Nada nuevo, el Roc¨ªo
Es incre¨ªble todo lo que el Roc¨ªo puede llegar a tapar: parece que no existe otra cosa digna de ser contada, pero basta para llenarlo todo, y eso que del Roc¨ªo se cuenta menos de la mitad de lo que pasa. De lo dem¨¢s ni se habla. En una comunidad como la andaluza, a la que llegan al a?o miles de inmigrantes, tendr¨ªa que importar m¨¢s la discusi¨®n abierta ahora en la Uni¨®n Europea a prop¨®sito de la nueva Directiva de Retorno. Pero la informaci¨®n sobre este tema, sin embargo, debe ir, como la del colapso de las oficinas judiciales, por detr¨¢s de lo referente al Roc¨ªo y la dosis de sucesos propia del d¨ªa. A veces -hay que reconocerlo- los informadores no tienen d¨®nde agarrarse: viene a Granada la responsable principal de Justicia de una comunidad con competencias transferidas, se ve con el presidente del TSJA y de ese encuentro lo ¨²nico que se saca en claro son unas im¨¢genes en las que los dos est¨¢n mirando al techo (magn¨ªficos artesonados, imagino) y un corte de aire mitinero en el que la consejera Evangelina Naranjo dice que la Junta no va a esperar a que otros act¨²en: como si el verbo esperar, hablando de la Administraci¨®n de Justicia en este pa¨ªs, pudiera conjugarse impunemente.
Nada de esto es nuevo. La ¨²nica novedad que tiene algo que ver con La Nuestra es la pelea esa tan rara del Consejo Audiovisual, que de pronto parece aplacada pero que seguramente volver¨¢ a estallar, porque debajo hay carga suficiente. Pero cabe aprovechar la calma que de momento hay, para subrayar una perla que en el fragor de la batalla pudo pasar desapercibida. Me refiero a esa informaci¨®n seg¨²n la cual el director de la RTVA, Rafael Camacho, hab¨ªa dicho que llevaba tiempo mordi¨¦ndose la lengua para no hablar del Consejo Audiovisual. Me consta que la frase no le ha gustado a ninguno de los consejeros. Y me pregunto: ?No deber¨ªan por tanto todos -insisto: todos- los miembros del Consejo meditar seriamente sobre el asunto?
La noticia luctuosa ha sido la muerte de Jos¨¦ Mar¨ªa Bern¨¢ldez. Imagino que los que han podido trabajar con ¨¦l lo echar¨¢n mucho de menos. Yo me atrevo a hacer una sugerencia a los jefes de la casa; como homenaje al que fue editor de Al Sur durante tant¨ªsimos a?os, ?por qu¨¦ no cambian el horario del programa? Ahora se emite los lunes a las 00.40 y se repite los jueves a las 6.30. Aunque s¨®lo sea durante un mes, pod¨ªan dejar a un lado su probada idea penitencial de la cultura como sacrificio.
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