A un palmo del espejo
Cuando se cumplen 60 a?os, o se va camino, hay muchos yoes o muchos t¨²s arrojados a cada lado de la cuneta, a quienes hacerles un libro. A cierta edad, es cierto, tiene uno el rostro que se merece, pero tambi¨¦n, a cierta edad, est¨¢ forzado a explicarse a uno mismo o a los dem¨¢s. De esto va Muchas veces...; de esto escribe JCR. Yo le creo. Si stendhalianamente una novela es un espejo puesto en mitad del camino, JCR escribe sus relatos con el espejo puesto delante, a un palmo de su vista. Ha escrito ¨¦ste para ese t¨², que tiene tambi¨¦n cerca, para explicarle sombras de vida, recuerdos desconchados, olvidos quebradizos: ese yo y ese t¨² sabr¨¢n. Pero tambi¨¦n escribe para ?justificarse? ante ese otro yo que aparece en el espejo. Y asume el riesgo, lo viene asumiendo desde hace muchos libros de ficci¨®n, quiz¨¢ desde el primero, el inicio de todos, Cr¨®nica de la nada hecha pedazos, hace ya m¨¢s de 35 a?os. En aquel t¨ªtulo estaba todo. El lector se permite analizar al autor de estas p¨¢ginas, que tanto le interesan, y considerar que lo que le ocurre al autor de las mismas es que no puede parar, que teme encontrarse cara a cara con el espejo que tiene delante. Pero el lector se ha acercado demasiado, son p¨¢ginas que hay que leer de cerca y, por eso, ha sido, ¨¦l mismo, absorbido, y se emociona con el retrato apaisado y color sepia de don Domingo -Domingo P¨¦rez Minik, ese gentleman insular, tan querido y tan olvidado- o ?ngel Gonz¨¢lez o Cabrera Infante. Tenerife, Madrid, Londres, por ejemplo: trayectos vitales de JCR, tan obsesivamente presentes en este libro escrito sin pudor y con (extraordinario) valor. Yo le creo. -
Muchas veces me pediste que te contara esos a?os
Juan Cruz Ruiz
Alfaguara. Madrid, 2008
236 p¨¢ginas. 17,50 euros
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.