"Gonz¨¢lez es muy peligroso"

-"?Sabe usted lo que quiere decir Gonzo?".

-"No. Los estadounidenses me llaman Gonzo. ?Qu¨¦ significa?", contest¨® el chileno Fernando Gonz¨¢lez, rival hoy de Rafael Nadal en la final de los Juegos (TVE-1, 10.00).

-"Que es usted un loco impredecible, un salvaje sobre la pista".

- "?Pens¨¦ que era por Gonz¨¢lez! No pasa nada. Es la verdad".

Gonz¨¢lez, el primer chileno que gana medallas en dos Juegos -el bronce individual y el oro de dobles con Nicol¨¢s Mass¨² en Atenas 2004-, es un hombre consciente del valor de la simbolog¨ªa. Pega duro, y por eso le llaman Mano de Piedra. Juega atado a los violentos arranques de su prodigiosa derecha, y por eso le llaman Gonzo. Tambi¨¦n es un h¨¦roe de masas, comparte con Mass¨² la paternidad de la plaza Campeones Ol¨ªmpicos, de Santiago, y es un experto en expresarse sin palabras. De lo contrario, no habr¨ªa desfilado vestido de huaso, como se conoce en Chile a los agricultores y los ganaderos.

Acalorado y perseguido por el sonido de sus espuelas, Gonz¨¢lez, n¨²mero 15 del tenis mundial, de 27 a?os, fue elegido por votaci¨®n popular el abanderado de Chile en la ceremonia inaugural. Lleno de orgullo, se cubri¨® con los ropajes vaqueros de la Zona Huasa, situada en el centro y el sur del pa¨ªs y dedicada mayormente a la agricultura y la ganader¨ªa. La elecci¨®n de su vestimenta y su ¨¦xito -"dar medallas a Chile es un tremendo orgullo"- le han reafirmado como icono. Gonz¨¢lez tiene estatus de estrella en su pa¨ªs. En el aeropuerto de Pek¨ªn le recibieron decenas de c¨¢maras. Su romance con la tenista argentina Gisela Dulko ocupa decenas de portadas. Y nadie duda de sus condiciones de estrella.

"Gonz¨¢lez tiene mucho potencial", explica Francis Roig, el entrenador que acompa?a a Nadal en China. "Habr¨¢ que aguantar sus embestidas y hacerle jugar un partido duro, que son los que le van a Rafa", a?ade, "con la adrenalina muy alta" tras el fenomenal partido que gan¨® su pupilo en las semifinales contra el serbio Novak Djokovic. "Hay que tenerle mucho respeto", insiste; "Gonz¨¢lez es muy peligroso. Puede causar muchos problemas. Saca muy bien. La derecha es de las mejores del circuito y el rev¨¦s, si no va en carrera, lo pega muy bien. Tira cortado y fuerte. Por algo est¨¢ en la final".

El estadounidense James Blake, derrotado, acus¨® a Gonz¨¢lez de falta de deportividad. La relaci¨®n entre Nadal y el chileno tambi¨¦n tiene aristas de suspicacias extraoficiales. El espa?ol jug¨® contra ¨¦l en Miami cuando simplemente era un tenista efervescente de 18 a?os. Gonz¨¢lez dedic¨® el calentamiento a tirar bolas a la valla procurando no darle ritmo de partido. Gan¨®, igual que en los cuartos de final del Abierto de Australia de 2007, cuando arroll¨® a Nadal. No ha sido su ¨²nico episodio pol¨¦mico. El suizo Roger Federer vivi¨® con los brazos en jarras tres cuartas partes de la final que les enfrent¨® aquel a?o en Melbourne. Gonz¨¢lez interrumpi¨® un juego para cambiarse las zapatillas y otro para coger una raqueta nueva. Adem¨¢s, reclam¨® insistentemente varias bolas discutidas. Puro juego de trinchera. Una expresi¨®n secundaria de su tenis de rompe y rasga.