Te reto a la consola en el multicine
La crisis de las salas de cine lleva a una de ellas a reconvertirse en un sal¨®n de videojuegos con sonido digital, l¨¢ser y butacas vibratorias
En esta sala de cine, la pel¨ªcula es lo de menos. Mar¨ªa Zarzosa, de 19 a?os, encaja su cuerpo menudo en una butaca y fija la mirada en una pantalla de ordenador a poco m¨¢s de un palmo de la cara. Agarra un mando de videoconsola como si le fuera la vida en ello y se abre paso a tiros a trav¨¦s de Prypiat, una ciudad ucrania abandonada. El videojuego, Call of duty 4, se parece a la pel¨ªcula Black Hawk derribado, con una urbe infestada de escaramuzas callejeras con francotiradores ocultos. "?Salen de todos lados!", exclama Mar¨ªa. Se siente en medio del campo de batalla. El tableteo de las ametralladoras resuena en los altavoces. Las butacas vibran con cada disparo. Varios l¨¢ser rastrean la sala. De repente, irrumpe un chorro de humo.
Los rivales de Mar¨ªa se sientan junto a ella, en las butacas de alrededor, en la sala G de los cines Yelmo del centro comercial Islazul, en Carabanchel. Desde finales de julio, este espacio se transforma en una gran sala de videojuegos, cada tarde de los viernes, s¨¢bados y domingos (3,80 euros por hora). El viernes pasado eran unos veinte jugadores los que participaban en red. Cada uno en su butaca, con su pantalla y su mando (o teclado y rat¨®n). Todos contra todos. Uno de ellos es Mar¨ªa, que no puede pedir ayuda ni a su compa?ero, Carlos Mar¨ªn, de 22 a?os, que se sienta al lado. "Uf, eso ser¨ªa si pudieses encontrarte entre tanto jaleo", se excusa Carlos.
Las pantallas brillan en la oscuridad bajo una tenue luz rojiza. Nadie levanta la cabeza. Es ensordecedor el tiroteo en sonido digital surround 4.1 FX multicanal. Esta sala de cine reconvertida en sal¨®n de videojuegos es el proyecto Cinegames (una empresa asociada a la cadena Yelmo), que ha contado con un presupuesto de 250.000 euros, seg¨²n la compa?¨ªa. Es un modo de atraer nuevos clientes ante la ca¨ªda de asistencia a los cines, seg¨²n un portavoz. El a?o pasado recibi¨® un premio a la innovaci¨®n del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. Si funciona, lo llevar¨¢n a m¨¢s salas.
"Es m¨¢s divertido que estar en casa", asegura el t¨¦cnico de la sala, Rub¨¦n Gonz¨¢lez, de 18 a?os y estudiante de sistemas inform¨¢ticos. Otros discrepan. "He venido con los colegas para probar, pero prefiero la consola de casa", indica ?scar, de 21 a?os, aunque ha pasado m¨¢s de una hora a los mandos. La sala cuenta con 55 monitores individuales y, seg¨²n el t¨¦cnico, permite celebrar desde presentaciones de videojuegos a cursillos inform¨¢ticos y concursos de Singstar (un videojuego karaoke), adem¨¢s de proyectar cine. A partir de las cinco de la tarde se juega al Kung Fu panda (para los m¨¢s peque?os), y luego a las carreras del GTR2 y el TrackMania, y a los tiros del Call of duty 4. Eso s¨ª, hay que estar dispuesto a ser vapuleado. "?Es que aqu¨ª la gente viene entrenada de casa y hay cada freak!", resopla Mar¨ªa, despu¨¦s de ser tiroteada y resucitar varias veces en poco menos de una hora.
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