El entrenador
La influencia directa del entrenador en el partido es bastante relativa. No tiene los recursos del baloncesto para detener el juego y reordenar la t¨¢ctica, y carece de la agilidad rotatoria del balonmano, seguramente el deporte de equipo m¨¢s inteligente pese a que yo mismo lo practicara. El entrenador entrena y los jugadores juegan. Esto que suena a perogrullada explica bastante bien la puesta en escena del f¨²tbol. Y sin embargo, su figura cobra una importancia fundamental alrededor del partido. La seguridad, el riesgo, la motivaci¨®n, la solidaridad del grupo, todo depende de ¨¦l. El partido, no: reposa en los jugadores.
A m¨ª me gusta Luis. Aunque no a la prensa. No es fotog¨¦nico ni sentimental. Tampoco ordenado. Ni elegante. Si a Armani le dicen que es el ¨²ltimo hombre sobre la tierra pide la jubilaci¨®n y se hace barman. Cuando su popularidad estaba por los suelos, le arreglaron una comparecencia en Tengo una pregunta para usted. Le marcaron un gui¨®n tan moderado que se podr¨ªa haber titulado Tengo una sola respuesta para todos ustedes. Nos aburrimos como ostras y a Luis le debieron de dar 20 puntos de sutura en la lengua. Pero la hipocres¨ªa funciona mejor que la verdad malsonante. Una vez Luis le dijo a una azafata que lo agasaj¨® con un ramo de flores que no le cab¨ªa por el culo ni el pelo de una gamba. En otra situaci¨®n trat¨® de motivar a Reyes invit¨¢ndole a imponerse sobre Henry con vulgaridades criticadas por todos los bienpensantes del planeta. Pero el tiempo ha demostrado que ten¨ªa raz¨®n. Y que para motivar a Reyes hace falta el cuerpo de baile del Moulin Rouge al completo y a¨²n nos quedamos cortos. Luis dice cosas muy inteligentes, pero con la voz de Shrek tras una mala digesti¨®n, y adem¨¢s en ch¨¢ndal. Ser seleccionador es estar solo mientras un mont¨®n de gente, algunos con bombo, fingen acompa?arte. Luis ha tenido la mala suerte de entrenar a Espa?a cuando se han retirado Hierro y Guardiola, es decir, ha perdido una salida larga de la pelota desde atr¨¢s. En cambio, goza de la mejor generaci¨®n de medios ofensivos, gente que trata a un bal¨®n con cari?o en este pa¨ªs de maltratadores. Y por una vez con delanteros de gol y no de brega. Luis no hace rezar a sus jugadores la Salve ni les dice 'zurriagazo palante'. Seguramente tampoco les habla con el pluscuamperfecto de subjuntivo. En su ¨¦poca de t¨¦cnico, convirti¨® en mejores jugadores a eg¨®latras como Eto'o, Futre o Mijatovic. Se reconoce m¨¢s zapatones que sabio y pese a su perfil rocoso sabe adaptarse a lo dado. Tiene una selecci¨®n de toque y la pone a jugar a eso, aunque su gen atl¨¦tico (de Madrid) est¨¢ forjado en la cuchillada. Sabe que a la selecci¨®n le falta car¨¢cter y tradici¨®n ganadora. Pero a ver qui¨¦n se atreve a escribir en la prensa nacional que no somos Brasil ni Argentina ni Italia ni Alemania. Y que deber¨ªamos aprender a celebrar como se merece el llegar a cuartos.
Si a Armani le dicen que Luis es el ¨²ltimo hombre sobre la tierra pide la jubilaci¨®n y se hace barman
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.