AENA mantendr¨¢ la gesti¨®n central de la red de aeropuertos
Las comunidades participar¨¢n en un consorcio para cada infraestructura
El traje ser¨¢ a medida. El nuevo modelo de gesti¨®n de los aeropuertos que anunci¨® el lunes el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, dentro del paquete de medidas contra la crisis mantendr¨¢ una sociedad central, una AENA con un nuevo nombre -pero sin la parte de navegaci¨®n a¨¦rea- y con participaci¨®n de empresas privadas, pero dar¨¢ entrada a las autoridades auton¨®micas o incluso locales en la gesti¨®n de las infraestructuras de su territorio, seg¨²n fuentes pr¨®ximas al Gobierno.
La nueva sociedad estudia sacar a Bolsa una parte del capital
AENA es ahora un modelo singular en Europa y previsiblemente lo seguir¨¢ siendo. La empresa p¨²blica a¨²na tanto la red de aeropuertos de todo el Estado (excepto los privados en marcha) como la navegaci¨®n a¨¦rea (las torres y centros de control del tr¨¢fico). Es propiedad del Estado pero participa en la gesti¨®n privada de aeropuertos en todo el mundo (por ejemplo, con Abertis en el londinense de Luton).
La parte de navegaci¨®n a¨¦rea, que desde hace una semana tiene al frente a Carmen Librero -la segunda mujer que ocupa ese puesto despu¨¦s de una colega neozelandesa- seguir¨¢ en manos p¨²blicas.
La nueva sociedad que gestionar¨¢ los aeropuertos seguir¨¢ siendo controlada por el Estado (que en principio tratar¨¢ de conservar m¨¢s de un 51%), pero dar¨¢ entrada al capital privado.
No se descarta una salida a Bolsa, como hizo hace dos a?os A¨¨roports de Paris. Se barajan otras f¨®rmulas si bien la clave estar¨¢ en si se trata de una inversi¨®n meramente financiera o de un socio industrial que pese en la gesti¨®n. Abertis se muestra cauto a la espera de conocer en qu¨¦ condiciones se da entrada a los privados.
En esa sociedad no estar¨ªan las autoridades auton¨®micas, seg¨²n las fuentes consultadas. La participaci¨®n de las comunidades se canalizar¨¢ a trav¨¦s de ¨®rganos de gesti¨®n de cada aeropuerto, bien con la f¨®rmula del consorcio o un consejo de direcci¨®n. En el reparto de las competencias que tenga este ¨®rgano (nuevas obras, permisos de vuelo, superficies comerciales...) se dirimir¨¢ el juego de poderes en la toma de decisiones.
El nuevo modelo (al que se refiri¨® por primera vez Zapatero al inaugurar la T-4 en 2006) trata de sostener un sistema que es viable econ¨®micamente porque las ganancias de los grandes aeropuertos compensan las p¨¦rdidas que genera el resto, al tiempo que logra mantener las tasas relativamente baratas.
En todo caso el negocio de los aeropuertos es de los pocos en el sector del transporte a¨¦reo que da buenos m¨¢rgenes de explotaci¨®n (AENA s¨®lo tiene un 4,8% frente al 29,8% de BAA en 2006).
Por eso para las aerol¨ªneas la privatizaci¨®n total de aeropuertos es casi un anatema. Un monopolio natural en un sector tan competitivo necesita de un regulador totalmente independiente que sujete las ansias recaudatorias de los propietarios, argumentan en general las compa?¨ªas. "El inversor quiere un alto retorno" del capital y el resultado es un "aumento brutal de las tasas", explicaba hace 15 d¨ªas el presidente de Iberia, Fernando Conte, en la Asamblea de la Asociaci¨®n Mundial de Aerol¨ªneas (IATA) en Estambul. Adem¨¢s, en algunos casos son "un emblema nacional" dijo en referencia a la T-4 de Madrid. "Es preferible que est¨¦n en manos de alguien que obtenga algo m¨¢s que dinero del aeropuerto, por ejemplo, crecimiento econ¨®mico", sentenci¨® Conte.
En Europa se han privatizado total o parcialmente varios aeropuertos, pero entre los 10 mayores predomina la gesti¨®n mixta, con mayor¨ªa de las administraciones p¨²blicas. La privatizaci¨®n parcial de A¨¨roports de Paris fue, a juicio del presidente de Air France, Jean-Cyril Spinetta, un desastre. "Un aeropuerto no es m¨¢s que una herramienta muy sofisticada. Privatizar una herramienta es una cosa extra?a", dijo tambi¨¦n ante sus colegas en Estambul.
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