M¨¢s superficie, menos recursos

El aumento espectacular de la superficie de regad¨ªo en la agricultura andaluza -s¨®lo en la cuenca del Guadalquivir ha crecido en 400.000 hect¨¢reas en la ¨²ltima d¨¦cada, m¨¢s de un 60%- ha llevado a las cuencas de la regi¨®n, en especial la del Guadalquivir y la Mediterr¨¢nea, a una situaci¨®n casi insostenible, que se ha traducido en las importantes restricciones para las comunidades que cuentan con concesiones autorizadas.

A eso hay que a?adir los a?os de espera que llevan muchos agricultores para que se les regularice sus concesiones. En la provincia de Ja¨¦n, en la cabecera del Guadalquivir, m¨¢s de 60.000 hect¨¢reas aguardan desde hace a?os a ser legalizadas.

Todo ello ha servido de caldo de cultivo para que muchos regantes recurran a pozos subterr¨¢neos al margen de la ley.

Las hect¨¢reas de regad¨ªo han crecido un 60% en una d¨¦cada

"Las administraciones hidr¨¢ulicas tienen que ser m¨¢s flexibles y sensibles porque en muchos casos se trata de riegos de emergencia para poder salvar las cosechas", asegura Pedro Parias, secretario de la Asociaci¨®n de Comunidades de Regantes de Andaluc¨ªa, Feragua.

Parias admite, no obstante, que los organismos de cuenca tienen que actuar y controlar los posibles da?os al dominio p¨²blico hidr¨¢ulico, pero tambi¨¦n reclama un "trato igualitario" para que no paguen igual los que tienen concesiones reconocidas como aquellos que integran las "bolsas de pozos ilegales".

En esta l¨ªnea se enmarcan las denuncias de la llamada Plataforma Ja¨¦n por el Agua, unos 3.000 comuneros de seis comunidades de la provincia. Este grupo acusa a la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Guadalquivir (CHG) de "utilizaci¨®n pol¨ªtica" del agua al entender que se est¨¢ favoreciendo a otras comunidades en las concesiones para el riego.

"Estamos viviendo una situaci¨®n feudal donde impera el miedo entre los regantes a denunciar las situaciones de arbitrariedad que se est¨¢n dando", denunci¨® Rafael Ortiz, presidente de esta plataforma.