¢s atletas del 10.000 a los que cedi¨® el testigo en los Juegos de Atenas?
R. S¨ª, s¨ª. No habr¨¢ ning¨²n problema con ellos. Tendr¨¦ que correr mucho y muy deprisa para ganarme la plaza, pero creo que todav¨ªa ser¨¦ capaz de ello aunque hace muchos a?os que dej¨¦ la pista. Hoy mismo me vuelvo a Adis Abeba para iniciar los entrenamientos para el 10.000. Seremos un equipo muy fuerte.
P. En Etiop¨ªa tambi¨¦n se ha hecho empresario de la construcci¨®n...
R. Mi vida all¨ª es entrenarme y trabajar. Hacemos oficinas, escuelas, de todo. Etiop¨ªa va hacia arriba. Todo mejora a gran velocidad y a ello hemos contribuido los atletas, que hemos elevado el orgullo nacional. Antes la gente no cre¨ªa en s¨ª misma.
P. En enero pasado, apenas cuatro meses despu¨¦s de lograr el r¨¦cord mundial en Berl¨ªn, fracas¨® en Dubai en su intento de rebajarlo. ?Qu¨¦ ocurri¨®?
R. Corr¨ª muy r¨¢pido la primera mitad. La hice en 1h 1m cuando lo previsto era hacerlo un minuto m¨¢s lento. Fueron las liebres. Les ten¨ªa que decir que fueran m¨¢s lento, m¨¢s lento. Al final, no resist¨ª el ritmo. Pero, corriendo bien, creo que puedo bajar de 2h 4m.
P. Los atletas europeos y americanos dicen que el tope es correr dos maratones al a?o...
R. Pero yo creo que se pueden correr tres a gran nivel.
P. Se lo pregunto porque algunos comentan que la verdadera raz¨®n de su renuncia a Pek¨ªn es porque quiere volver a correr en Berl¨ªn, donde le pagar¨ªan millones por hacerlo...
R. Quien diga eso no entiende nada. La mejor forma de ganar m¨¢s dinero es siendo campe¨®n ol¨ªmpico. Si ganara en Pek¨ªn, al d¨ªa siguiente ser¨ªa autom¨¢ticamente muy rico. El problema no es el dinero, es la salud.
P. ?No le parece incre¨ªble que se pueda correr tan r¨¢pido, a casi 21 kil¨®metros por hora, durante tanto tiempo? ?No se est¨¢n sobrepasando los l¨ªmites del cuerpo humano?
R. Y no hemos tocado techo a¨²n. Estoy seguro de que en los pr¨®ximos 20 a?os se bajar¨¢ de las dos horas en el marat¨®n. Pero no es s¨®lo cuesti¨®n del organismo. Tambi¨¦n influye la tecnolog¨ªa, se bebe mejor, se come mejor.
P. ?Por eso corre usted m¨¢s r¨¢pido ahora, a los 35 a?os, que cuando ten¨ªa 20?
R. Yo siempre me he cuidado mucho, he vigilado mucho la comida, he hecho vida sana, y no s¨®lo ahora, cuando soy viejo. Todav¨ªa me entreno corriendo 30-35 kil¨®metros al d¨ªa en dos sesiones, ma?ana y tarde. Y, por ejemplo, cuando hago sesiones de tres horas, me mantengo en cuatro minutos el kil¨®metro [15 kil¨®metros por hora].
P. ?Y seguro que aguantar¨¢ en activo hasta Londres 2012, 16 a?os m¨¢s tarde de su debut ol¨ªmpico en Atlanta?
R. S¨ª, claro. Tendr¨¦ 39 a?os en Londres, que no es una edad excepcional para el marat¨®n. Incluso puede ser mejor. Seguir¨¦ corriendo varios maratones al a?o, pero lo que no creo es que pueda seguir batiendo r¨¦cords muchos a?os. Con bajar de 2h 4m me bastar¨¢.
P. ?Y tambi¨¦n es definitivo que no correr¨¢ el marat¨®n de Pek¨ªn?
R. Me encanta correr, amo correr, mi vida es el marat¨®n. Me encantar¨ªa ser campe¨®n ol¨ªmpico en Pek¨ªn y los ¨²ltimos a?os se hab¨ªa convertido en mi principal objetivo. Pero ?qu¨¦ puedo hacer? Es una l¨¢stima, pero quiero seguir vivo y corriendo.
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