Barrientos pact¨® con ex ediles del GIL y rechaz¨® el plan territorial de Chaves

Hasta ayer, la ¨²nica imputaci¨®n judicial que se le conoc¨ªa al alcalde de Estepona era una presunta calumnia contra un ex concejal del PP por decir que hab¨ªa metido la mano en la caja.Lo que s¨ª resultaba evidente hasta ahora era una estrecha asociaci¨®n entre el apellido Barrientos y el adjetivo controversia.

El GIL, que gobern¨® entre 1995 y 1999, dej¨® una duradera inestabilidad pol¨ªtica

La Junta disuadi¨® a Barrientos de recalificar el parque de aventuras Selwo

Esta ciudad vecina a Marbella ha tenido un desarrollo m¨¢s tard¨ªo que el resto de la Costa del Sol, y por ello lleg¨® al ¨²ltimo boom inmobiliario con mucho suelo disponible, lo que result¨® atractivo, por ejemplo, para que el Grupo Independiente Liberal (GIL) iniciara en Estepona su expansi¨®n. En 1995, Jes¨²s Gil Mar¨ªn, hijo del fundador del peculiar partido, logr¨® la alcald¨ªa por mayor¨ªa absoluta. S¨®lo gobern¨® cuatro a?os, suficientes para dejar de herencia, entre otros desastres, 24 millones de euros gastados sin justificar, seg¨²n el Tribunal de Cuentas, y una duradera inestabilidad pol¨ªtica.

M¨¦dico alerg¨®logo de 47 a?os, Barrientos lleg¨® a la pol¨ªtica en 1999 reclamado por su amigo Antonio Caba, cabeza de cartel del PSOE. Ocup¨® el sexto puesto como independiente en la lista. Gil Mar¨ªn perdi¨® la mayor¨ªa absoluta, y PSOE, PP, PA e IU sellaron un pacto para echarle. Barrientos sustituy¨® a Caba cuando en abril de 2001 ¨¦ste dimiti¨® al ser acusado de blanqueo en un caso por el que al final fue absuelto. Barrientos apenas dur¨® seis meses en la alcald¨ªa. El PP rompi¨® el pacto y se ali¨® con parte de los ediles del GIL para montar una moci¨®n de censura.

Otra parte del GIL, liderada por Jos¨¦ Ignacio Crespo, primer teniente de alcalde de Gil Mar¨ªn y uno de los ediles investigados, fund¨® el Partido Estepona (PES). En 2003, Barrientos vio la oportunidad de recuperar la alcald¨ªa con el apoyo de esta formaci¨®n, pese a que el PP fue la lista m¨¢s votada, y Crespo volvi¨® a ser primer teniente de alcalde. El PSOE de Andaluc¨ªa acept¨® a rega?adientes el pacto y ha sufrido m¨¢s de un quebradero de cabeza.

En diciembre de 2005, la direcci¨®n del PSOE le oblig¨® a desconvocar un pleno, en el que se iban a aprobar varios convenios con los que el consistorio ingresar¨ªa 24 millones de euros dos d¨ªas antes de que entrara en vigor la ley auton¨®mica que impide a los ayuntamientos disponer del dinero de convenios hasta que no est¨¦ aprobado el planeamiento. La Junta tambi¨¦n le disuadi¨® de recalificar parte de los terrenos del parque de aventuras Selwo, y de un suelo de un empresario imputado en el caso Malaya.

Barrientos tiene impugnado en los tribunales el Plan de Ordenaci¨®n del Territorio de la Costa del Sol Occidental, dise?ado por la Junta de Andaluc¨ªa, porque quer¨ªa que el suelo que ocupan 600 n¨²cleos rurales diseminados pasasen a ser urbano.

Tampoco gust¨® nada a la direcci¨®n del PSOE, aunque fuera legal, que Prasa, cuyo presidente tambi¨¦n ha sido detenido, donara "voluntariamente" 2,55 millones en 2004 al Ayuntamiento, que ¨¦ste emple¨® en pagar las n¨®minas.

Barrientos, que cuando pact¨® con el PES afirm¨® que en el GIL "tambi¨¦n hab¨ªa gente honesta y enga?ada", acab¨® proclamando que jam¨¢s volver¨ªa a hacerlo, "por dignidad personal y pol¨ªtica". Para rehabilitar su imagen ha incorporado como concejal de Urbanismo a Rafael Duarte, que llev¨® estos asuntos en la gestora de Marbella. En un a?o se han multiplicado los expedientes por disciplina urban¨ªstica. Salvo la pol¨¦mica por ser el sexto alcalde mejor pagado de Espa?a, en esta legislatura, sin socios inc¨®modos, todo parec¨ªa tranquilo. Hasta ayer.