La M-30 de los t¨²neles tambi¨¦n se atasca
Dos redactoras chequean la v¨ªa de circunvalaci¨®n madrile?a - En hora punta se necesita m¨¢s de una hora para recorrerla, igual que hace 16 a?os
T¨²nel del Nudo Sur: 8.10 del mi¨¦rcoles 2 de abril. La vista se pierde en la fila de veh¨ªculos a menos de 20 kil¨®metros por hora. La circunvalaci¨®n parece una reuni¨®n de solitarios. Ni un autom¨®vil con m¨¢s de un ocupante. Un anuncio suena en la radio a la hora justa: "?Pero si te he destrozado el coche!". La voz de la mujer parece alarmada. La del conductor, en absoluto. "Tranquila, se puede arreglar". Arranca la sinton¨ªa. Y habla el locutor: "Si tu vida sexual est¨¢ bien, lo dem¨¢s no importa... Se puede arreglar".
Dos redactoras de este peri¨®dico realizaron el pasado mi¨¦rcoles tres recorridos completos por la M-30. El turismo verde viaj¨® en el sentido de las agujas del reloj. El rojo, al rev¨¦s. Ambos salieron del puente de Ventas a las 8.00, a las 14.00 y a las 20.00. Objetivo 1: chequear la ronda de Madrid que esta semana estren¨® 16 radares para captar a los infractores que sobrepasen los 79 kil¨®metros por hora en los t¨²neles.
La circunvalaci¨®n absorbe hasta 60.000 veh¨ªculos m¨¢s que en 1992
Un cuarto de hora de embrague, primera y punto muerto hasta Ventas
El coche frena en el ¨²nico tramo que s¨ª es una calle: Avenida de la Ilustraci¨®n
Ning¨²n coche supera los 30 por hora a las ocho de la ma?ana
Objetivo 2: comparar los tiempos con los recogidos por EL PA?S en una experiencia similar en 1992, cuando se complet¨® la circunvalaci¨®n.
La regi¨®n ha cambiado mucho en estos 16 a?os. La poblaci¨®n ha crecido hasta los 6,1 millones de personas, un mill¨®n m¨¢s, y el parque automovil¨ªstico casi se ha doblado, de 2,5 a cuatro millones de veh¨ªculos. El tr¨¢fico diario por la v¨ªa se ha mantenido estable en los puntos menos congestionados, entre 150.000 y 160.000 coches, y se ha disparado en los m¨¢s transitados: de 250.000 hasta 310.000.
El salto tambi¨¦n ha sido gigantesco en las inversiones realizadas. Los 50.000 millones de pesetas (300 millones de euros) gastados en cerrar el anillo de la M-30 en 1992, se han quedado en calderilla si se comparan con los m¨¢s de 3.500 millones gastados por el alcalde Alberto Ruiz-Gallard¨®n en soterrar 56 kil¨®metros de calzada y accesos, una deuda que la capital arrastrar¨¢ los pr¨®ximos 30 a?os.
El chequeo hecho por EL PA?S confirma el aumento del tr¨¢fico y la modernizaci¨®n de la v¨ªa, pero hay cosas que no han cambiado: los atascos se siguen formando a primera hora de la ma?ana y los tiempos necesarios para recorrer todo el anillo se mantienen, incluso empeoran algo en la prueba hecha a las ocho de la ma?ana.
?Por qu¨¦ la mejora en la infraestructura no ha reducido tambi¨¦n las esperas? Para Andr¨¦s Monz¨®n, catedr¨¢tico de Transporte, se debe a que el sistema est¨¢ "al borde de la congesti¨®n" y eso supone que ciertos atascos son inevitables. Por eso, a su entender, las obras "no eran necesarias" si la intenci¨®n era mejorar el tr¨¢fico. Aunque reconoce que "una vez hechas, suponen beneficios sociales" para los vecinos del Manzanares.
Monz¨®n a?ade que tambi¨¦n hay "un equilibrio" entre el tr¨¢fico de todas las carreteras de la capital porque el conductor calcula su itinerario teniendo en cuenta la congesti¨®n de dichas v¨ªas. Cuando una carretera se congestiona, "los usuarios ven que el camino no funciona y lo cambian", asegura.
Una portavoz del Ayuntamiento rest¨® valor al experimento realizado "con mediciones de s¨®lo dos d¨ªas". Considera que repetir los tiempos en una infraestructura que absorbe 60.000 veh¨ªculos m¨¢s que hace 16 a?os "es muy satisfactorio". "La infraestructura no se piensa s¨®lo para la hora punta", concluye.
As¨ª que los coches siguen qued¨¢ndose atascados hoy como ayer. El soterramiento de la M-30 no ha servido para terminar con el gran embudo que forman los conductores en el Nudo Sur que madrugan para ir a trabajar, llevar a sus hijos al colegio, ir al m¨¦dico... En la prueba de 2008, los coches permanecieron parados en el nudo de Costa Rica en el noreste y en la avenida de la Ilustraci¨®n. En 1992, se congestion¨® el nudo de Manoteras. Y la foto fija se repite: el trayecto de las ocho de la ma?ana cuesta m¨¢s de una hora. La M-30 se convierte por tramos en una mara?a de coches que desaf¨ªa la paciencia del currito m¨¢s tranquilo.
