Ac¨¢tese pero no se cumpla

Aunque conocida, hay que empezar por la historia reciente por aquello de que quienes la olvidan est¨¢n condenados a repetirla. En las auton¨®micas de 2007, el PP duplic¨® en el Pa¨ªs Valenciano su diferencia de 2003 con el PSPV: 18 puntos frente a 9, un 52% m¨¢s de votos frente al 26% precedente. En cualquier democracia consolidada el resultado convert¨ªa al candidato perdedor, el mismo en ambas convocatorias, en un cad¨¢ver pol¨ªtico. Por contra, la direcci¨®n del PSPV, incluido el propio derrotado, se empecin¨® en que todo siguiera igual, posponiendo sine d¨ªe el an¨¢lisis de lo ocurrido.

Mientras tanto, diputados y concejales electos, muchos de ellos (en modo alguno todos) mu?idores de la desastrosa situaci¨®n en la que nos encontramos los socialistas valencianos, iniciaron la cuarta versi¨®n PSPV de Night of the Living Dead que proseguir¨¢ sin remedio hasta 2011. Por su parte, el PP ya se frotaba las manos ante su ¨¦xito en difundir que todo lo malo, incluidas las competencias estrictas de la Generalitat, es responsabilidad de Rodr¨ªguez Zapatero. No era poco, pero no ha sido todo. Para las elecciones generales, se buscaron cabezas de lista de relumbr¨®n, y se confi¨® en el milagro. ?El resultado? A pesar del enorme esfuerzo de Fern¨¢ndez de la Vega y de Jordi Sevilla, el PP ha m¨¢s que duplicado la diferencia porcentual con el PSPV respecto a 2004 (desde el 4,3% al 10,3%) y la brecha de los 100.000 votos casi se ha triplicado.

En el PSPV se ha generado una espiral de barreras para cerrar el partido a la sociedad

Pues bien, la apertura del rosario de aspirantes a secretario general del PSPV previo a cada congreso ha tenido lugar como si todo lo anterior hubiera sucedido en otra galaxia, a a?os luz de esta sociedad. A fecha de hoy, ninguno de los aspirantes ha considerado oportuno comentar ni las causas de lo ocurrido ni menos sus soluciones. Todav¨ªa m¨¢s. Junto a actos y declaraciones en desesperada busca del titular de prensa, se ha publicado por alg¨²n promocionado desde Ferraz un lastimoso remedo de aquel "no estamos tan mal" de Rodr¨ªguez Zapatero. Pues al menos que quede negro sobre blanco que algunos pensamos que como organizaci¨®n estamos todav¨ªa peor. La causa: la actuaci¨®n de quienes vienen controlando en beneficio propio un partido que estaba repleto, y todav¨ªa est¨¢ lleno, de gente honesta y voluntariosa; un partido que debiera ser una alternativa real a la Generalitat conservadora y clerical del PP.

Para nuestra desgracia, el silencio de los aspirantes no es casual. Desde hace ya a?os a los sucesivos n¨²cleos de control del PSPV las ideas sobre las que articular la propuesta a presentar a los ciudadanos para otro Pa¨ªs Valenciano que es posible les importan menos que nada. Es la consecuencia de que el necesario y complejo equilibrio existente en todo partido pol¨ªtico entre aparato e individualidades de proyecci¨®n social se rompi¨® en el PSPV hace mucho en favor de los primeros -por no hablar de la nula renovaci¨®n generacional-. Lo cual aceler¨® la reducci¨®n del respaldo ciudadano por la ausencia de proyecto para una realidad en r¨¢pida transformaci¨®n y el deterioro de la credibilidad ante la invisibilidad como alternativa. La consecuencia ha sido la paulatina disminuci¨®n de cargos disponibles. Con lo cual, quienes se ganan la vida de la pol¨ªtica (y no est¨¢n dispuestos a buscar otra forma de sustento) han generado una espiral diab¨®lica de barreras de entrada para cerrar el partido a la sociedad, tanto m¨¢s elevadas cuando menos son los puestos a repartir. M¨¢s participantes en el proyecto son m¨¢s competencia y, por tanto, mayores riesgos para seguir disfrutando del cargo. Hoy esas barreras son insalvables para todos los no dedicados profesionalmente a la pol¨ªtica. Esto es: para todos menos ellos y la familia. Pero al controlar la elecci¨®n del secretario general ?c¨®mo va a osar un candidato a se?alarlos como responsables de la situaci¨®n ni menos a anunciar el fin a sus prebendas?

Lo relatado ayuda a explicar, entre otras cosas, las dificultades para aumentar el respaldo electoral mediante una mayor vinculaci¨®n con la sociedad. En la cual no faltan problemas pero ha doblado su renta media por habitante (en t¨¦rminos nominales) en la ¨²ltima d¨¦cada, y la ha aumentado en un 50% en t¨¦rminos reales, lo que no ha beneficiado solo a una minor¨ªa. O que ha mejorado su cualificaci¨®n educativa de forma que hoy tres cuartas partes de ella cuenta al menos con estudios secundarios. Porque ante cualquier atisbo o intento de reformar la situaci¨®n interna del PSPV, desde aqu¨ª o desde Madrid, quienes lo controlan aplican el ac¨¢tese pero no se cumpla. F¨®rmula que, como es conocido, declara la disposici¨®n a cumplir todo lo que se acuerde, pero siempre que no vaya en contra de privilegios, fueros o intereses creados. ?Y qu¨¦ m¨¢s importante para quienes se han apropiado de la organizaci¨®n que mantener su n¨®mina? Esa es la cuadratura del c¨ªrculo que debiera resolver el pr¨®ximo congreso. Pero para nuestra desgracia, nadie ha conseguido que la superficie plana contenida dentro de una circunferencia tenga cuatro lados iguales formando ¨¢ngulos rectos.

Jordi Palafox es catedr¨¢tico de Historia e Instituciones Econ¨®micas en la Universitat de Val¨¨ncia y militante del PSPV.