Robert Mondavi, el padre del vino californiano

Robert Mondavi llev¨® el gusto por el vino de calidad al paladar de los estadounidenses. El pasado viernes 16 de mayo, el legendario bodeguero, hijo de inmigrantes italianos, muri¨® a los 94 a?os de edad, en su residencia de Yountville en Napa Valley, al norte de San Francisco. El empresario fund¨® Mondavi Winery hace m¨¢s de cuatro d¨¦cadas.

Para ¨¦l, los vinos deb¨ªan formar parte de la vida de la gente

Mondavi naci¨® en Virginia, Minnesota, y se cri¨® en Lodi, California. Se gradu¨® en econom¨ªa y negocios en Stanford. Y enseguida se puso manos a la obra. Nada m¨¢s terminar sus estudios, logr¨® convencer a su padre, Cesare, de que deb¨ªa meterse en el negocio de producci¨®n de vino, y popularizar su consumo en Estados Unidos como ocurre en Europa. As¨ª comenz¨® todo en Santa Helena, con nuevas t¨¦cnicas.

Los Mondavi consegu¨ªan adem¨¢s revivir una tradici¨®n que se hab¨ªa perdido en Napa Valley, una de las regiones m¨¢s afectadas por la Ley Seca. Y en el mundo del vino fue creciendo poco a poco su reputaci¨®n de educador y defensor de los caldos de calidad. Populariz¨® t¨¦cnicas en la producci¨®n de vinos como la fermentaci¨®n fr¨ªa y utiliz¨® barriles de roble franc¨¦s, y convenci¨® a otras bodegas a seguir sus pasos.

La marca Mondavi fue vendida hace cuatro a?os al gigante Constellation Brands. Pero el empresario nunca se apart¨® de las operaciones de la bodega. Su influencia, dice Rob Sands, consejero delegado de Constellation, estar¨¢ presente durante muchas generaciones. Mientras, recuerda el rompedor acuerdo que alcanz¨® en 1979 con el reconocido bodeguero franc¨¦s Baron Philippe de Rothschild para establecer Opes One en Oakville (California).

El objetivo ¨²ltimo era conseguir que los vinos formaran parte de la vida de los estadounidenses, de sus comidas, y demostrar que su producci¨®n tambi¨¦n puede ser un arte que se puede gozar. Y as¨ª fund¨® Copia en 2001 en la ciudad de Napa.

"Hemos perdido a uno de los m¨¢s destacados l¨ªderes en el mundo del vino", se?ala Linda Reiff, responsable de la asociaci¨®n de bodegueros de Napa Valley, que, adem¨¢s, comparti¨® su t¨¦cnica.

Tres d¨¦cadas despu¨¦s, la calidad de los vinos californianos se acerca al nivel de los europeos, y se consumen en todo el mundo, en competencia con Francia, Italia, Alemania o Espa?a. Por eso Sands considera a Mondavi "el padre del vino contempor¨¢neo" en California. Otros le llaman el padrino, el patriarca y el embajador de los vinos californianos.

Le encantaba admirar su color al trasluz y degustar su esencia. Mondavi consideraba el vino como una bendici¨®n, un regalo de la naturaleza. Los que le conocieron destacan su humildad, lealtad y generosidad. No le gustaba que en los actos sociales en Napa Valley le presentaran como "se?or". "Ll¨¢mame Bob o Robert", dec¨ªa en las presentaciones. Era un maestro de las relaciones p¨²blicas. Y era una figura tan respetada y carism¨¢tica, que sus empleados y conocidos siempre se dirig¨ªan a ¨¦l como "M¨ªster Mondavi".

"El vino es mi pasi¨®n. Es la esencia de la civilizaci¨®n. El arte de la vida", escribi¨®. El legendario empresario ten¨ªa una salud muy fr¨¢gil y desde hace a?os iba en silla de ruedas. Sus familiares explicaron que "muri¨® en paz". En un mes iba a celebrar su 95 cumplea?os. Robert Mondavi deja a su segunda mujer, Margrit Biever, y a sus tres hijos, adem¨¢s de nueve nietos. Dicen que siempre estaba dispuesto hacer lo que fuera para ayudar a su familia, sus vecinos, amigos y a la comunidad en general.