La normativa catalana es m¨¢s dura y Galicia no tiene regulaci¨®n

En Catalu?a, la normativa ling¨¹¨ªstica es m¨¢s exigente que la anunciada ayer por el Gobierno vasco, ya que obliga a atender en catal¨¢n a todos los comercios, sin fijar ning¨²n l¨ªmite seg¨²n su tama?o. "Las empresas y establecimientos deben estar en condiciones de poder atender a los consumidores cuando se expresen en cualquiera de las lenguas oficiales en Catalu?a", dice textualmente el art¨ªculo 32 de la Ley de Pol¨ªtica Ling¨¹¨ªstica de 1998.

Adem¨¢s, la normativa obliga a rotular, al menos en catal¨¢n, la se?alizaci¨®n y los carteles de informaci¨®n de los establecimientos. No se multa a ninguna empresa por rotular en castellano, sino por no hacerlo en catal¨¢n. No hay conflicto con las rotulaciones biling¨¹es pero, si la informaci¨®n (que no la marca comercial) aparece en un s¨®lo idioma, debe ser el catal¨¢n.

No obstante, los efectos de las leyes var¨ªan en funci¨®n de qui¨¦n las aplica. Cuando el ¨¢rea de Consumo, la competente en este asunto, depend¨ªa de ERC, la inspecci¨®n se dispar¨® y en 2005 hubo 119 sanciones por valor de 122.000 euros. Cuando pas¨® a departamentos del PSC (Trabajo o Econom¨ªa) se opt¨® m¨¢s por convencer que por sancionar, y en 2006 las multas se redujeron a 65, con un importe total de 48.000 euros. La aplicaci¨®n de la ley fue gradual y las multas leves, que son las que se aplican, seg¨²n Consumo, pueden sumar un tope de 3.000 euros.

En cambio, en Galicia no hay ning¨²n tipo de regulaci¨®n sobre el uso del gallego en el comercio, que se utiliza habitualmente por clientes y due?os. El pasado mayo el Parlamento aprob¨® una propuesta para que se incentive la rotulaci¨®n en gallego en los establecimientos comerciales.