"No puedo ni ir al ba?o solo"
Lorenzo arranca cuarto en el GP de China, tras ser infiltrado con calmantes en sus tobillos

Rebajado por el costalazo que se peg¨® el viernes y que le machac¨® los dos tobillos, a Jorge Lorenzo no le queda otra que apretar los dientes para tratar de capear la tormenta que se le ha venido encima este fin de semana. El piloto mallorqu¨ªn llega a la cuarta prueba del Mundial (9.00, TVE-1) como l¨ªder tras haber irrumpido en MotoGP como un torpedo. Sin embargo, esta carrera ser¨¢ distinta. Lorenzo no disfrutar¨¢ como en las otras. M¨¢s bien todo lo contrario. Sufrir¨¢, y mucho.
La sesi¨®n de clasificaci¨®n de ayer le exig¨ªa un acto de valent¨ªa, casi heroico, y ¨¦l respondi¨® a lo grande. Se clasific¨® cuarto en la sesi¨®n definitiva, una posici¨®n extraordinaria si se atiende a que apenas pod¨ªa mantenerse en pie y ten¨ªa que trasladarse en una silla de ruedas. Sin embargo, y por m¨¢s medicamentos que le inyecten para aliviarle el dolor, no parece probable que pueda soportar el ritmo de giro que imprimir¨¢n los m¨¢s r¨¢pidos: Valentino Rossi, Dani Pedrosa y Casey Stoner. Ayer, no pudo. Mientras el italiano (arranca segundo), parece haberles encontrado el pulso a los nuevos neum¨¢ticos Bridgestone que calza su Yamaha, Pedrosa (quinto) deber¨ªa estar en condiciones de atarle en corto, al igual que Stoner (tercero), encendido como marcha el campe¨®n del mundo australiano por el aluvi¨®n de cr¨ªticas que le han ca¨ªdo encima tras los fiascos de Jerez (und¨¦cimo) y Estoril (sexto). A menos que caiga un chaparr¨®n (los partes vaticinan alrededor de un 70% de posibilidades de que llueva) y lo distorsione todo, el asunto es cosa de tres, muy a pesar de Lorenzo, y la rabia que carcome a este irreverente motorista, bicampe¨®n del mundo de dos y medio, que hoy cumple 21 a?os.
"Me duele todo y apenas puedo mover el cuello. Los tobillos me molestan mucho"
As¨ª est¨¢ la clasificaci¨®n de MotoGP |
En las tres carreras del curso que se llevan disputadas hasta ahora, cada vez que una c¨¢mara de televisi¨®n le buscaba, su gesto transmit¨ªa alegr¨ªa, felicidad y tranquilidad a partes iguales. Pero la ca¨ªda tan brutal que sufri¨® hace dos d¨ªas lo cambi¨® todo. Subido a una m¨¢quina que no perdona el m¨¢s m¨ªnimo descuido, Lorenzo ya sabe c¨®mo las gastan estos aparatos de MotoGP. Lo ha aprendido por v¨ªa directa, y puede dar gracias porque la cosa podr¨ªa haber sido mucho peor. Ayudado en todo momento por los miembros de su equipo, que le tuvieron en brazos cada vez que se subi¨® y se baj¨® de la moto, el espa?ol salv¨® los muebles de forma magistral. Otro, en unas condiciones f¨ªsicas tan lamentables como esas, habr¨ªa pensado que volver a salir a rodar era una chifladura. Sin embargo, la mayor¨ªa de muecas que se le vieron durante la sesi¨®n cronometrada fueron de rabia, de impotencia, de querer ir m¨¢s r¨¢pido y no conseguirlo. Y si no arranca desde la primera l¨ªnea de la parrilla no es porque no pusiera empe?o en conseguirlo. Tanto, que casi vuelve a rodar por el suelo, una circunstancia que, seguramente, le habr¨ªa acabado de condenar.
"Si soy sincero, cuando me ca¨ª el viernes no pens¨¦ que podr¨ªa conseguir lo que he hecho hoy. Se me apareci¨® la virgen", reconoci¨® Lorenzo, que atendi¨® a los periodistas sentado en una silla de ruedas y con unos pantalones cortados que dejaban al descubierto sus lesiones. "Me duele todo el cuerpo y apenas puedo mover el cuello. Cuando estoy encima de la moto, los tobillos me molestan mucho. El izquierdo (sufre una peque?a fractura en el mal¨¦olo) porque es con el que reduzco marchas, y el derecho (contusiones en el astr¨¢galo y el calc¨¢neo) en los cambios de direcci¨®n", explic¨® el motorista, que tuvo que ser infiltrado con calmantes antes de cada sesi¨®n de entrenamientos. "No puedo ni ir al ba?o solo. Sin embargo, podr¨ªamos estar en casa con dos escayolas y aqu¨ª estamos", reflexion¨® el corredor, que se someti¨® a sesiones de fr¨ªo y de ultrasonidos para rebajar la hinchaz¨®n en los tobillos. Sin embargo, lo m¨¢s ¨¢spero a¨²n est¨¢ por llegar. Ser¨¢ en la carrera donde sus compa?eros de refriegas querr¨¢n aprovecharse al m¨¢ximo de su precariedad. El primero ser¨¢ Pedrosa, su enemigo ¨ªntimo y con el que, para rematar, est¨¢ empatado al frente de la tabla. "He tenido algunos problemas con los neum¨¢ticos de clasificaci¨®n que me han perjudicado bastante", lament¨® el catal¨¢n, que vuelve a correr en el circuito que le vio ganar su primera carrera como piloto de las motos pesadas. "Siempre que no llueva, los tres que estamos m¨¢s fuertes somos Rossi, Stoner y yo", zanj¨® Pedrosa.

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