El amianto que no existi¨® en Michelin
La multinacional francesa asegura que "no utiliza ni ha utilizado" ese producto en Vitoria, pese a quedar acreditado en una sentencia del Superior
?Ha existido el amianto o no? La contradicci¨®n entre lo que afirma la planta de la multinacional francesa Michelin en Vitoria y el relato de hechos de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia del Pa¨ªs Vasco es evidente. El asunto podr¨ªa no tener demasiada trascendencia, salvo por el hecho de que hay un trabajador del fabricante de neum¨¢ticos al que el 11 de septiembre de 2007 diagnosticaron un mesotelioma, un c¨¢ncer de pulm¨®n asociado al contacto con el producto cancer¨ªgeno.
La empresa neg¨® a Osalan que haya tenido contacto con amianto
Cuando este trabajador reclam¨® el reconocimiento de la enfermedad profesional, Osalan mand¨® a sus t¨¦cnicos para elaborar un informe y la direcci¨®n de la f¨¢brica neg¨® que hubiera existido amianto en sus instalaciones. De hecho, el informe que Osalan remite a la Inspecci¨®n de Trabajo de ?lava el 8 de abril de 2008, y que ¨¦sta da curso el pasado 24 de abril, describe que los t¨¦cnicos y directivos de la empresa han asegurado que no ha habido exposici¨®n del trabajador al amianto porque ese producto no ha existido en la empresa. Esto lleva a la Inspecci¨®n de Trabajo a concluir as¨ª el expediente: "No existe ning¨²n indicio a la luz de los datos expuestos que permita deducir un posible origen profesional de la enfermedad que sufre F. J. M.".
Caso cerrado. O, al menos, eso parece oficialmente. Sin embargo, alguien miente en este asunto. Un pronunciamiento de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia del Pa¨ªs Vasco no deja lugar a dudas. En una sentencia dictada en noviembre de 2006, recoge un episodio ocurrido en 1997 que confirma la existencia en aquella fecha de amianto en Michelin y en el proceso de producci¨®n ordinario de neum¨¢ticos.
Esta resoluci¨®n es la ¨²ltima de un largo proceso judicial que inici¨® un trabajador en 1997 al caerse de una m¨¢quina. Ese empleado pertenec¨ªa a la empresa Montajes Eissen S.A., (ME) que hab¨ªa sido contratada por Michelin en Vitoria para hacer una serie de trabajos en la factor¨ªa. Pues bien, en los antecedentes de hecho del caso, el alto tribunal vasco describe que el accidente de ese trabajador se produjo del modo siguiente: "En agosto de 1997 la l¨ªnea de prensa LJ no se encuentra en periodo productivo, por lo que la empresa contrata a ME para que desmonte las prensas instaladas en dicha l¨ªnea para la sustituci¨®n del aislamiento de amianto por acolchados de fibra de vidrio".
Poco despu¨¦s, el fallo judicial describe que "la l¨ªnea LJ es una prensa en forma de esfera de 1,5 metros de di¨¢metro dividida en dos semiesferas. Durante el proceso de producci¨®n ordinario el casquete superior de la esfera se cierra sobre el inferior efectuando el prensado sobre el neum¨¢tico conformado en su interior".
Esa sentencia tiene una peculiaridad. El tribunal falla contra Michelin y contra la empresa de montajes, en un recurso de s¨²plica en el que entre otras cosas ped¨ªan la anulaci¨®n, precisamente, de esos antecedentes en los que se demuestra que Michelin ten¨ªa amianto en su proceso productivo.
Fuentes sindicales indicaron que esta nueva evidencia deber¨ªa obligar a Osalan a rehacer su informe y a concluir que en Michelin s¨ª hab¨ªa amianto.
Michelin reiter¨® ayer, a trav¨¦s de un portavoz oficial, que "no se utiliza la fibra de amianto ni se ha utilizado, en el proceso productivo".
Un tribunal de Clermont-Ferrand, localidad que acoge la sede principal de Michelin, dio recientemente la raz¨®n a un ex trabajador de la empresa y a las viudas de otros tres empleados que fallecieron como consecuencia de un c¨¢ncer de pulm¨®n, tras sufrir exposici¨®n al amianto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.