El mi¨¦rcoles a las 8.00, el veloc¨ªmetro del coche verde -que recorri¨® la M-30 en el sentido de las agujas del reloj-, roza los 90 kil¨®metros s¨®lo una vez al principio del trayecto. El viaje de Ventas a Ventas le supone una hora y cuarto. El tr¨¢fico obliga a reducir hasta punto muerto en el Nudo Sur. Primer par¨®n: 17 minutos para siete kil¨®metros.
La mujer de voz meliflua que ofrece la informaci¨®n municipal de tr¨¢fico en el bolet¨ªn de noticias advierte de las trampas en tiempo real: "Retenciones en el recorrido sur-norte por todo el este". Y enumera otras "incidencias": carril cortado en Delicias, hora punta "complicada" en Santa Mar¨ªa de la Cabeza y en la prolongaci¨®n de O'Donnell. "?Que tengan un buen d¨ªa!".
Adem¨¢s de los t¨²neles, el coche se para de nuevo en el ¨²nico tramo de la circunvalaci¨®n que realmente es una calle 30, la avenida de la Ilustraci¨®n, con m¨¢s de una decena de sem¨¢foros. La restricci¨®n de 50 kil¨®metros por hora suena a chiste. Imposible pasar de 20 en el mejor de los casos. Un cuarto de hora para 4,5 kil¨®metros. Una mujer rubia aprovecha para maquillarse.
En su viaje de norte a sur, el coche rojo sufre una suerte similar al verde: 68 minutos para un recorrido en el sentido contrario a las agujas del reloj. S¨®lo arrancar y llega el primer par¨®n. Un cuarto de hora de embrague, primera y punto muerto en los cinco kil¨®metros que separan el puente de Ventas del nudo de Costa Rica. Un cuarto de hora en un trayecto enlatado, como las sardinas. Tambi¨¦n su radio reproduce el aviso municipal: "Retenciones en el recorrido". El coche rojo se queda parado por segunda vez a la salida del t¨²nel del Nudo Sur. Y es un embudo peor a¨²n que el primero. ?Media hora para 3,5 kil¨®metros! Un conductor saca partido a la contrariedad y se dedica a hojear el peri¨®dico. Pero conviene estar muy atento porque el tramo incluye algunas peripecias a?adidas, como recorrer lateralmente en 600 metros los seis carriles que separan la salida del t¨²nel del desv¨ªo a la calle de Alcal¨¢.
Resultado: m¨¢s de una hora dentro del coche en ambos casos. Hace 16 a?os, el coche que viajaba en el sentido de las agujas del reloj emple¨® 40 minutos tras detenerse en el nudo de Manoteras. El que viajaba en sentido contrario tard¨® 68 minutos y se ator¨® tanto en el Nudo Sur como en Manoteras.
Los dos viajes siguientes, a las dos y las ocho de la tarde, producen resultados casi id¨¦nticos en ambos sentidos y ambas fechas. Todos rozan la media hora. El mi¨¦rcoles, el coche verde se tuvo que parar las dos veces al volver a la calle de Alcal¨¢. El rojo, s¨®lo a las ocho, en Moncloa. El coche que hizo el mismo recorrido en 1992 se detuvo en el tramo del estadio Vicente Calder¨®n, entonces en superficie.
Ahora, junto al campo del Atl¨¦tico hay t¨²neles abiertos desde mayo de 2007. En los tramos soterrados, la velocidad no puede pasar de 70. Y 16 c¨¢maras vigilan desde esta semana que se cumplan las normas. El mi¨¦rcoles, los conductores reducen la velocidad al entrar en los subterr¨¢neos. Superar los 79 kil¨®metros cuesta de 92 a 450 euros.
El catedr¨¢tico Andr¨¦s Monz¨®n opina que "el comportamiento del conductor es m¨¢s cuidadoso, ya que teme m¨¢s un accidente en el t¨²nel que fuera". Los datos avalan su tesis. En 2006, hubo 1.627 accidentes en la M-30, 232 m¨¢s (un 14%) que en 2007, cuando la mayor¨ªa de los tramos soterrados ya estaban funcionando. Murieron cinco personas, dos m¨¢s que al a?o siguiente.
"La seguridad ha mejorado mucho. Si te paras en un t¨²nel, las c¨¢maras se activan e informan inmediatamente", se?ala Antonio Lucas, responsable de seguridad vial del Real Autom¨®vil Club de Espa?a (RACE). Los t¨²neles incluyen sistemas de control, m¨¢s vigilancia y mecanismos de emergencia que son impensables en superficie. Bajo tierra, s¨®lo algunas motos de poca cilindrada se permitieron acelerar m¨¢s de la cuenta. ?Saldr¨¢n en la foto?
Tres lustros y 3.508 millones de euros m¨¢s tarde el tr¨¢nsito de primera hora de la ma?ana sigue siendo una pesadilla. En la salida a Ventas, los coches esperan en fila india el juego de luces. Verde. Rojo. Verde. Rojo. El sem¨¢foro cambia hasta cinco veces. Dos cr¨ªos rumanos aprovechan para sacar alg¨²n euro a los que esperan. Van armados con una botella rellena de limpiacristales y una pala. Prueban con varios conductores dibuj¨¢ndoles corazones en el cristal. "Son cinco euros", bromean despu¨¦s de limpiar el parabrisas del coche rojo. El sem¨¢foro se pone en verde. Ellos se recuestan de nuevo a un lado del puente. No tienen prisa. La cola es infernal.
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