Europa y Kosovo dividen de nuevo a los votantes de Serbia
Las encuestas auguran un empate en las elecciones generales del domingo
Serbia vive instalada en el d¨ªa de la marmota, cada jornada es una fotocopia de la anterior: las mismas elecciones hist¨®ricas, los mismos referendos decisivos entre Occidente y Oriente, las mismas discusiones sobre Kosovo, los mismos pol¨ªticos y las mismas excusas. Seis millones seiscientos mil serbios est¨¢n llamados el domingo a las urnas en unos comicios generales y municipales que, como era de esperar, son hist¨®ricos y decisivos.
Las ¨²ltimas encuestas muestran un empate t¨¦cnico entre los ultranacionalistas del Partido Radical (34-35%) y el proeuropeo Partido Democr¨¢tico del presidente Bor¨ªs Tadic (32%), que ha recortado varias d¨¦cimas -y parece que es la tendencia, seg¨²n Srdan Bogosavijevic, director de la empresa demosc¨®pica Strategic Marketing- desde la firma del Acuerdo de Asociaci¨®n y Estabilizaci¨®n (AEA) con la UE a finales de abril. En Bruselas est¨¢n convencidos de que ese pacto (con letra peque?a; est¨¢ condicionado a la entrega del general Ratko Mladic a La Haya) y la supresi¨®n de los visados (quiz¨¢ en 2009) pueden garantizar la victoria de Tadic.
Kosovo, el eje del debate en los ¨²ltimos meses y que a¨²n es un asunto extremadamente emocional para la mayor¨ªa de los serbios, ha ca¨ªdo al sexto puesto en la lista de preocupaciones de la gente. Las principales son el alza del coste de la vida (la cesta de la compra subi¨® en los ¨²ltimos seis meses un 30%), el desempleo y la corrupci¨®n. S¨®lo los radicales parecen hablar de problemas reales. Tadic sigue envuelto en la bandera de Europa, pero sin ofrecer un programa concreto, y el a¨²n primer ministro, Vojislav Kostunica, se ha aferrado a Kosovo, su ¨²nico discurso.
El Gobierno en funciones compuesto por ministros de Kostunica y de Tadic (quien tiene la mayor¨ªa) aprob¨® ayer dos importantes acuerdos. El del gas con Mosc¨² por unanimidad, que permite el paso por Serbia del oleoducto ruso del sur e incluye la venta del 51% de la petrolera serbia a Gazprom. Y el AEA con la UE por mayor¨ªa, s¨®lo con los ministros proeuropeos, ya que Kostunica y los suyos abandonaron el consejo antes de la votaci¨®n. Fue la ¨²ltima escenificaci¨®n de las dos Serbias.
Los analistas cruzan quinielas sobre la formaci¨®n del futuro Gobierno. Los pesimistas como Bogosavijevic sostienen que se agotar¨¢ el plazo (60 d¨ªas para la constituci¨®n del Parlamento y 90 desde ese momento para la formaci¨®n del Gobierno) y se repetir¨¢n las elecciones en octubre. Ser¨ªa una pesadilla: en un pa¨ªs que no funciona no tener a nadie que tome decisiones. El sue?o del verdadero jefe de los radicales, Vojislav Seselj, quien espera que el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia le deje libre en 2009 por falta de pruebas (y de testigos). Su retorno en loor de multitudes supondr¨ªa un desastre para la Serbia democr¨¢tica y un peligro para Kosovo y su seguridad. Regresar¨ªa el fantasma de los a?os noventa.
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